❝ La vida para Jimin no había ni planeaba ser fácil, sobretodo si por un altercado termino en prisión y si un chico planea hacer su vida un completo descontrol. ❞
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- ¡Yo no planee esto!
-Créeme que yo tampoco.
➵ Kookmin (Ju...
El techo me parecía lo mas interesante del mundo en estos instantes, la soledad en ocasiones como esta me golpeaba como un balde de agua fría, se extrañaba un poco del bullicio habitual que emitían tanto mi hermano como Jeon. Cerré el libro que reposaba sobre mí pecho y me senté en la cama dejando a un lado la novela que acaba de terminar, fue en eso cuando escuché unos pasos aproximarse.
-¿Qué haces? - mi hermano apareció de improvisto en la celda, estaba buscando ropa de cambio era evidente estaba hecho un desastre. Su cabello estaba desordenado y parecía agitado con algunas marcas en su cuello. -¿Vas a compartir lo que traes o vas a seguir siendo un egoísta de primera Taehyung? - murmuré con fingida molestia, en realidad poco me importaba lo que conseguía a su manera en este lugar. Lo único que me importaba era su seguridad y que nadie lo lastimará de nuevo, me dedico una sonrisa cuadrada y río un poco.
-Solo obtengo cigarrillos para sobornar a los guardias, ellos reciben droga barata a cambio cuando la nicotina es escasa en este lugar. - se cambio la polera mientras hablaba, me sonrió. - No soy tan idiota como crees.
-En ningún momento he dicho eso. - me encogí de hombros y rodé los ojos reprochandoló a través de mi mirada. - Solo cuídate ¿Esta bien? Sabes que no puedo evitar preocuparme sobretodo cuando llegas así.
El me dedico una sonrisa sincera para sentarse a mi lado un instante.
- Gracias por preocuparte, Nam. - murmuro y soltó un suspiro. - Gracias por todo. - Sabía lo mucho que le dolía recordar su pasado y lo mucho que había sufrido. - T-Tengo que decirte algo. - parecía que había meditado unos minutos antes de soltar aquellas palabras. Lo mire sorprendido.
-¿Qué sucede? ¿Alguien te daño Tae? - Él solo ocupaba ese tono cuando se trataba de cosas serias, nego al instante algo abrumado. - ¿Entonces?
- No, no es sobre mi... - parecía apenado. - Es sobre Seokjin, me entere de algo gracias al reo con el que acabo de estar ya sabes que algunos hablan de más y agradezco que este lo haya hecho.
- ¡¿Qué le sucedió?! - Tae suponía que me pondría así aunque eso no evito que se asustara un poco, mordió su labio inferior y bajo su mirada.
- Fue Jungkook, él ordeno que lo golpearan. Están en las duchas. - soltó lo último para ver como me iba a pasos rápidos del lugar. - ¡Nam! - escuche como me llamaba desesperado, hice caso omiso a sus llamados. Sentía como la rabia me consumía, Jeon era completamente consciente de lo que sentía por aquel chico y aún así se había atrevido.
Dos de nuestros hombres estaban custodiando la entrada, por sus miradas supe que tenían indicaciones de no dejarme pasar aunque estuvieran bajo mi mando suponía que la palabra de Jungkook pesaba más en estos momentos. Yo di el primer golpe, uno certero en la mejilla del chico de la izquierda que se tambaleó mientras el otro tomaba la iniciativa.
Di un par de golpes más, el chico había logrado darme en más de una ocasión lo sabía porque sentía como la sangre corría por mi labio. Sonreí e hice sonar mis manos, tronando mis dedos.
-Oh chicos, esto era solo el aperitivo. - ambos se miraron de soslayo y se tensaron en el lugar, no esperaban que llegara y menos que respondiera de aquella manera tan energética. Generalmente el que se dedicaba a hacer ello era Jeon, era un punto para mi podía sorprender a cualquiera porque solía ser el que se quedaba detrás mientras él menor arremetia con todo su salvajismo.
Me bastaron un par de minutos más para dejar a ambos fuera de batalla, limpie mis nudillos en mi ropa y trate de ingresar. Vi que la puerta estaba bloqueada al intentar entrar.
-¡Abre la jodida puerta Jeon! - Grite enfurecido fuera de mis casillas.
Solo pasaron segundos y esta se abrió dejando paso a un asustado Jimin que salió corriendo de ahí.
¿Que le habrá hecho?
Entre y cerré con fuerza la puerta, Jeon estaba con una mirada desafiante cruzado de brazos contra la pared.
- ¡¿Quién mierda te crees para desobedecer lo que te digo Jeon?! - Me acerque peligrosamente a él, me sostuvo la mirada como pudo. - ¡Te dije que no lo tocaras!
No se atrevía a hablar, le di un fuerte puñetazo en su mejilla derecha rompiendo parte de su labio. Sabía que fácilmente podía haberlo esquivado, había sido un ataque impreciso y lleno de rabia.
- Te lo confesé, pedazo de mierda - lo mire dolido, bajo su mirada para limpiar la sangre que brotaba de su labio. - Porque confíe en ti. - lo mire un par de minutos más y no pude contener la rabia, los golpes sonaban en los azulejos desgastados y mis nudillos sangraban al igual que el pelinegro. Era un escenario lamentable, vi como escupía sangre en una esquina con una expresión de dolor.
-D-Debía hacerlo... - mascullo mientras escupía nuevamente sangre. - Tenia que ponerlo en su lugar, eso hacemos Namjoon y no iba a hacer excepciones ni por ti. - me sostuvo la mirada y se incorporo como pudo enfrentandome. - Si quieres puedes seguir, pero no voy darte la razón.
Lo mire furioso y lo deje ahí frustrado conmigo mismo, me dirigi a buscar como fuera a Jin quería saber si estaba bien.
Lo vi en él comedor para al almuerzo, tenia diversas heridas en su rostro y suponía también en él resto de su cuerpo, su rostro se veía demacrado y trataba de sonreír cuando sus amigos hablaban. Lo habían destruido, nunca volvería a ser él de antes.
Maldito Jeon.
Todo el comedor adquirió una tensidad cuando entre y solo pude ser capaz de sentirlo después de estar observando unos minutos a Jin, la mayoría me observaba intrigados por mi actitud. Él castaño sintió mis ojos observandolo e inmediatamente bajo su mirada mientras lágrimas estaban a punto de llenar sus ojos.
Se levantaron y se fueron mientras yo estaba estático en mi lugar. Decidí abandonar él lugar preso de un montón de emociones cada una más desesperante que la anterior.
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