La realidad en nuestra mente y como cambiarla.

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Bienvenido lector, comenzamos con la siguiente sección sobre la realidad.
En el primer capítulo iniciamos con la pregunta de ¿que es la realidad? Una vez aclarado eso veamos como podemos cambiarla.

Nuestro cerebro nunca está en contacto con la realidad "física" o lo que hay ahí fuera. El único contacto con esta, es a través de los sensores de nuestros sentidos. Toda la información que percibimos con los sentidos es convertida en impulsos eléctricos que viajan por las células nerviosas exactamente de la misma forma. El cerebro no tiene posibilidad de distinguir si un impulso eléctrico corresponde a luz, sonido, sensación, sabor u olor, puesto que los impulsos son exactamente iguales. La distinción entre los diferentes tipos de impulso es hecha por el área del cerebro a la que llegan; esto es, si el impulso llega al área que controla la visión este será interpretado como luz, si llega al área responsable de la audición se interpreta como sonido y así sucesivamente con cada área.

Para entender más claramente el funcionamiento cerebral imagina una esfera de acero con el tamaño de una habitación en la que se encuentra un "Individuo inteligente" que nunca ha salido al exterior. La habitación tiene 5 secciones distintas que denominaremos A, B, C, D y E. El Individuo solo tiene contacto con el exterior, a través de mensajes escritos en hojas de papel, que le son pasadas por una rendija de correo colocada al ras del suelo, en cada una de las cinco secciones. Para generar un resultado, el individuo sabe de antemano que la sección A corresponde a luz, la sección B corresponde a sonido, la sección C corresponde a sensación, la sección D corresponde a sabor y la sección E corresponde a olor. El mensaje que recibe de cada una de las cinco secciones es siempre el mismo y solo dice que "HAY UN ESTÍMULO". Si este mensaje se recibe muchas veces en un determinado periodo de tiempo, el individuo sabe que se trata de un estímulo fuerte y por el contrario si el mensaje se recibe pocas veces en el mismo periodo de tiempo, este individuo sabe que se trata de un estímulo débil. A partir de la información que recibe a través de las secciones, este individuo genera un resultado coherente que él llama "REALIDAD", pero que en sentido estricto no es lo que hay en el exterior.

Siendo que, de esta manera las cinco secciones corresponden a nuestros cinco sentidos, el Individuo inteligente es la mente que se crea a partir del cerebro y el mensaje es un impulso eléctrico del tipo todo o nada, que viaja a través de nuestras neuronas, conocido como "potencial de acción".

De acuerdo con esto, podemos concluir que aquello que consideramos como realidad, sólo corresponde a nuestra interpretación del mundo exterior. La "verdadera realidad" es y será siempre inaccesible para nosotros. En otras palabras, las personas, las cosas, los eventos y todo lo que hay allá afuera, no son como crees. Lo único que tenemos es una interpretación de ellas. Su verdadera esencia nunca podrá ser conocida.

Ahora viendo el mundo de esta manera, y después de estas explicaciones supongo estas listo para lo que sigue. Pero ¿que hacer para cambiar mi realidad?

Ya te explicó...

Puedes crear tu propio mundo. Si el pensamiento que transmites sobre lo que quieres es bien claro y definido, pues de esta manera crearas una fuerza de atracción.
Todo este fascinante mundo cuántico abre una enorme y misteriosa puerta al mundo espiritual. Somos como grandes antenas electromagnéticas. Dependiendo de nuestra energía vamos atraer a unas posibilidades o a otras, de las infinitas que nos ofrece el universo.

Pero: ¿qué señal le estás transmitiendo al universo? Porque puede depender de ella lo que recibas. Siendo conscientes de esto tenemos la capacidad de cambiar nuestra energía y con esto nuestra realidad, para ello primero tenemos que cambiar el pensamiento, salir de nuestra rutina, de nuestro tiempo y de nuestro cuerpo. Imaginar situaciones deseadas es una forma muy sencilla de hacerlo ya que al imaginar nuevas situaciones, como el cerebro no tiene ojos, no sabe si lo que pensamos, soñamos o imaginamos, está pasando de verdad o no. De esa forma nos adelantamos a lo que queremos, las funciones celulares de la felicidad se ponen en marcha: serotonina, endorfinas, dopamina... Y co-creamos con el universo. Haciendo que nuestra energía nos acerque a la realidad deseada.
Una vez que esto se logra, notaremos una ligera modificación en nuestra realidad y sabremos que puede cambiarse aún más, si así lo queremos.

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