내 금지 된 사랑 (My forbidden love)

NINE (TWO OF TWO).

Nos sacamos nuestros calzados en la entrada. Mark había entrado hacia su habitación para cambiarse, mientras que yo, miraba la pecera que se encontraba en el living. Cada vez que venía aquí apreciaba los peces como si fuera la primera vez, había de varios colores como negros, dorados y naranjas.

_ Jin_ Me di vuelta y en sus manos tenía al parecer prendas_ Para que te cambies, te puedes resfriar si sigues con la ropa mojada. Puedes ir a mi habitación o el baño, como más gustes.

_ Pasaré a tu habitación, si no te molesta.

_ ¿Cómo me molestaría? Adelante.

Voy hacia él, agarro las prendas y entro en la habitación, una vez ya cerrada la puerta me siento en su cama. Había un pantalón deportivo color gris y una camisa blanca, las acerco a mi cara y las huelo.

_ Tiene su olor_ Susurro con una sonrisa en mi rostro. Sin más, me desvisto, me coloco la ropa y salgo.

Narrador: Mark.

Mierda.
Lo único que se me pasa por la mente, la camisa le quedaba al cuerpo y hacía resaltar su espalda. Sentía que me iba a desmayar.

_ Silbo_ Wow, Jinyoung-ah_ Mientras se acercaba a mí, su carita se había puesto roja y trataba de esconder una sonrisa, amaba ponerlo vergonzoso.

_ Necesito tomar algo_ Dijo y salió corriendo hacia la cocina. Es un bebé.

_ Pondré música.

_ ¿Quieres algo de tomar?.

_ Sí uno de uva, por favor_ Y comenzó a reproducirse la música.

_ OoOoh OoOoh, i'm tryna get you in the mood. OoOoh OoOoh, baby just show me what it doOoOOOoOo.

Y comenzó a bailar con la lata en la mano, si así era sobrio no me puedo imaginar ebrio. Cantó hasta que terminó la canción, la que continuaba era Move de Taemin.

_ ÉSTA ME LA SÉ TODA_ Corrió y dejó su lata en la mesa.

Yo me senté en el sillón y él comenzó a bailar delante mío. Esto va a terminar mal.
Iba ya por la mitad de la canción y sentía que me moría, sus movimientos, sus gestos. Sentía calor.

Terminó la canción y se sentó al lado mío.

_ ¿Y si vamos al balcón?_ Dio un suspiro grande_ Tengo calor_ Yo igual.

_ Vamos.

Corrí la cortina y la ventana, el aire estaba frío. Jin estaba con sus codos recargados en la baranda estaba todo oscuro y podía ver las luces de edificios. Lo abrazo por detrás apoyando mi mentón en su hombro.

_ ¿Cómo estás?_ Le pregunto.

_ Cuando estoy con vos, estoy más que bien_ Me mira y sonrío.

Tan hermoso.

_ Yo igual, nunca lo dudes.

La noche concurrió con karaoke, risas, juegos y abrazos.