¿Hay algo tan SENCILLO como darte un BESO?

Capítulo IX

Después de hablar durante casi media hora con mi madre (contándole mi trágica noche y mañana) me doy cuenta de que tengo un hambre que flipas. Es viernes, y hoy debería de haber ido al insti, pero levantándome a la hora que me he levantado... En fin. Tengo hambre (no sé cuántas veces lo voy a repetir) pero antes de comer mi cuerpo me está pidiendo una ducha urgentemente, así que eso es lo que hago, cojo ropa; una sudadera gris TRHASHER y unos leggings Adidas negros, y la ropa interior, el conjunto de CK*, obviamente. Me meto en la ducha y me dieron ganas de vivir ahí, tan calentita, tan perfecta. Salgo (después de una hora y pico), me seco, me visto y esas vainas, y luego bajo a comer. Me muero de hambre. Lo bueno de estar en un hotel es que no me tengo que hacer la comida, porque si tuviera que llegar súper hambrienta y encima hacerme la comida, me la comería medio cruda. En serio. Me pido tres pechugas de pollo rebozadas y muchas patatas, yo creo que el cocinero no sabe como estoy delgada, con todo lo que zampo, debería ser una foca marina.

Al llegar a mi habitación, me acuesto y me quedo usando el móvil, tengo ganas de salir pero a la vez prefiero quedarme en casa. Sigo teniendo los directs de Cristian (los que no leí ayer) así que decido leerlos ahora.
-Sólo quería pedirte perdón
-Por lo de Nerea
-No era mi intención hacerte daño
Flipante. No sé si reír o llorar. Al final opto por cabrearme, pero paso de contestar. Simplemente le dejo en visto. Además, las disculpas son en persona, no por un puto chat de una puta red social.
Cojo el mando de la tele, bajo las persianas, cierro la ventana y apago las luces, me meto dentro de la cama y pongo Netflix. Después de estar un rato mirando series para ver, acabo poniendo "Shadowhunters".

Me he pasado todo el fin de semana durmiendo y viendo la serie, literalmente, y ahora tengo que esperar porque ponen un nuevo capítulo cada miércoles y se me va a hacer eterna la espera. Me gusta bastante. Pero ya es lunes, toca ir al insti, volver a ver a Tyler, a Cris, a su novia, y a Sara. Qué bien, supongo. Me levanto un poco más temprano, son las 6:45am. Me visto; me pongo un top de manga corta blanco, unos vaqueros azules claros y rotos guapísimos con un cinturón marrón, una chaqueta gris Nike, me pongo las zapatillas Nike huarache blancas y me pongo la Slam negra por encima, por el frío. Tengo ganas de arreglarme, así que me pongo unos aros de oro y unas pulseras de oro y un collar de oro con un corazón también de oro. Me sobra un poco de tiempo, y decido cortarme un poco las uñas y pintármelas de color negro mate. Lista. Cojo la mochila y salgo de casa, al llegar al insti veo a Sara y me voy con ella. Poco después veo a Tyler pero no quiero hablar con él, me siento avergonzada de lo que pasó.
—Buenos días— digo sonriendo, aunque dudo que se me vea sonreír con la chaqueta Slam tapándome la boca.
—Buenos días— y sonríe—, ¿qué tal la vida?
—Pues bien, ¿y la tuya?
—Genial, un poco aburrida pero be es lo que hay
—Te entiendo— y nos reímos. Tyler me ve, y viene hacia nosotras.
—¿Qué haces aquí?— le pregunta Sara mirándole mal.
—Saludar a mi amiga, ¿algún problema niñita?— mira mal a Sara, parece que sigue siendo el cabron del primer día.
—Deja a Sara en paz, idiota— le devuelvo la mirada dura que le lanzó a mi amiga.
—¿La estás defendiendo?
—Pues claro, soy su amiga, ¿qué te creías? ¿Que te preferiría a ti? ¿A un cabron que no hace otra cosa que comportarse como un completo imbecil?— le suelta Sara de sopetón. Me quedo flipando con todo lo que acaba de decir y es más mi cara lo dice.
—Wow.
—Mira niña vas a vacilar a tu santa madre, y si me da la real gana puedo hacer que me prefiera a mi, así que cierras el pico.— ahí entro yo.
—¿Ah sí? ¿Cómo estás tan seguro, eh?— le sigo mirando mal, ¿Qué se cree que soy fácil de enamorar? JAJAJA que chiste.
—Cállate
—No me da la puta gana
—Dios, ¡que te calles!
—¿No me soportas? ¿¡Pues qué mierda haces aquí!? ¡Lárgate ya!
—Tienes razón, ha sido una puta y gran gilipollez venir a saludar a la chica con la que me fui de fiesta hace menos de tres días. ADIÓS.— después de esto, me doy cuenta de que todo el insti nos está mirando y escuchando, incluso habrán escuchado eso último que ha medio gritado Tyler. Sara me mira sorprendida, se preguntará: ¿qué hacías tú de fiesta con este drogata? Pues no lo sé ni yo. Bueno, sí, era porque soy humana, y soy curiosa. Tyler se va hacia clase y nosotras vamos detrás.
—¿En serio te has ido de fiesta con él?
—...Sí— cruzó los brazos, y miro el suelo mientras caminamos por los pasillos y escaleras yendo a clase.
—¿Por qué?
—Cosas de la vida, pero sé que en el fondo no es tan cabron como parece— me encojo de hombros y entramos a clase, y ahí dejamos la conversación. Hoy tengo ganas de reír, de disfrutar, me la suda todo, no quiero malgastar mi vida rayándome o dándole demasiada importancia a cosas que no la tienen en absoluto. A primera hora, no vino el profesor y vino un profesor de guardia, se pasó toda la hora pegado al ordenador y los alumnos hablando y riendo, habían muchos grupos de personas y yo y Sara decidimos sentarnos en una mesa aparte, sin gente. Estuvimos haciendo el tonto hablando, riendo y riendo a carcajadas hasta que vi que Tyler se empezó a pegar con un chaval. En seguida salto y voy a separarle.
—¡Tyler!
—¡No lo entiendes! ¡Déjame pegarle!
—¡¿Qué?! ¡¿Estás loco?! ¡No!— acabo empujándole hacia atrás y se acaba cayendo encima mía.
—Joder, Tyler— susurro—, me estás aplastando— la gente no paraba de reír y reír, Tyler por fin se me quitó de encima, se dirige hacia el chaval y le dice:
—Ni se te ocurra volver a soltar algo así sobre ella, pedazo de gilipollas.— le dirige una de esas miradas que matan, esas miradas duras y frías de Tyler.
—¿Qué ha pasado?— no tengo ni idea de nada, y me gustaría saber por qué Tyler se ha empezado a pegar así de la nada y quién es ella y qué han dicho de ella.
Nos sentamos junto a Sara para que me contase lo que sucedió, y parece que la novia de Cristian también tiene curiosidad así que viene hacia nosotros junto a su novio.
—¿Qué pasó?— pregunta Nerea. Tyler me mira, Cristian nos mira y Nerea mira como Cristian me mira, y Sara simplemente no se da cuenta de nada y mira a Tyler.
—Mira, estábamos todos en la misma mesa— antes de que siga, Nerea interrumpe:
—Ya ya, ves al grano
—Cállate— le contesta Tyler—, la cosa es que ese imbécil estaba hablando de ti.— dirige su mirada hacia mi.
—¿De mi?— ahora sí que me pica la curiosidad—, ¿qué mierda dijo?
—Propuso hacer una apuesta sobre quién te follaba antes, quien lo hiciera se ganaba 50€ de cada persona que participase, y yo no lo pude evitar y salté y...— antes de que acabase, le interrumpo:
—No sé por qué mierdas te paré.— me levanto hecha una furia y me dirijo hacia el chaval, le meto tal puñetazo en la nariz que le dejo nokeado, literalmente, le ha empezado a salir sangre y se está mareando.
—¡¿Qué coño haces?! ¡¿No tenéis bastante?!
—¿¡Bastante!? Mira pedazo de gilipollas no te haces ni a la puta idea de con quien te estás metiendo así que cierra el puto pico y como me entere de que vuelves a hablar de mi la próxima vez la sangre acabará saliéndote en el puto hospital, ¿te ha quedado claro?— veo cómo se me queda mirando sin responder, le cojo del pelo y le digo:
—He dicho que si te ha quedado claro.
—Sí, sí— después de esto le suelto y me vuelvo a mi asiento.
—¿Qué cojones ha pasado?— pregunta el profesor.
Escucho como alumnos preguntan "¿ahora te enteras?" O dicen "llegas tarde profe", el profesor pregunta quien ha sido y nos señalan a mi y a Tyler,  nos sacan a los dos junto al chico de clase al que le he partido la nariz.
—¿Y bien?— pregunta el profesor.
Le explicamos lo sucedido y el profesor decide ponernos una falta a los tres. Qué hijo de puta.
Entramos a clase y Cristian y Nerea siguen sentados en el mismo sitio.
—¿Qué os ha dicho?— pregunta Nerea.
—¿Os van a poner falta?
—A los tres— contesto.
—Bueno princesa yo me voy— me mira y me da un beso en la mejilla.
—Eeeeh, alto el carro. ¿Cómo que princesa?— le miro entre sorprendida e indignada. ¿Qué hace? Veo cómo las tres personas que hay sentadas en la mesa se quedan flipando. Tyler se sonroja y se ríe.
—Perdón. Me ha salido solo— me mira, se ríe y añade:
—Por cierto, te queda muy bien el morado— después de esto me giña el ojo. Yo no lo pillo al principio, pero después caigo en que la ropa interior que llevaba la noche de la fiesta era morada, me sonrojo y sigo:
—Imbécil.— él se empieza a reír a carcajadas y dice:
—Adiós— se larga a su mesa, solo como siempre.
—¿A qué se refería con lo del morado?— pregunta Sara, levantando una ceja.
—Nada— me sale una sonrisa.
—¿Te lo has tirado?— pregunta Nerea
—¿Qué? ¿A Tyler? Ni de coña
—¿Segura?— pregunta Sara.
—Que sí coño, que no he follado con él ni lo haré— noto como Cris se pone recto y serio, y veo como Nerea mira como reacciona. Está pasando algo entre ella y él y no sé qué es. Tampoco me importa, total, para qué darle importancia, ellos son pareja y todas las parejas tienen problemas, mientras no tenga que ver conmigo, me la pela el resto.