.LA SUERTE DE UN MONTES.

.El nuevo hogar.

-Estamos en tu nuevo hogar Alex...Dicé Andres sonriendo...

-Ahora... se detiene...

Espera ¿qué?...

Melani me empujó a un rincón, y me lanzó sus armas...

-Elijé uno...

Ella empezó a correr hacía mi, me hibá a asesinar, el temblor de mi cuerpo no me dejaba, soló me puse de rodillas y cerré los ojos...

Ella se detuvó, y solto su arma...

Abrí mis ojos, las cosas que estaban a mi lado apuntaban hacía ella, Melani se encontraba con las manos alzadas trantando de suplicar...me levanté tratando de tranquilizarme... y los aparatos se cayerón...

-¿Qué rayos fue esó?...dijé temerosó...

-Esé es tu poder... Tu puedes controlar cosas con tu mente, pero solo funciona si estas en peligro...

¿El karma era un poder?... ¡¡¡Están locos!!!

-Me las pagarás... dijó Melani moviendo su cuello...

La levanté del piso, mi cara estaba roja de la vergüenza, mis palabras se detenían...

Su mano se alejó de la mia...

-Tranquilo, no duele, solo fue un golpesito...

¿Golpesito?... su muñeca estaba herida...

-Lo siento... no se como manejarlo...

Blake me miraba con rabía, sabía que había dado una mala impresion...Andres solo sonreía como loco, me ponía de "puntas"...

Ellos se dirigían a una gran mansión...

¿Su descripción?...

Era de tres pisos, tenía un hermoso jadín, una puerta de madera se abría en mi cara, al entrar, una sala llena de sillones lo recorría, la cocina era luminosa y creativa, al subir, unos cuartos cubrían todo su espacio, un cosquilleo llegó a mi cuerpo, cada cuarto tenía su nombre agregado...

El primero era de Melani... al entrar, un perfume de lilas llenaba su habitación, sus ventanas rosas, su cama reflejada por la luz, su closét lleno de ropa y un apartado de armas, muy grande...

El segundo erá de Andres, su aroma era de montañas...¿raro... verdad?... su cama se obscurecía por las cortinas azules...¿su closét?... pequeño...

El tercero era de Blake...no tenía aroma y su cama erá un poco infantíl, su closét erá pequeño y muy poco usado...

Y por último... el cuarto... esté... tenía mi nombre... al entrar el aroma a nuevo me profundizó...mi closét tenía ropa con armadura... y mis ventanas erán verdes...

Algo demasiado perfecto...