Perla
Ir a un paseo de la Universidad, me es divertido, pero no cuando tengo un mal presentimiento... intento comunicarme con la única persona que se me puede calmar en estos momentos.
Raúl...
Pero no, no contesta su celular, desde esta mañana él no responde su celular y mi miedo crece aún más, pero es aún peor cuando tu celular y las coberturas no colaboran, son las 4 pm y el profesor da una noticia acta para mí en estos momentos.
-Chicos, debemos volver a nuestras casas, el sitio donde nos alojaríamos, tuvo un percance por lo que no permiten la entrada a ninguna persona por la seguridad de la misma, por favor suban al autobús, la actividad la haremos otro día.
No espero dos veces la misma orden y subo al transporte, siento como si todo fuese en cámara lenta, pero ya comenzó a avanzar nuestro vehículo.
Vamos a mitad de camino y este mal presentimiento no disminuye, mi celular suena y espero que sea él quien me ha respondido él mensaje, pero no.
Jefe: Perla, has visto o hablado con Raúl... no contesta su celular... tampoco lo hemos visto y estoy preocupado, él nunca desaparece así.
Perla: No, también tengo un mal presentimiento, espero poder llegar a casa pronto, te aviso si se algo de él.- su respuesta no tarda en llegar.
Jefe: Gracias Perla, intentare contactarlo.
Comienzo a llamarlo una y otra vez, necesito oír su voz, sigo marcando una y otra vez su número sin obtener respuesta, veo que ya estamos llegando a casa, ya es de noche, las calles están solas, miro la hora y mi celular marca 7:45pm. Veo la parada de la calle donde vive Raúl y me bajo.
Camino lo más rápido que puedo, pues de la parada a su casa hay 30 minutos caminando. pero esta era la parada más cerca entre mi Universidad y su casa.
Siento un miedo que no puedo explicar mientras camino entre las calles oscuras y solas, miro de nuevo la hora 7:55pm y me desespero, comienzo a correr a su casa, todo lo que me dan los pies, pues caminando solo había avanzado dos cuadras.
me detengo a tomar el aire que me falta y miro la hora 8:10pm. como rayos es que he tardado tanto en llegar, vuelvo a retomar mi carrera a su casa y consigo las luces de afuera encendida y me calmo un poco, por lo menos se que esta en casa, busco mi llave y abro la puerta, lo que encuentro en ese momento me da un escalofrió, este no es Raúl...
Una cuerda cuelga del techo con un arco bajo, lo suficientemente ancho para meter una cabeza, y el dueño de mis pensamientos, esta metiendo su cabeza en esa abertura, lleva solo una pijama.
-¡NOOOOOOO!- grito y corro hacia él, quien parece en una especie de trance. lo abrazo y siento como su mano toca mi cabello, inclino mi cabeza hacia atrás y veo sus ojos negros, se nota que ha estado llorando, al verme bien sus lagrimas comienza a salir- baja de allí mi gigante- pido pero él niega con su cabeza.- baja por favor- pido de nuevo mis ojos se cristalizan y mis lagrimas comienzan a salir , veo que él no se mueve, me sujeto de él y subo a la superficie en la que el esta parado y lo observo, él no me mira a mí, tiene su cabeza gacha y su mirada en el suelo.
-¿Que ocurre mi gigante?-Pregunto en un susurro, él sigue sin decir nada, solo mira el suelo. - Dime por favor ¿Que ocurre?
-Te falle a ti y a Mariana- susurra y su voz esta tan ronca que da miedo.
-¿En que nos fallaste mi amor?-Pregunto la verdad no entiendo que tengo que ver yo con su ex.
-Las engañe, engañe a Mariana... y a ti te ilusione con una vida a mi lado, cuando yo ya tengo una pareja a la que no debo engañar.
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Un Amor para Dos
RandomDespués de 7 años, sigo recordando a esa joven que entro en mi alma en cuestión de días y a quien ame y adore, por quien di todo lo que pude encontrar, Mariana... Después de 7 años sigues en mi corazón, aún dominas mi alma... Hoy hace 7 años que l...