Saint Seiya: Guerra De Mundos [Libro 3]

‡EL COMIENZO,LA NUEVA GUERRA CÓSMICA SE APROXIMA‡

El cielo caerá.
El miedo llegará.
Y la vida en la tierra sucumbirá.

En el universo está,
La respuesta final,
La batalla hay que ganar.
Por qué un caballero lo logrará.

Dioses llegarán,
Buscando el poder obtener,
Pero no hay que caer,
Tenemos que ponernos en pie.

Tenemos que brillar.
Todo depende de nosotros.
El fin llegará acompañado de sufrimiento.

¿Que haremos?.

Luchar,no queda más.
Atena hay que proteger,
A esas deidades malvadas vencelas ya.

Un caballero lo logrará...

Es un ciclo eterno. Cada guerra santa parece querer volver. ¿Por qué?.

¿Acaso el esfuerzo de todos fue en vano?,¿Acaso las muertes de mis compañeros fueron en vano?,¿No importaron?.

Si al final cada uno de ellos volverá,supongo que sí.

Todo fue en vano...

A Atena hay que proteger...

Eso lo sé... Desde siempre lo he sabido.

He luchado por ella,no por órdenes,si no por que yo quise hacerlo... Y se que ahora necesitará nuestro apoyo más que nunca.

A esas deidades malvadas vencelas ya...

Las he vencido una vez,podré hacerlo de nuevo...

Un caballero lo logrará...

Eso haré... Soy un caballero de Atena,jure pelear por ella y por la vida de todos en la tierra.

¿Qué más da si muero?. Ya he muerto antes...

¿Que esperan?, Que esos Dioses ataquen ya...

—Seiya...

La guerra cósmica más grande jamás vista...

—Seiya...

Voy a pelear... Todo lo haremos...

—Seiya...

—Saori... —Susurre.

Estaba cansado de esto,ya no quería seguir pasando por esto,¿Por qué no para de una vez?.

De nuevo me sostenía en sus brazos. Estaba recargado sobre su pecho como aquella vez en la batalla contra Apolo, cuándo la vi en aquellas aguas.

—Seiya... —Susurraba ella.

La abracé,quería que al menos ella fuera real.

—Saori...

—Seiya... Comprenderás que debo matarte...—Dijo ella ya preparando su báculo.

Me separé de ella y extendí los brazos.

—No me importa si es en tus manos... —Respondí.

Siempre pasaba lo mismo,nunca podía decir más allá de eso. Siempre terminaba asesinandome,yo no podía hacer nada,antes de que yo tocara el suelo despertaba,pero esta vez algo extraño paso.

Ella acercó su rostro a el mío,y me susurró algo:

—La guerra cósmica se aproxima.—-Susurró.—Y no podrás pararla... Y tú mi caballero, sufrirás más que nadie...

Me desconcertó por completo,antes de que pudiera decir otra palabra ella clavo su báculo en mi abdomen,no sentí nada,solo veía como ella me miraba seria. Lentamente perdía fuerzas y antes de que tocará el suelo... Ella me sostuvo.

—Seiya... Despierta a él ejército dorado... —Me susurró muy cerca de mis labios.—Por favor... Hazlo por mí...

—Saori...—Dije casi con un hilo de voz.

Ella acercó sus labios a los míos y entonces,pude tocar a él cielo mismo,estaba bien,no sentía nada,no sentía dolor,no sentía remordimiento,no sentía tristeza... Estaba completo.

Antes de siquiera rozarla,ella me soltó y caí al suelo,mire como ella caía lentamente al igual que yo, cayó a un lado mío y veía como se formaba un charco de sangre a su alrededor,aquel vestido que siempre llevaba se tiñó de un rojo profundo.

Me mire a mí mismo y no tenía nada en mi abdomen,estaba bien,me puse de pie y mire el cuerpo de Saori.

—Aunque trates,nunca podrás superar el pasado...—Dijo una voz profunda y femenina de quién sabe dónde.—Por qué vive en tus recuerdos,y de ellos nunca te librarás...

—Saori.—Susurré llorando,mientras la tomaba en mis brazos.— Saori no te vayas,por favor... No te vayas... — Uní nuestras frentes.—Te necesito...

Pero su cuerpo desapareció de la nada,ahora no estaba,mire a todas direcciones pero no estaba,entonces sentí un frío aire tras de mí.

—Seiya... ¿Por qué?.

Era Saori,sus cabellos estaban alborotados,su vestido estaba cubierto de sangre,su rostro no parecía al de ella.

—¿Por qué Seiya?.—Pregunto casi gritando.—¿Por qué permitiste que me matarán?,¡Dime,¿Por qué?!.

La mire atónito,parecía desesperada. Me asusté mucho e intenté calmarla pero no podía tocarla.

—Recuerda caballero ateniense... Del pasado no puedes huir... Aceptalo de una vez...

Saori se alejó de mí lentamente hasta que desapareció. Caí de rodillas al suelo.

—Quizás no pueda olvidarme del pasado jamás... —Murmuré.—Pero si podré afrontarlo.

Me puse de pie y entonces vi aquella sombra gigantesca frente a mí.

—No... ¿Que es lo que haces?.

Trace las estrellas mi constelación.

—Afrontando mi destino...

—¡No!.

Corrí a ella con la esperanza de golpearla. Alcé de nuevo mi puño en contra de los Dioses.

—¡Meteoros de Pegaso!.

“Así un humano vaya en contra de los Dioses,puede vencer sin ser castigado”