Capítulo 32- El hijo pródigo

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Mis abuelos paternos, mis tíos, primos, hermanos y amigos... mi casa era una locura de gente... todos estaban ahí para recibirme de nuevo "a la vida" como dice mi madre... algunos de ellos lloraban, como mi abuela Miriam, me tuvo un buen rato diciéndome que estaba demasiado grande y hermoso,, no cambiaba más siempre era el nene para ella. Betty y Carlos me abrazaron y lloraban como si fuese un hijo más. Mis hermanos, no puedo explicar la felicidad que tenía de verlos a los 3, pero lo de Thomas me dejó helado...

-Thomas: estás en casa otra vez y estoy feliz por eso... perdóname por no haberte cuidado... eras mi hermanito y yo sólo creí que podías sólo, eras un niño ¡mierda soy un imbécil!- y lloraba-

-Christian: de que hablas tonto, tú también eras chico, ya pasó y si... siempre vas a ser el imbécil de mi hermano, pero de todas maneras te quiero y lo sabes- lo abracé- y deja de llorar marica

Todos reían por nuestro momento, a pesar de todo, no perdía mi personalidad- abracé a todos... si a todos... porque es lo que querían por el dolor de mi infancia y por la felicidad de mi regreso, era momento de exponer mis sentimientos, como me lo pidió la Dra. Mónica, y así que lo hice-

-Vanesa: oye hoy sí que estás solicitado eh- escuché su voz cuando estaba distraído hablando con Julián y Ariadna-

-Christian: faltabas tú... - sólo me quedé mirándola porque no sabía cómo reaccionar, hasta que ella decidió por mí y saltó a mis brazos como una niña a los brazos de su padre- mi pequeña

 - sólo me quedé mirándola porque no sabía cómo reaccionar, hasta que ella decidió por mí y saltó a mis brazos como una niña a los brazos de su padre-  mi pequeña

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Creo que descolocó a todos... incluso a mí, totalmente, así fue. Nos besábamos como si de eso dependía nuestra respiración, ella estaba agarrada a mi rostro y yo apretaba su cuerpo al mío, ambos llorábamos, la verdad que no sé que es lo que sentía, emoción, felicidad, ¿caí en lo que me pudo haber pasado?... no sé, lo cierto que disfruté ese beso hasta que nos interrumpieron con sus "ejem" inoportunos, así que nos separamos

-Vanesa: ¡bienvenido a casa! - me dio un último beso y tuve que bajarla-

- Claire: bueno bueno, ¿que fue eso? jajjajjajajaj- logró avergonzarnos mientras todos reían-

-Christian: ¡fue algo que no te importa tonta! vente acá- la agarré de su muñeca y acerqué mi rostro a su panza- hola sobri... soy tu tío, ya estoy en casa y espero ansioso tu llegada- le hablaba a la tripa de mi hermana en voz baja y le di unos besos-

-Julián: ahhh pero que tierno eres... ese lugar te dejó cursi amigo, primero el beso de película con mi hermana y ¿después esto?... que tú no eres el mismo ahhh... hay que investigar esa cabeza tuya- dijo golpeándome en la frente- estoy feliz que estés aquí viejo, de verdad

-Christian: ¡gracias hombre!- caminamos abrazados hasta la mesa en donde nos esperaba un banquete que preparó mamá para recibirme-

Esa noche después de hablar muchas cosas con la familia, reír, llorar y reflexionar me fui a dormir a mi vieja habitación, en donde estaban muchas de mis cosas... me acomodé en mi cama y aparece alguien asomando la cabeza por la puerta... mi pequeña hermana

Rebelde porque si  #TintaAwardsDonde viven las historias. Descúbrelo ahora