Jeon miró por la ventana de su despacho una vez más, no podía quitarse a Jimin de la cabeza. Aún recordaba el extraño ataque que había tenido él presentándose en su casa.
«Se acabó» Había dicho, y luego se había ido, había cerrado la puerta de su casa, y ahora todo era extraño.
No había vuelto a tener contacto directo con él durante casi una semana. Era jueves. El tiempo había pasado lento... lento y tortuoso, y era extraño, porque él no había salido en busca de una conquista, algo impropio en él, en cambio sí había estado pendiente de la puerta de enfrente.
Sabía que él no había salido, una suave música se escuchaba desde el interior de la casa cada noche, y él se había hecho consciente de todos los ruidos. Lo había visto llegar con las compras, vestido con un chándal marrón chocolate que le quedaba ancho, su cabello negro algo desarreglado pero aun así se miraba bien, e iba sin una pizca de maquillaje; estaba precioso... tuvo que hacer un esfuerzo enorme por no salir a ayudarlo con aquellas pesadas compras. También lo había visto muchas veces en la cafetería que se encontraba debajo de su casa, sus miradas se habían cruzado, y una sonrisa amable había sido el saludo. Ninguna palabra. Se había sentido tentado a coquetear para ver si se acercaba, pero no lo había hecho. Cuando u fabuloso chico se le había acercado, no había podido evitar en fijarse en lo superficial que era.
Todo era extraño, su mente solo estaba ocupada por él, y eso le enfurecía. Más de una vez, se había sentido tentando a acostarse con el primero que se le pasara por delante, pero todas esas veces se había excusado a sí mismo, al fin y al cabo las excusas eran reales... «Mañana madrugo» «Tengo que preparar un documento» «Estoy cansado» «Mejor mañana»
Malas excusas, pero reales al fin y al cabo.
Una vez al ver la mirada de Jimin puesta en él se sintió tentado, y se presentó delante de un fabuloso chico, cuerpo de tentación y piel blanca, se había puesto a hablar con él, a la espera de la interrupción de Jimin. Pero él no había interrumpido nada, todo lo contrario, había salido de allí.
Y eso lo había frustrado, le gustaba más cuando él se le acercaba para molestarlo.
Una llamada a la puerta lo sacó de sus pensamientos.
-jeon...
-¿Si, Nam? –preguntó al saludo.
-Vamos a ir unos cuantos a tomar algo, ¿te apetece venir?
-No, gracias...
Los ojos de su amigo se abrieron de par en par, si los hubiera abierto un poco más se le hubieran salido. Nam entró al despacho y se sentó en la silla de enfrente.
-Habla.
-¿Qué? –preguntó jeon.
-Confiesa.
-¿Qué tengo que confesar? Creo que no he hecho nada.
-Pues tenemos dos opciones... o ya tienes planes, o alguien te espera en tu cama.
-Ninguna de las dos.
-Entonces te pasa algo –analizó su amigo.
-Estoy perfectamente.
-No lo estás. Algo te pasa. Hace días que no sales, y tú normalmente no te recoges.
-Tengo trabajo.
-¡Dios! ¿Quién fue?
-¿Perdona?
-Sí, alguien te ha cambiado. ¿Te has enamorado y me lo he perdido?
-¡No digas tonterías! ¡No me he enamorado!
-¿Quién es ella?
-Nam –le advirtió jeon.
-por dios kook soy tu amigo, ¿por qué no me lo dices?
-Porque no hay nada que decir, y ahora si no te importa tengo que acabar con este documento.
-Te lo arrancaré si hace falta –dijo levantándose- pero averiguaré quien es él, Jeon Jungkook , lo averiguaré.
-Ya, ya... avísame para conocerlo yo también.
-Sí, sí, ríete –Jeon sonrió, e hizo un gesto para que se fuera- me voy, pero volveré.
-Adiós, Terminaitor.
-Lo averiguaré.Nam salió del despacho, y Jeon se tiró sobre el respaldo de su silla respirando profundamente. No se había enamorado, que no tuviera ganas de salir no significaba nada de nada.
-No significa nada –dijo en voz alta- NADA.
Espero y les este gustando el fic asta ahora, y lo sigan leyendo comenten si quieren que suba otro u otros dos capítulos hoy y gracias por leer
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Jugando con fuego +18⭐ Kookmin
FanfictionEsta historia yo la había echo ase mucho tiempo con otros personajes de una banda llamada black veil brides ahora la estoy adaptando para kookmin ya que la estuve adaptando a tae y tu pero no me gusto así que decidí adaptarla a kookmin, espero y le...