Pasión desenfrenada entre 4

Epílogo. Nuevo juego, nuevas reglas.

Amanecemos con una gran resaca, nos duchamos juntos, nada erótico, todo muy sensual, el dolor de cabeza por la resaca no nos permite hacer mucho. Bajamos a preparar el desayuno y sobre todo a tomar agua y café para calmar este malestar, anoche nos tomamos más de 4 botellas de vino, sin contar las experiencias que vivimos, no sé si la resaca es por el vino o por el exceso de ejercicios, caímos rendidos después de las 4 de la mañana, ya teníamos más de 8 horas de sexo duro.

Durante el desayuno doy gracias a las chicas; si no hubiese sido por el juego que inventaron, seguiríamos como antes y no hubiésemos aclarado la relación sentimental y sexual existente entre nosotros, la sensación de tener esta nueva familia no la estaríamos experimentando.

Acordamos que como pareja de 4 que somos, debemos casarnos juntos, claro lo de la pareja de 4 no debe salir a la luz pública, es nuestro juego y nuestro mayor secreto. Es hora de establecer nuevas reglas.

Este juego marca un antes y un después en la vida de cada uno de nosotros y no es solo por el hecho que de él nacieron dos nuevos matrimonios, es el cómo convivir en familia, como amar, como fijar reglas y límites y sobretodo como jurarnos fidelidad siendo cuatro y no dos, manteniendo el respeto, la individualidad y a su vez la colectividad.

Si vivir en pareja es difícil, solo imaginen que su pareja es de 4...

Cuadramos mudarnos para las casas de las chicas, ya que están construidas de forma tal que nos mantendremos juntos, pero no revueltos, seguiremos siendo cuatro pero uno, uno pero dos, mantendremos ciertas reglas:

Existirán días individuales y colectivos, la puerta que separa ambas casas se mantendrá abierta a menos que deseemos estar solos con nuestra pareja individual; la piscina será terreno neutral, porque pertenece a ambas casas por igual, así que si quieres individualidad no te acerques a ella.

Está prohibido utilizar algo adicional a la ropa interior dentro de las casas, las escenas se seguirán filmando, pero tenemos derecho a apagar las cámaras ocasionalmente. Entre nosotros el sexo es libre, pero como no usamos preservativo está prohibido correrse en la vagina de la otra chica, queremos evitar el no saber de quién será el hijo que engendre nuestra mujer.

Imaginamos como haremos el día que tengamos hijos, ¿nos turnaremos la casa? ¿la niñera se quedará con los todos los niños?, lo importante siempre será mantener esta unión, complicidad y el disfrute pleno de nuestra sexualidad, sin tabúes ni tapujos.

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Pasan los días, los meses y los años, y las reglas van cambiando, igual que lo hace una pareja habitual, cada día disfrutamos más del sexo entre nosotros, hemos incluido eventualmente un quinto elemento, él es neutral, no tiene derecho a participar en el juego a menos que nosotros decidamos incluirlo, hasta los momentos lo máximo que había hecho era tocarse y correrse mientras que nos veía y retrataba, pero hoy todo cambio repentinamente y decidimos incluirlo en el juego.

Ya no somos cuatro, ahora somos 5, quien sabe si algún día seremos más, mientras tanto nuestros hijos duermen inocentemente en su habitación con la niñera y nosotros damos rienda suelta a la pasión desenfrenada que llevamos dentro.