Pasión desenfrenada entre 4

Capítulo 3. Pasión desenfrenada (I parte)

Despierto y estamos los 3 en mi cama, anoche fue tan intenso que nos quedamos casi hasta amanecer y se nos olvidó bajar las persianas, el sol entra de manera inclemente y me quiero parar a buscar el control remoto para bajarlas, pero tengo un par de piernas sosteniéndome. Que placer el despertar al lado de estos sementales.

Como puedo me paro, buscando no despertarlos. A la final es tanto el esfuerzo que se me ha volado el sueño por completo, así que me decido por buscar la cámara y tomar unas fotografías únicas, en algunas se les ve el rostro y otras no, las que tienen el rostro son para mi uso y disfrute y las otras, luego de editarlas un poco para que no los reconozcan, podré usarlas en alguna que otra publicación, donde halla pasajes gay.

Aunque me dedico a editar libros eróticos, nunca he trabajado con un libro 100% homo, pero sí de orgias y sado, aunque el último no me va mucho, puede que una nalgada o una que otra pequeña cosa, pero nada muy rudo, tampoco me va la dominación, pero no hay nada más delicioso y excitante que un juego sicológico y de roles.

Cuando tengo más de 200 fotos pienso que por los momentos tengo suficiente material y bajo a la cocina. Prendo la cafetera y pongo a tostar unas lonchas de pan untado con tomate y aceite de oliva, acompaño con un buen jamón curado, jugo de naranja y queso manchego, así como una tortilla fría de patatas, cebolla y chistorras que tengo en la heladera; parece más bien una cena, pero tenemos que tomar en cuenta que es más de mediodía y con las energías que gastamos anoche, creo que hasta un gazpacho nos deberíamos tomar.

Subo a despertarlos y que sorpresa cuando los encuentro conversando en la cama, siempre imagine que su reacción sería completamente diferente y que no se sentirían a gusto con la situación, sin embargo lo han tomado de la mejor manera.

Me dicen que me estaban esperando para tomar una ducha los 3 porque han decidido jugar el juego a ver que va a pasar, tomamos una ducha rápida en la cual nos ponemos en trencito, aprovechando que mi ducha es doble, otro juguetico bien pensado y como no esperarlo termino empotrada en la pared, mientras Mauro, me succiona todo mi ser y me deja a punto de acabar en boca y Ian juega con mis pezones mordiéndolos y templándolos, yo no tengo fuerza para más nada sino para gemir y sobre todo para maldecir cuando me prohíben correrme con la fuerza que deseo. Al final los veo reír a más no poder mientras me dicen, que se los debía por las veces que se los hice anoche.

Lo que ello no se han dado cuenta es que en el juego yo llevo las de ganar y los dos tienen sus miembros completamente erectos, así que decido que como ellos no me van hacer correr, me subo a mi cama de forma sugerente y busco mis juguetes, mientras que lubrico mi ano y busco el dilatador identificado con mi nombre -casi olvido comentarles que tengo 4 uno para cada uno, identificado con los nombres y de colores diferentes- los veo de manera tentadora y los obligo a verme sin tocarse, ellos mismos, pueden hacerlo entre ellos –se que todavía no lo harán, es muy pronto- mientras que yo me doy placer, cuando me corro veo que he logrado el cometido, ellos se han corrido al mismo tiempo que yo y sólo viendo. Siendo que cada día me enamoro más de esta situación y me empieza a dar miedo.

Casi desmayada luego del orgasmo, decidimos darnos una ducha rápida e individual, porque de otra forma no saldremos nunca del cuarto.

Lo único que me coloco es una tanga negra completamente traslucida, que no deja nada a la imaginación y les explico que lo hago por medida de higiene, que es la única pieza de ropa que podré usar esta semana y sólo será fuera de la habitación o cuando ellos me lo pidan.

Los preservativos son sólo para sexo anal, porque todos estamos limpios y Becca y yo nos cuidamos, así que no hay riesgo de embarazo, ni de ninguna ETS.

Cuando estamos desayunando entra Becca y nos dice que nos quiere enseñar algo, la obligamos a que se desvista, porque en la casa está prohibida la ropa, a lo que ella obedece rápidamente desvistiéndose de manera descarada y provocadora, insinuándose a los chicos, mientras que hace amago de penetrarse con un dedo y pone cara de niña traviesa, mientras que niega con la cabeza.

Los dejamos con el asta a medio izar y caminamos al estudio, de manera sugerente, jugando cada una con nuestros pezones, inclusive de vez en cuando succiono mi dedo como si fuese un falo. Enciendo la PC y la conecto a la TV de 52 pulgadas, para ver la peli que nos trajo Becca –ellos no imaginan quienes son los protagonistas- quedan extasiados cuando empieza la reproducción de todo lo que sucedió anoche en el reservado, eso nos enciende a los 4 y siento como Mauro me empotra contra la pared fría de vidrio, le pido que me deje dar la vuelta y abro los ojos imaginando que todo el que pasa nos ve cogiendo, que morbo tan grande siento.

Mientras esto sucede, veo de reojo, como Ian desesperado, busca un preservativo y le da duro a Becca por detrás, justo a nuestro lado, a ella le mata el sexo anal. Nos ponemos de acuerdo, solo con la mirada y logramos corrernos los 4 al mismo tiempo.

Que compenetración tan grande debe existir como pareja para lograr esto. Ian va a deshacerse del preservativo mientras que nos quedamos tendidos en el sofá del estudio, hablando como si todo fuese de lo más normal

Pasamos toda la tarde viendo pelis y dormitando,preparamos la cena y luego de comer, Becca se arregla, debe acudir a la disco acumplir su turno, dice que para no interrumpir nuestro sueño regresa cuando sedespierte mañana y que luego de eso no nos desharemos de ella por el resto dela semana.