Una simple pesadilla que se volvió realidad

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Entramos al parqueadero y estaban allí el chico x de su colegio y unos amigos de él. Ya se habían enterado de nuestra relación. Se acercaron y nos empezaron a gritar. Uno de ellos se quedó atrás intentando frenar al grupo. El chico x se dio la vuelta, lo empujo y salió volando. Yo, desesperado le dije a Juan Andrés que se vaya y corra para que no le hagan nada. Me dijo yo no me voy de aquí sin ti. Le empuje y se fue. El chico x se comenzó a reír y dijo:

-Pero miren nada más, el enano tiene un novio que le protege. Dime marico, ¿el enano es tu novia?

-No te tengo miedo maricon. Los verdaderos maricones son los que buscan bronca. Déjanos en paz y vete ya mismo o sino...

-¿o sino que? ¿Nos vas a acusar con tu mama? Miren al niño de mama pidiendo ayuda.

Y todo el grupo estalló en risas.

-No te tengo miedo pendejo, puede que seas mayor, pero me vale un comino y no tendré miedo de defender a mi Andrés.

-Y que aras? ¿Piensas que tú me vas a ganar?

Y más risas. En séptimo, mi madre me había obligado a entrar al extracurricular de karate, por lo que tenía cinta amarilla y unos pocos conocimientos de defensa. Me puse en posición para atacar y empecé a agradecerle a Dios el físico y la altura que me había dado. Esos chicos tendrían unos 16 años por lo menos y yo de 11 y medio, estábamos casi del mismo porte. Uno de ellos se me acerco, le empuje, pero el reacciono con más fuerza y me boto al suelo. Intente levantarme, pero el chico x me pateo y quede sin fuerzas. De la nada, el chico que se había opuesto a la pelea corrió, me tomo de la mano y ambos salimos corriendo. Los demás nos persiguieron hasta que los dos llegamos a sitio seguro, frente a la garita del guardián. le dije con mi voz agitada:

-¡Oye amigo, GRACIAS!, yo ya estaba preparándome para la ola de golpes.

-Tranquilo, no es nada. Vine con ellos porque teníamos que hacer un trabajo grupal y el fercho nos dijo del Andrés y tú y salimos.

-Fercho?

-A si, se llama Fernando Larrea. Está loco, es el agresivo del curso. Por cierto, soy Mateo.

-Yo soy Alejandro. ¿Por qué me salvaste?

-De verdad es que hasta yo se soy uno de sus amigos de toda la vida, me harta su comportamiento. Además, me porto serio con el tema de los gays porque, ... suspiro ...nadie más lo sabe, pero, yo también soy gay. Vivo atormentado por los comentarios de personas como él.

-no te sientas mal, no hay por qué hacerlo. Somos personas como cualquiera que deben vivir tranquilos y contentos.

-Gracias por animarme, pero es que en serio a veces no lo tolero, en los recesos, sabe ir a molestar al pobre enano y a sus amigos.

-En serio? Él nunca me ha dicho nada.

-Es verdad que eres su novio?

-Sí, soy novio de Andrés desde hace tiempo, ayer fue nuestro aniversario de 5 meses.

-O por Dios, siento mucho lo que hicieron esos locos. Desde ahora te prometo cuidarle al enano en el colegio.

-Muchas gracias, en serio te lo agradezco, te debo la vida.

-En serio que no es nada. Bueno ya anda a buscarle, debe estar escondido por ahí.

-Ay por Dios es cierto. Me entretuve en la conversa. Aurita le voy a ir a buscar.

-Nos vemos. Chao.

-Chao Mateo.

Dos chicos que se amanDonde viven las historias. Descúbrelo ahora