Ruptura

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Boomer P.O.V

Las cosas ya no eran las mismas... ya no éramos felices.

-Kaoru, tenemos que hablar- exclamó serio.

Desde que nos hicimos novios las cosas iban de mal en peor, estuve tres años enamorado de ti así que el día en que me dijiste 'si' cuando te invité al cine fui el hombre más feliz del mundo.

Fuimos a un café pero parecías demasiado aburrida, me alegra que te hubieras quedado por más aburrido que yo te hubiera parecido.

-¿Qué pasa?- preguntó extrañada.

Las cosas iban normales desde un tiempo, me pareció que cada vez que nos veíamos disfrutarás más las citas y así me lo dijiste.

-Yo... perdoname- dijo triste.

Nunca pensé que alguien como yo te pudiera conquistar pero debo decir que fue más a los consejos de Butch ya que en cuanto paraba y empezaba a ser yo mismo te aburrias, mientras que cuando trataba de ser más arriesgado te divertías más.

-Ve al grano, Boomer- dijo seria.

Y tu eras tan intensa conmigo que a veces no sabía como competir contra ti.

-Esto ya no funciona- suspiró apartando la mirada avergonzado-Creo que deberíamos terminar-

Lo lamento, hubiera querido que las cosas no terminaran así.

-Sabía que tarde o temprano lo dirías- dijo con cierta tristeza negando.

Me sentía la peor basura porque jamás te había visto llorar, aunque te hubieran dado un gran puñetazo en boxeo o te hubieran torcido el tobillo en fútbol o te hubieras raspado de la manera más horrible nunca lloraste.

Y que ahora ambos nos encontraramos sufriendo por amor, era patético.

-Yo no soy el que te interesa Kaoru, creo que en este punto ambos lo sabemos- exclamó culpable.

Se seco rápidamente las lágrimas.

-Lo se Boomer, se que hacías muchas cosas que no harías normalmente par aque yo sea feliz- suspiró- Me sentía culpable de que me gustara más ese falso tu- dijo con tristeza.

La abracé por los hombros, ¿qué más podía hacer?

-No es solo eso, ¿verdad?- susurró.

La alejé un poco aturdido.

-También me di cuenta en algún punto como miras a Miyako- dijo con tristeza-No puedo culparte, es hermosa-

No quería que tu te enteraras.

-Lo lamento-

Intente, de verdad intente quitarmela de la cabeza porque sabía lo mal que era, tu eras mi novia y ella una de tus mejores amigas.

Volví al mundo cuando sentí que me golpeaste la cabeza.

-Ya lo sabía rubio, pude ver las señales hace poco- respiró apoyándose en la pared-Alguien me ayudó a abrir los ojos- 

Me imaginaba quien era.

Después de todo esta mañana me había dicho que me había facilitado las cosas y que si te hacía llorar me daría una paliza, supongo que eso me esperaba en casa.

-Iba a terminar contigo mañana pero te me adelantaste- lo miró alzando una ceja-Aún si alguien pregunta diré que yo terminé contigo-

No pude más y reí mientras te daba un simple abrazo.

Empezaste a darme palmadas en la espalda.

30 Días de azúcar, flores y muchos coloresDonde viven las historias. Descúbrelo ahora