13.

208 22 8
                                    

Capítulos especiales (02/04)

La chica de cabello castaño había salido corriendo sin pensar siquiera en detenerse. No era para nada una persona con buena resistencia física, sin embargo, sabia que esto no iba del todo bien, así, sin darle importancia a su respiración entrecortada y su cansancio evidente siguió corriendo sin la posibilidad de detenerse por nada del mundo.

El rubio celebro su victoria ante Kaito, otro partido ganado. Salto del sofá señalando su victoria, Miku rio al igual que Luka y el peli azul bufo.

- No es justo, te dije que era mejor para jugar en FIFA - Se quejo el chico cruzándose de brazos.... Vamos, había ganado todos los partidos hasta que a Len se le ocurrió cambiar de juego, diciendo que para era mejor jugar el nuevo PES 2020 - Pido revancha - Dijo acomodándose para un nuevo partido. Apretó el mando entre sus manos.

El rubio rio levemente, miro el teléfono y volvió a su jugar en el sofá - Vale, pero espero que sepas perder esta vez - Comentó, Kaito solo sonrió de vuelta. Acabada de anochecer, pero no era excesivamente tarde. Len estaba tranquilo, pues su hermana le había dicho con anterioridad que saldría con Meiko, aun era temprano y confiaba en que todo saldría bien.

Sin embargo, cuando apenas la pantalla de carga había acabado anunciado el comienzo de un partido nuevo, la puerta de la casa se abrió de golpe.

- ¡Len! - Meiko grito casi en un preinfarto y no pudiendo sujetarse de la puerta cayo al suelo en una mala maniobra. El juego se pauso, y al Kagamine pareció que el mundo se le venía encima.

¿Por qué Rin no venía con ella?

Salto del sofá y corrió a socorrer a Meiko como todos los demás, le ayudo a sentarse y ella le miro con culpa. ¿Por qué todo se sentía tan sofocante ahora?

- Perdoname Len, solo la deje un segundo para ir por una bebida y ella.... - Se detuvo, aun no se recomponía de la carrera que acababa de darse.

El rubio sufrió el mayor miedo de su vida. Su corazón latía con tanta fuerza que podría sentirlo cualquiera, trago saliva y tomo a Meiko por los hombros - ¿D-donde esta Rin? ¿Es una broma verdad? - Preguntó. Su hermana era especialista en jugarle bromas pesadas y estando en compañía de Meiko no dudaba que esto se trataba de un intento por asustarlo.

Pero la chica de ojos marrones lo negó, y por su expresión pareció que todo era verdad - Ella salió corriendo y cuando logre encontrarla se estaba llendo con un chico rubio.... Se fueron.... En un auto con tejado desmontable - Dijo, Luka se acerco y abrazo a Meiko, Miku le dio un vaso de agua y el rubio se había quedado congelado.

- ¿Un chico rubio dices...? ¿Cómo era? - Pregunto temiendo lo peor. Meiko le miro preocupada.

- No lo sé... Era rubio, se parecía mucho a ustedes dos, tenia el cabello un poco más corto que el tuyo, pero más alborotado - Le describió, en realidad tampoco había mucho que decirle, solo lo había visto de lejos.

Pero su descripción pareció ser suficiente para Len. Él trago saliva y luego de salir del trance salió corriendo hacia afuera. Len apretó sus puños y salió corriendo tan rápido como pudo, contuvo sus ganas de llorar y sin embargo al llegar lo suficientemente lejos sintió que moría por dentro y con esa misma sensación cayo de rodillas al suelo. No pudo seguir haciéndose el fuerte y las lagrimas comenzaron a brotar y caer por sus mejillas, llevo ambas manos hasta el rostro y golpeo el suelo en un impulso - ¡Rin! - Grito de impotencia.

Todo era su culpa, debió cuidarla mejor. Volvió a golpear el suelo con más fuerza logrando lastimarse sutilmente sin dejar de llorar, tampoco es que sintiera un dolor más grande para él que estar lejos de la persona más importante en su vida. Y cuando estuvo a punto de volver a golpear el suelo, su mano fue apretada.

REVUELTOSDonde viven las historias. Descúbrelo ahora