Capítulo 14

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POV de Lok

Estaba tirado en el sofá de casa de Dante muerto de aburrimiento, tenía la cabeza colgando por el borde y los pies en el respaldo, Dante estaba sentado en el sillón de al lado leyendo un libro y Cherit jugando al solitario en la mesa de estar.

Después de nuestra misión en Praga, Sophie se había ido a su casa, cosa que entiendo, sin embargo yo estaba viviendo con Dante. La misma noche que le di nombre a mi poder, Dante nos hecho un sermón a Sophie, Cherit y a mi por haberle desobedecido y haber vuelto con Zhalia y él en vez de irnos a casa, como nos había ordenado, y por si su sermón no hubiera sido suficiente, estaba castigado sin salir, además solo yo, Sophie no. He estado entrenando y practicando con mis poderes con la ayuda de Cherit y de Dante, eso me mantuvo ocupado los tres primeros días, pero soy un animal, ¡NECESITO LIBERTAD! Y por si no poder salir no bastara, otra parte del castigo era que tenía que jugar solo, por lo que el tiempo que no estoy entrenando lo paso en mi cuarto, yo solo.

He intentado escaparme para salir un rato, pero Dante mantiene Slowing vigilando, y ya me atrapo una vez, aunque por suerte no me aumento el castigo.

-Dante, déjame salir fuera, por favor.

-No.

-Solo al patio a jugar con la pelota.

-No.

-Venga..., tu no entiendes lo que es para mi. ¡Estoy enjaulado!

-No estas enjaulado, solo castigado, y no.

-¡Para mi es lo mismo! ¡¿Y por qué estoy castigado yo y no Sophie?!

-Primero, no tengo autoridad para castigarla y a ti si, y segundo, porque a Sophie jamás se le hubiera ocurrido desobedecerme si no le hubieras dado la idea.

-No entiendo por qué te enfadas, la misión salió bien, además, si no hubiéramos vuelto la Organización os habría atrapado.

-Si no hubierais vuelto no habrías acabado herido.

-¡Pero fue mi idea la que os salvo!

-Por esa razón solo estas castigado una semana y no un mes.

-¡Es injusto!

-No seas crio.

-Es lo que soy.

Dante sonrió y siguió con lo suyo. Yo suspiré, no iba a dar su brazo a torcer, tendría que estar castigado tres días más.

POV de Lok end

Tercera persona

Un chico joven estaba parado en un puente de Rouen, Francia, tenía unos prismáticos sujetos en frente de sus gafas. Era delgado, con el pelo castaño y ojos grises. Estaba mirando los barcos que navegaban por el río Sena con mucho interés y curiosidad. De repente un enorme remolino apareció a lo ancho del río enfrente del puente. Una lancha fue atrapada y empezaba a ser arrastrada hacia él. Los pasajeros, una pareja, gritaban muertos de miedo pidiendo ayuda.

-¡Esta ocurriendo otra vez!

Lloró el chico corriendo hacia el centro del puente. Cuando miró hacia abajo, al centro del remolino, pudo ver unos ojos rojos brillantes.

-¡Un titán!¡será mejor que haga algo!

El chico agarró una cuerda que había a sus pies, ató un extremo al lado opuesto del puente. Luego lanzó la cuerda a los pasajeros de la lancha para que se sujetaran a ella.

Una vez que el hombre tenía la cuerda bien sujeta y su mujer agarrada a él, el chico empezó a tirar de la cuerda ayudado de más personas, consiguiendo subir a la pareja al puente.

Electricidad, luz, fuego y hechiceríaDonde viven las historias. Descúbrelo ahora