Broken Heart (¿Creek?)

Parte 8 -La Otra Verdad-

-¿desde cuando me engañas Craig?- veía de aquellos hermosos ojos salir lagrimas espesas y cargadas de emoción -¿te parecía solamente un juego verdad?, yo no valgo nada para ti, soy nada- quería decirle que se equivocaba que él era mi todo, que era un maldito estúpido al haber hecho lo que hice, por haber sido el mayor imbécil en el mundo por no darme cuenta de que tenia lo mejor en la vida.

-por eso no dices nada verdad, jugaste conmigo Craig y ese dolor jamás se curará- cada vez lloraba más y más, quería limpiar esas lágrimas, quería abrazarlo y decirle que todo estaba bien.

-mm... y... so...- nada, no podía decir nada y él se alejaba lentamente, quería seguirlo, pero del suelo salieron manos, manos que pronto se volvieron cuerpos y que conocía de sobra, mis demonios me ataban y de la nada el desapareció, todo se volvió negro y me ahogaba en la oscuridad de mis propias acciones.

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-haaaa- me levante agitado de la cama, todo había sido una pesadilla, gire a todos lados recordando que estaba en mi habitación, tome con ambas manos mi rostro tratando de calmar mis nervios, yo aun tenia a Tweek, aunque el miedo de realmente perderle estaba presente en mi pecho, sé que todo había sido un simple malentendido, uno que arreglaría justamente ahora.

Me levanté de la cama, tome mi típica ropa cuando me disponía a salir me vi al espejo de mi habitación, lucia fatal, mis ojos demostraban la mala noche que había tenido, pero como luciera en este momento no me importaba, yo solo tenía en mente hablar con mi pequeño y aclarar todo.

Sali de mi casa evitando que mi madre me viera, era la única en ese momento que estaba despierta preparando el desayuno, pero fue imposible.

-ajam, ¿puedo saber a dónde va el jovencito tan temprano? - rayos me había visto antes de tan siquiera cruzar la sala.

-mamá, voy a ver a Tweek- mis ganas de hacerlo se notaban en mis rodillas ya que se movían constantemente.

-¿pasa algo acaso Craig?- me asuste

-¿Qué te hace creer que pasa algo mamá?-

-instinto materno, así que, ¿Qué pasa entre ustedes dos?-

-mami creo que arruine las cosas entre nosotros dos, ayer él se comporto muy frió conmigo, era como si yo no fuera nada, como si no existiera más para él y tú sabes cómo es de tierno y dulce conmigo, tengo miedo- era la primera vez que me sinceraba con mi madre, era reconfortante y liberador hablar al respecto con alguien y quien mejor que ella, tomo mi rostro y me dio un abrazo.

-debiste de haber hecho algo realmente malo para que el se enojara contigo, pero hablen al respecto, compartan sus sentimientos, se que te ama con todo su corazón y te podrá perdonar... o al menos tratar de escuchar-

-tienes razón, tratare de hablar con él, gracias mamá- ella me soltó y yo me fui rápidamente ya eran las ocho así que debía de estar en su casa, fui, pero nadie me abría la puerta tal como anoche, debía relajarme en vez de estar tocando la puerta como loco, pensé por un momento... eran las ocho, si no había alguien en casa debería estar en su cafetería, no perdía la esperanza de que estuviera allí.