19: Yo haría lo que fuera por las personas que amo

473 30 19
                                    

Narra Liam:

Sentí mi cuerpo cansarse a medida que corría al lado de Todey. El aire helado de la noche me congelaba el cuerpo y sentí que se quemaban mis pulmones. Pero no me detendría.

Llevábamos corriendo algunos minutos ya y no había ni rastro del hermano de Todey. Ya estábamos llegando a la parte más peligrosa de la ciudad y el miedo crecía en mi interior, no quería ni imaginar como se sentiría Todey.

Él se detuvo y me hizo una señal para que me detuviera. Se sacó la nota que había encontrado en la cama de su hermano y la miró seriamente.

-¿No dice en dónde lo tienen? -le pregunté entre jadeos acercándome a él para echarle un vistazo a la nota.

-No, ni una mísera pista...

-Tranquilo, lo encontraremos.

Escuché un ruido y levanté la cabeza. Un forcejeo, algo arrastrándose, cristales rompiéndose... ¿Podría ser...?

-Todey, escucha...

El mencionado alzó la cabeza y a lo lejos, en la misma dirección, se escuchó un golpe seco.

-Espérame aquí Liam -me pidió.

Pero no podía dejarlo sólo.

-Voy contigo -le dije y, tras tomarnos de las manos, fuimos en dirección a los ruidos.

Un callejón oscuro se extendía ante nosotros. En esta zona de la ciudad siempre pasaban cosas malas así que me daba miedo entrar allí, pero no dejaría que el miedo me venciera ahora.

Todey inhaló y dio un paso dentro del callejón, seguido de cerca por mí. Pronto, lo único que sentí era la fría mano de Todey, envolviendo la mía en un apretado agarre.

-¿Y eso qué? Sólo míralo, es muy lindo... -se oyó desde más adentro del callejón.

-Bueno, tienes razón. ¿Qué dices? Yo me lo quiero quedar...

Se me hizo un nudo en la garganta. Miré en dirección a donde estaba Todey, pero sólo ví oscuridad.

-Eso lo veremos después, ahora a divertirnos.

Una luz iluminó todo, distinguí a Todey a mí lado, dirigiendo la linterna de su teléfono hacia la oscuridad. Y entonces pude ver con claridad la escena, dos hombres enormes estaban manoseando a un chico de cabello azul.

-¡Jaden! -gritó Todey.

Los dos hombres dejaron al chico y miraron en nuestra dirección. Sus miradas tan amenazantes hicieron que me recorriera un frío escalofrío por todo el cuerpo. Apreté el brazo de Todey, aferrándome a él. Sentí su brazo abrazarme por los hombros, pegándome más a él. La mirada del hermano de Todey se iluminó al verlo.

-¿Y ustedes quien carajos son? -habló uno de los tipos.

-Soy su hermano, devuélvanmelo ahora mismo -dijo Todey sin dejarse intimidar.

Los hombres se miraron entre sí y rieron. Uno de ellos asió bruscamente del brazo del chico, haciéndolo caer al piso.

Todey dio un paso al frente, arrastrándome con él.

-Dénmelo ahora mismo, les daré todo el dinero que me pidan, lo que sea.

Los hombre rieron nuevamente.

Mi hermano usa falda.Donde viven las historias. Descúbrelo ahora