Ones - Shots SONGS! [Yaoi/Dragon Ball]

Barbie Girl - Aqua

PAREJA: Gogeta

¡Es el cumpleaños número 7 de su querida hermanita, Milk! Sin embargo, no tenía las energías como para convivir con sus padres. Últimamente siempre le sermoneaban con el hecho de que en breve comenzaría la universidad, un año más y ya estaría estudiando su carrera, sin siquiera saber cual tomar. ¡Tenía asuntos más importantes que tratar! El lío en el que se enredó en el colegio, debido a eso lo suspendieron del próximo partido de béisbol, y le hervía la sangre saber que Ten jugaría y posiblemente haría ganar a SU equipo. Irritado por eso pasó las próximas horas encerrado en su habitación, no sin antes desearle un buen día a su hermana. Claro, sin su presencia.

Igual el estar enojado le aburrió por lo que no faltó mucho para que terminara tomando una siesta, que finalizó cuando encontró encima suyo a Milk, saltando en su abdomen y sacándole el aire. Ya decía él que soñar que se cerraban las paredes era de lo menos normal en su vida.

— ¡Hermano, hermano, mira! —solo a ella le pasaba el despertarle de tan horrible manera, porque era la persona más tierna en la tierra que era imposible siquiera molestarse con la monada de hermanita que tenía— ¡Papá y mamá me regalaron una nueva muñeca!, ¿verá que es linda?

Tampoco es como que el objeto de plástico haya llamado su atención porque no podría importarle menos. Goku solo sonrió levemente y acarició con sutileza sus cabellos azabaches, llevándose una risita risueña que derritió su corazón de pollo—. Claro, pero tú eres más bonita.

Milk volvió a reír, después cambiando de tema y llevarse a su hermano fuera de la habitación, porque tenía planeado jugar con él en la sala junto a su nueva muñeca, a la cual le llamaba Veg. Como sus padres no estaban, tuvo que encargarse de todo lo esencial en la casa, como alimentar, mandar a bañar, ayudar en la tarea y acostar a dormir a su hermanita. Nada fuera de lo normal, porque todo comenzó una vez las dos horas y media de jugar a las princesas terminó. Milk bostezaba y cabeceaba, tanto que tomó una siesta recostada en la mesa.

A Goku le hacía gracia y ternura verla de esa manera pero no esperó más para levantarla y darle un baño rápido que finalizó una media hora después. Ahora lista con su pijama de osos, la arropó en su cama, bien abrigada con sus millones de osos de felpa.

Cerró la habitación de ella, y se dirigió a la sala. Se detuvo viendo el desorden, suspiró y resignado dio inicio con el aseo. Así los juguetes fueron cayendo en el baúl, a excepción de una. De Veg, porque presentía que si la dejaba allí podía terminar desarreglándose, siendo un regalo nuevo. Por lo que optó por dejarla sentada en uno de los estantes de la sala y así ignorarla, como toda muñeca sin importancia. Hasta que al cabo de unos minutos más, la estancia se encontraba en orden, en lo que cabe.

Sus padres no volverían hasta el día siguiente y sus clases las retomaría hasta dentro de dos días, las opciones se redujeron en ir a su habitación y descansar lo que quedaba de la noche, no sin antes tomar un relajante baño. Todo quedó a oscuras, a excepción del cuarto de baño y la habitación de su hermanita que tenía las lucecitas de estrellas, no soportaba la oscuridad así que sus padres le compraron aquello para que pudiera dormir a gusto y vaya que funcionó.

En fin, se desvistió de pies a cabeza, incluso de la liga con la que ataba su cabellera negra y se adentró en la ducha y de no ser porque al entrar el traste de shampoo casi cae, hubiera notado que a las afueras de su cuarto algo había caído para hacer un sonido algo fuerte. Y de no ser porque colocó música en su móvil, hubiera escuchado las pisadas a su habitación para finalizar en el rebote de su cama, como si algo cayera allí. Todo eso pasó desapercibida por el chico hasta que tanto la música como su baño finalizaron casi al mismo tiempo, no quedándole más que salir y ocultar su hombría enrrollándose una toalla en la cintura y reposar otra en sus hombros con el cual fue tallando su cabellera húmeda. El resto de su trabajado cuerpo goteó mientras abandonaba el baño y se disponía a abrir la puerta.