Obsesión

11.3K 1.5K 158
                                    

¿Qué era peor que enamorarse de su Omega y no poder hacer nada?

Ser un Alfa que sigue su instinto.

Yoongi no sabía que hacer. Cuando el Omega albino se mudó con él y con su amigo, su situación empeoró.

No sabía si era su cabello despeinado, sus ojos adormecidos al despertar, sus gruesos labios o su tierna actitud. Pero le encantaba.

Aunque también era una tortura, como ahora.

Yoongi no esperaba que un pequeño Omega entrara a su cuarto a las dos de la mañana, y mucho menos siendo consciente de su estado.

Sí, Jimin estaba en celo. Hace 3 horas lo había presentido, Hoseok también lo sintió por el fuerte aroma que salía de la habitación del menor que se negaba a salir. Su amigo sólo lo ignoró pero Yoongi no podía. Su parte baja cosquilleaba.

Cuando Jimin entró a su habitación, el aroma se volvió tan fuerte que Yoongi no pudo evitar despertarse. Abrió los ojos cuando el Omega estaba a medio camino entre su cama y la puerta. El menor se asustó y se quedó quieto en su lugar.

Yoongi no sabía que decir. Hace unos días venían teniendo cierta tensión.

Pequeños roces en el ascensor, miradas fugaces, abrazos y más.

Yoongi no podía descifrar lo que sentía el menor, pero tenía bien en claro que su Omega lo enamoró desde el primer instante.

-Jimin...¿Qué pasa?- preguntó sentándose en la cama. Pensó que era un idiota, obviamente sabía que pasaba.

-E-estoy en celo Hyung...Y no tengo pastillas.- bajó la cabeza, eso era muy vergonzoso para él.

-Sabes que es peligroso si te acercas a mí en ese estado.

-¡Por favor Hyung, duele mucho! Sólo déjame oler tu cuello. Es lo único que te pido.- Juntó sus manos rogando por ello.

Yoongi iba a odiarse a si mismo, sabía lo que iba a hacer y aún así asintió.

A pasos lentos, Jimin subió a la cama y Yoongi retiró las sábanas de su cuerpo para que el albino se sentará en su regazo.

Jimin así lo hizo, aún si tenía vergüenza, su necesidad de calmar su dolor era más fuerte

Se aferró al cuello del mayor sin miedo, ya sabía que él no le haría nada, y si lo hacía, Jimin no quería negarse.

Se quedaron así por media hora, Jimin jadeando por el dolor y el calor que sentía y liberando muchas feromonas, tal vez hasta los del piso de abajo podían olerlo.

-Hyung... No funciona.- Jadeo.

-Jimin. No puedo hacer nada más.

-Haz lo.

-¿Qué?- preguntó confundido, ¿Acaso el menor le estaba dando permiso?

-Haz lo Yoongi Hyung. No puedo más. Mi lobo me está matando, me está reclamando por ti...Por favor.

Yoongi sentía como el lobo de su Omega gruñía en su interior, pues su propio lobo también lo hacía. También pedía poseer al más joven.

-No quiero que me odies, Jimin.

-No puedo odiarte. Eres un tonto pero me gustas cada vez más. No te puedo ignorar nunca, en el mes y medio que llevo aquí siempre te estoy observando, olfateando, imaginando. Por favor Yoongi, te pido que seas el primero.

Sus ojos brillaban con intensidad, Yoongi podía ver reflejada la pureza en él, y esa misma pureza le pedía que por favor acabe con el dolor. Que sean uno.

Accedió, con miedo pero lo hizo. No tenía escapatoria ni vuelta atrás. Sabía que si protegía al Omega esto podía pasar y aún así aceptó hacerlo.

Tomó de imprevisto sus mejillas y plantó un beso en sus labios, se sentían como el cielo. El menor temblaba sobre él, pero aún así le encantaba.

-Sabes que serás el primero en todo ¿No es así?- murmuró.

-Tú también eres mi primero en todo, Yoongi Hyung. Inclusive acabas de ser mí primer beso.- su sonrisa era tan pura que contagió al mayor.

-Te prometo ser cuidadoso.

-Confio en ti.

2/2


¡No quiero un alfa! » YOONMIN OMEGAVERSE «Donde viven las historias. Descúbrelo ahora