Recuerdos del inicio mas importante de mi vida * Vegeta y Bulma*

Capitulo XIV Una noche de amor, fresas y chocolate

Por Bulma

La fiesta fue al aire libre, aburrida, en realidad mi mente divagaba por todos lados menos en el lugar donde estaba, estuve con unos inversionistas casi toda la noche, pero había un hombre que no se despegaba de mi en ningún momento, yo lo conocía, era dueño de una empresa muy importante. El intentaba seducirme por todos los medios, me invitaba tragos, me decía que estaba hermosa que hacia sola, intente ser cordial y amable con él y a la vez tratar de zafarme de él... asi casi ha transcurrido toda la noche, me retire del lugar a eso de las tres y fui directo a casa, la brisa era un poco fría pero agradable, al llegar fui a mi balcón directamente, con una fuente de fresas con chocolate me puse a pensar en todo lo vivido con vegeta en todo este tiempo, cuando vino era tan desconfiado, pero siempre preferí no tenerle miedo, recuerdo que a veces tenia pesadillas horribles ,que a medida que me fui acercando a él fue cesando pero no del todo, aun no dejo de recordar su cara de angustia, ese hombre ha sufrido mucho nunca olvidare que me dijo alguna vez que una vez ha tenido que cazar a un extraterrestre humanoide para comérselo por falta de comida en una de sus tantas misiones, casi vomito al escucharlo, mi madre tenía razón aunque la verdad no sabía exactamente qué pasaría con nosotros después de los androides, esto se veía difícil y muy incierto aun.

Por vegeta

Fui a las montañas cuando tuve una pelea con Bulma, en realidad no quise tratarla asi pero conforme pasaba el tiempo aun no conseguía esa transformación y eso me enfurecía, estuve meditando todo este tiempo, la humana me importaba y no podía apeligrar su vida para poder lograr convertirme en súper saiyajin, la he extrañado aunque me niegue a mi mismo mil veces y solo por eso volvía cada noche a verla desde lejos, no podía dejar de verla, y pensar en la amenaza de los estúpidos androides y yo sin convertirme no tendré oportunidad de acabar con ellos ¡maldita sea! Tengo que lograrlo de una vez.

Volví a verla esta noche y parece ser que iba algún lado, pensé por un momento que ella estaba con otro insecto y me enfurecí, me di una ducha, cambie ropa y me dispuse a seguirla pero descubrí que era una de las ridículas reuniones de los humanos, me coloque en un lugar donde nadie pudiera verme (un árbol) y la miraba desde ahí, todo era normal excepto un insecto que no la dejaba de acosar, tenía pensado en mandarle una ráfaga de ki para acabar con el de una vez pero eso solo sería otro problema con ella, me aguante y me puse a reflexionar por mi propia reacción " esa humana definitivamente tiene algo, que no logro descifrar, jamás me sentí asi, ni tuve miedo de perder a alguien, definitivamente no dejaría jamás que otro la toque, cualquiera que lo intente morirá". Aunque no demuestre afecto cotidianamente no significa que no lo sienta, aun es una lucha interna en mi, pensar que en mi despertaron estos sentimientos de humanos y es difícil aceptarlo, de hecho todavía no lo he hecho, no del todo aun.

Cuando por fin salió de la reunión la seguí y al ver que iba a su casa me adelanté en ir allí, la vi de nuevo en el balcón estaba sucumbida en sus pensamientos y ese vestido hizo que encienda mis ganas por ella, era adictiva para mi aunque he intentado mil veces sacarla de mis pensamientos es imposible, cuantas veces ha pasado por mi mente acabar con su existencia, pero simplemente no podía, la amenazaba y ella seguía intimidándome, hasta incluso la ultima vez pensé en matarla pero no puedo hacerlo ,no creo que me he vuelto débil, ella se convirtió en mi debilidad.

La vi llorar y comer en silencio y me pregunto que estará pensando, no me gusta verla asi.

Por Bulma,

No sé ni en qué momento salieron de mi las lagrimas, pero en realidad era mucha presión para mi pensar en que esto no puede funcionar, o en todo caso que los androides acaben con todo.

Después de un buen rato escuche la voz de alguien que hace semanas extrañaba escuchar.

- Se puede saber por qué lloras mujer dramática – dijo él en un tono suave detrás mío