Narra Noah.
el cuarto era pequeño. incluso más pequeño que el baño de huéspedes en mi loft en New York. una cama individual, una silla y mesa de madera y un pequeño closet. que bueno que viajé ligero.
había algo en esta habitación.
un tipo de aura, una sensación. me traía una paz enorme. no ruido, no gente diciéndome que decir o hacer.
no, el mandatario, no el señor correcto, no Vernon Chwe. esto era el paraíso. no entiendo como mi padre nunca me contó de este lugar o hablo mas de ello.
me acosté boca abajo en la pequeña cama y se sentía tan bien. esa libertad se sentía bien. no sé si fue el calor de la isla, la comodidad a pesar de ya estar antiguo el colchón, la hora, no lo sé. pero caí rendido y quede dormido.
al despertar una luz brillante amarilla me cegó por un momento. ¿era el sol? no me acuerdo que brillara tanto en New York como aquí. al pararme de la cama vi de donde provenía la luz del sol. una pequeña ventana en el cuarto y por quedarme dormido se me olvido cerrarla.
mire la hora en el rolex en mi muñeca, 7:00 am. nunca he dormido tanto. recuerdo el estar despierto a las 4 de la mañana a causa del no poder dormir por el ruido solo para pararme a las 6 al colegio.
me estire un poco y camine hacia la ventana para tomar aire. pero cuando mire hacia fuera de aquella ventana me di cuenta que daba a otra ventana. si, justo ahora me acuerdo lo que me dijo mi tía.
en eso, un muchacho apareció en esa ventana. tenía el cabello ondulado, todo un desorden por la almohada pero sobre todo...
estaba sin camisa.
una espalda bastante definida y hombros anchos como mi primera vista en la mañana. incluso me hizo sentir un poco mal de mi no tan trabajada y delgada figura.
su piel era un poco bronceada. no exagerada, solo como si el sol besara su piel lo suficiente para hacerla brillar...
en eso, el chico se dio la vuelta sujetando una playera blanca. era el mismo chico del puerto.
con esa misma sonrisa burlona de ayer me alzó un poco su ceja izquierda. "buenas, vecino." dijo colocándose la playera blanca que estaba en sus manos. "tiene años que nadie dormía en ese cuarto."
sorprendido por sus palabras, sentí mis mejillas arder. así que solo pude decir lo primero que apareció en mi cabeza.
"¿acaso me viste dormir ayer?" dije un tanto estupefacto.
el chico se tensó ante mi pregunta y comenzó a ponerse nervioso. "uh... pues... uh..." después de unos segundos el chico volvió a hablar confiado. "¿acaso estabas viéndome vestir?"
ahora fue mi turno de ponerme nervioso tratando de buscar una respuesta. creo me vi muy nervioso porque aquel chico comenzó a reír.
"¿qué?" pregunté molesto.
"Seungjae."
"¿qué?"
"mi nombre es Seungjae."
"ah. me llamo Noah..."
"¿Boa? ¿cómo esa cantante?" preguntó ese tal Seungjae con una expresión confusa en el rostro.
"no, Noh-Ah. como.... ¿Noah Webster?"
"¿Wei-is-teh?"
"eeeh..."
"jajajaj tu cara, forastero." Seungjae volvió a reírse. "Noah. gusto en conocerte, ¿vecino?"
"mucho gusto."
"¿y de donde vienes? ¿Seúl?"
"no, vengo de...." no sé si sea lo correcto decir mi origen. nadie sabe que estoy aquí y lo que menos necesito es a la presa o peor, a mi padre en esta isla. "si, soy de Seúl."
"¿enserio? no luces de Seúl. pero bueno, ¿tienes planes para hoy?" preguntó Seungjae.
"¿por qué?"
"preguntó..." suspiro aquel chico mientras agarraba una chamarra de cuero color rojo y se la ponía "hoy es mi cumpleaños y me harán una comida pero es solo familia, gente de la iglesia. súper aburrido. peeero..."
"¿pero?"
Seungjae se me quedó viendo. su sonrisa burlona suavizándose más con cada mirada.
"pero a las 5 de la tarde iré con unos amigos a celebrar a las rocas. ya que somos vecinos y nunca he tenido nadie en aquella ventana en años, sería justo que nos conociéramos más. ¿no crees?"
"yo, no sé. no creo..."
"¡Seungjae! ya baja." se escuchó la voz de un señor.
"¡voy!" le respondió Seungjae. "si vienes te espero en las rocas. tú pregunta en la calle, créeme, sabrán donde es. ¡adiós forastero!"
no me dejo decir nada más.
¿pero por qué me siento gracioso? ¿cómo si lo que hubiera dicho fuera un chiste?
¿por que estoy sonriendo?
"¿Noah?" se escucho la voz de mi tía abuela tocando la puerta de madera. "¿ya estás despierto?"
"si."
"bien. entonces baja a desayunar que después te llevaré a conocer la isla."
me quede unos segundos mirando hacia la ventana.
que chico más molesto.
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summer days • verkwan
Fanfiction❝a través de esta ventana hay miles de historias que contar. pero ahora no importan, no cuando te veo. solo importa nuestra propia historia.❞