Al paso de los meses fuimos ganando confianza, no podía creérmelo, depositó confianza en mi habiéndome conocido en escasos meses.
Soy una persona cariñosa y aunque fuera esta persona tímida nunca deje de hacer lo contrario.
Sin apenas conocerme, me ayudó en todo lo que necesitaba y eso no lo hace cualquiera...
Se me llenaba los ojos de estrellas infinitas al verle, una tonta entusiasmada, no dejaba de abrazar, no la soltaba para nada, mi mundo vacío se lleno con dosis de cariño y amistad.
Pero lo que ocurriría más tarde, no me lo creí ni yo, ¿cómo ocurrió?, ¿qué pasó?, ¿por qué?
Tenía tantas preguntas y tantas pocas personas para poder respondérmelas, estaba sola navegando y poco a poco me hundía como el Titanic, rechazando todo tipo de argumentos y todo tipo de realidades.
Mi mente estaba siendo conexionada con otro tipo de mente externa, estaba ida, no daba de sí.
Buscaba una razón, un hecho, una responsabilidad, que no tardó en llegar.
Llegó el verano y mi mente ya pudo darse un baño de espuma, estaba saturada y no sólo por los estudios, estaba pasando cosas raras pero esta se hacia la loca.
Que bonito es el verano para no pensar demasiado pero pronto llegaría otro pensamiento a mi mente que pronto cambiará la forma que veía la vida