Capítulo 9

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Era el día que yo había estado temiendo. Era lunes, el día en que que Jack y yo teníamos que presentar nuestro proyecto. No lo había visto desde aquel día, ya que la semana anterior no tuvimos clase de ciencias y no estábamos juntos en ninguna otra asignatura. Naturalmente había rumores circulando por todos lados sobre qué pasaba entre nosotros, porque todo el mundo sabía que pasábamos mucho tiempo juntos. Mentiría si dijese que no le echaba de menos un poco. Por mucho que odie admitirlo, él era la única persona que tenía, él era la única persona que sinceramente me gustaba.

Entré en la clase de ciencia, evitando mirar a mi pupitre ya que sabía que él estaba allí. Estuve mirando al suelo todo el tiempo hasta que finalmente me senté. Podía sentir como me miraba mientras yo tenía mi vista al frente. Usé todas mis fuerzas para no estallar en lágrimas en aquel momento. Mi corazón se paró por un momento cuando él habló.

-¿Cómo has estado?- Preguntó, y pude sentir su tono desganado. Estuve en silencio un tiempo pensando en una respuesta. Un millón  de ideas recorrieron mi cabeza: triste, herida, rota, avergonzada... Ninguna de las cuales estaba dispuesta a decir en voz alta. 

-Estoy bien.- Fue la respuesta que elegí. Podría haberle preguntado cómo estaba él pero no quería saber la respuesta, porque con cualquier cosa que dijese sabía que él estaba mejor de lo que yo pudiese estar en aquel momento. 

-Señor Gilinsky, ¿estáis tú y tu pareja listos para presentar vuestro proyecto?- Preguntó el señor Harris. Jack me miró para una aprobación y asentí. Nos levantamos lentamente, Jack caminaba detrás mío. Pude sentir una incómoda tensión en la sala mientras todos nos observaban.

Tosí torpemente comenzando a presentar nuestro trabajo. Después Jack y yo nos turnábamos la palabra. Cuando por fin acabamos, el señor Harris empezó a aplaudir.

-¡Vaya! ¡Ha sido absolutamente fantástico! Felicidades, los dos trabajáis estupendamente juntos.- Dijo. Yo apretujé mi cara, sabiendo en todo momento que él tenía razón. Jack y yo volvimos a nuestro pupitre sin decir palabra alguna. Cuando la clase terminó, recogí todas mis cosas lo más rápido que pude tratando de esquivar a Jack.

-Caram.. quiero decir.. Abby.- Dijo Jack sujetándome la muñeca delicadamente. Me giré para mirarle. -Lo hemos hecho bastante bien ¿verdad?- Dijo frotándose el cuello incómodamente.

-Mira Jack, el proyecto ya ha acabado, no tienes porqué comenzar pequeñas conversaciones sin sentido conmigo nunca más.- Mi expresión fue neutral.

-Creía que durante este tiempo nosotros mantuvimos algo más que pequeñas conversaciones sin sentido.- Dijo sintiéndose ofendido por mi comentario. No dije nada, me limité a quedarme allí de pie frente a él.

-Te dije que lo sentía, jamás quise hacerte daño, pero simplemente no soy lo suficientemente bueno para ti.- Se levantó hasta que quedamos cara a cara.

-¿Y quién te da el derecho de decidir quién es o no lo bastante bueno para mí? No soy una pequeña chica indefensa.- Dije elevando un poco mi tono.

-¡Sé que no lo eres! ¡Eres la chica más fuerte que conozco! Eres la única chica que me supo poner en mi lugar, y amo eso de ti.- Dijo. Mi estómago se agitó suavemente cuano dijo ''amo'' y ''yo'' en la misma frase.

No sabía qué responder. Miré al reloj, y me di cuenta de que se me estaba haciendo tarde para la siguiente clase. Suspiré sonoramente.

-Me tengo que ir, ya nos veremos por ahí.- Dije diciéndole adiós con la mano mientras salía de la clase.

Unpredictable |Jack Gilinsky|Donde viven las historias. Descúbrelo ahora