¿MEJORES AMIGOS?

C A P I T U L O lll

LEVINE ELIZABETH SUMMERS

— 10.. 11... 12... 13... 14... 15... ¡Feliz cumpleaños a ti! — cantan todos al unísono acompañados de las palmas.

Sonreí ampliamente, no me cambiaba por nadie en el mundo, mi felicidad era inmensa, de alguna manera u otra me sentí cómoda entre tantas – eran demasiados – personas que se encontraban hoy junto a mi.

— ¡Feliz cumpleaños perra! — gritan al unísono Kels y Kira, aunque esta última un poco falsa.

La verdad no sé que era lo que le pasaba conmigo, llevaba así más de un mes.

— Gracias. — mordí mi labio inferior mirando hacia todos lados buscándole con la mirada, pero aún no aparecía.

— ¿A quien buscas? — Ryan se acerca a nosotras, preguntado.

Negué. — A nadie, no es nada.

Pensar que alguna vez me gustó era demasiado vergonzoso, debido a que nuestro noviazgo el año pasado duró sólo dos meses, descubrí que no era nada más que atracción y él también estuvo de acuerdo, parecíamos una pareja de hermanos que se besaban – asquerosa comparación – así que no era nada cómodo, manteníamos nerviosos y no podíamos hablar comodamente.

— ¡Levi ven! — mire a mi madre junto a la tía Danielle – madre de Mike – con una caja.

Fruncí el ceño y me acerque a ellas, mi padre estaba frente a mi sonriendo ampliamente.

Algo tramaba esta gente, y más cuando vi al tío Christian abrazando a la tía Susan.

¿Qué estaban tramando?

— Nos pediste algo original para tu cumpleaños Número quince ¿Cierto? — pregunta mi madre Danielle.

Asentí confundida.

— ¡Uh! Mira su rostro Christian, está perdida. — dice mi padre mientras reía junto a los demás.

¿Por qué presiento que...

Mi mandíbula se cae al suelo literalmente con lo que ve, no sabía si reír, llorar o desmayarme en ese momento cuando el revoltijo de emociones se apodera de mi.

— ¿E-es  u-un ... — me quedé en silenció analizando lo que pasaba.

No era una broma de esas de televisión ¿Cierto que no? ¡Ojalá y no sea una broma!

Me pondré a llorar donde sea cierto.

— ¡FELIZ CUMPLEAÑOS! — gritan los cuatro emocionados al ver mi reacción.

— Yo... ¡Dios no lo puedo creer! — empecé a saltar emocionada — ¡UN AUDI! ¡DIOS NO ME LO CREO AUN!

— ¡AZOPOTAMADRE! — grita mi amiga llegando a mi lado para tomarme de la mano y empezar a gritar a la vez juntas.

— ¡KELS ES UN AUTO! ¡UN "AUTO"! — mi énfasis en la palabra fue demasiado exagerada.

— ¡Te felicito! — me abraza para, después yo ir hacia donde mi padre y quitarle las llaves de un solo manotazo.

— ¡Gracias, gracias, gracias! — dije tan rápido que ellos solo reían de mi reacción.

Estaba tan emocionada y feliz que me sentía tan: "Ashfsbskfj" ... Sin palabras.

¿No sé si alguien sintió alguna vez esa emoción? – yo ese día la sentí así –.

— ¿Te ha gustado el regalo? — pregunta mamá sonriendo.

Asentí incapaz de decir una palabra.

— ¡Iremos de compras mañana! — Kels se sube al copiloto, solo reí de su reacción, si yo me vi así, entonces estaba mal.