Un Amor para Dos

Es necesario avanzar

-La amaras más a ella que a mí, formaras una familia con ella, serás feliz y te olvidaras de mí- dijo ella cubriendo sus rostro con su cabello rojo.

-No te olvidare, el día que forme una familia o comience una relación te seguiré  recordando Arí es solo que necesito avanzar, simplemente quiero lo mejor tanto para tí como para mí.

-Te hace daño recordarme- aseguro ella y yo negué con la cabeza.

-Me hace daño que mi vida siga pasando y ver a todos avanzar mientras yo sigo atado a tí, te prometo que nunca me olvidare de tu amor o tu cariño, mis momentos contigo, esos nadie los puede remplazar, simplemente  creo que es necesario que avance en mi vida a nivel personal y sentimental.

-Sientes algo por ella- aseguro nuevamente vi como comenzó a desaparecer su cabello rojo y comenzó a notarse el cabello rubio sus ojos grises comenzaron a cambiar azul, ese azul que desde que lo ví me distrae y hace feliz.

-Raúl- oigo a lo lejos... - Raúl-

-Ella te llama, solo recuerda que yo también te amo y espero que seas feliz- dijo para luego desaparecer.

-¡Te Amo Arí!-Grite.

-Raúl, despierta es tarde- Era la voz de Perla, desperté y me conseguí a esta chica vestida con una pijama de oso, como cada día desde que vive conmigo,  y cada pijama que usa, la hace ver tierna y dulce.

Perla lleva al rededor de 15 días viviendo en mi casa, y si sigo durmiendo en el mueble, y aunque  ni yo me creo esto, pero su presencia en mi casa me alegra el día y la noche, amo su forma de ser tan dinámica e infantil, después de nuestra rutina matutina salimos al trabajo.

-Hoy al terminar mi jornada de trabajo buscare a donde mudarme- me aviso ella- así que tardare un poco más - eso me entristece, me gusta su compañía.

-¿Tan pronto? - Ella asiente y yo niego- No, te quedaras conmigo- dije y vi como negó. 

-Necesitas tu espacio- afirmo a ella- dormir  en un mueble no es nada cómodo- dijo con  unas sonrisa. cuando llegamos a la librería, me despedí de ella y me dirigí a mi trabajo.

Mi relación con Val  y Arí cambio, Val esta molesta por la presencia de Perla en mi hogar y Arí... bueno esa   pequeña celosa solo se deja guiar por su mamá  y no puedo negar que me duele y la extraño mucho, pero se que debo avanzar, en esta vida es necesario avanzar al paso del día y yo desde hace 7 años, no avanzaba.

Hoy es un nuevo día, un nuevo comenzar, metas nuevas ....

Llegar a mi trabajo fue mala idea, no lograba concentrarme, saber que ella se iría me afectaba... no se que es lo que siento por ella en si... pero su actitud y su vitalidad ... sus ánimos y ganas de vivir me contagian y me animan a avanzar. Después de mi jornada laboral  en la que sentí que no rendí nada, me fui a casa, llegar aquí y no encontrarla me hizo sentir solo de nuevo... vació... como si no tuviese el cariño de alguien.

Pasaron al rededor de dos horas y Perla aun no llegaba... si así eran estas horas no quería imaginar como sería cuando se fuese. Minutos después  la puerta sonó, con toques tan tímidos, como los que sonaban cada mañana y noche en mi baño.

camine de la sala a la puerta y abrí y allí la vi con su cabello amarrado en coleta de caballo, una camisa con su nombre y el de la librería y un jeans desgastado y convers. entro  con una sonrisa. 

-Tenemos que festejar- dijo mientras hacia su camino a la cocina  saltando de alegría-Pero...- se giro bruscamente y sonrió con malicia -Festejaremos a mi modo.

Esto me parece mala  idea, pero la complaceré, total tan malo no puede ser.