Eat my Heart

Capítulo 20

Capítulo 20

Al fin han llegado y miles de dudas los asaltan en el momento, a pesar de saber que los demás están dentro prefieren ser cautelosos y ver primero de que se trata todo esto, observar antes de ser observados. Deciden no utilizar el portón principal que permanece sin cerrojo invitando a entrar a quien quiera hacerlo, eso les resulta muy extraño. Quién en su sano juicio le daría entrada libre a cualquiera? Ni siquiera en Woodbury vieron algo así.

Vuelven al bosque dando un rodeo hasta una de las vallas laterales en donde encuentran una pequeña elevación del terreno que les permitirá treparla sin problema, pero antes de hacerlo, Rick les pide que elijan solo una de sus armas y guarda el resto junto con las que recuperaron del grupo de Joe y las entierra, hace una marca en el árbol más cercano y todos memorizan su ubicación, esa será su reserva por si la llegaran a necesitar. Después de hacer eso saltan de a uno hacia el otro lado, no ven a nadie, todo parece desierto y se aventuran en medio de dos edificios. A medida que avanzan pueden ver indicios de vida dentro del lugar: macetas con flores, herramientas de jardinería, ropa extendida y unos contenedores para juntar agua de lluvia.

Encuentran una puerta abierta y entran en silencio con sus armas listas para disparar, pero dentro tampoco encuentran a nadie, es una enorme habitación vacía de color gris, en las paredes todavía pueden verse las marcas de muebles y cuadros, las bocas de conexión para Internet y líneas telefónicas les hace suponer que era usada como oficina. Atraviesan otra puerta que los lleva por un corto pasillo hasta otra estancia del doble de tamaño y lo que allí encuentran los deja atónitos. Candelabros y velas encendidas por todas partes, nombres de personas escritos con pintura blanca y un objeto personal en cada uno formando un enorme espiral que cubre todo el suelo de la habitación; en las paredes pueden leerse inscripciones como “Nunca confíes”, “Nosotros primero, siempre”.

Salen de allí lo más rápido que pueden y atraviesan dos habitaciones más igual de desiertas que la primera hasta encontrar una salida al exterior, dan un rodeo para volver a las vallas y poder marcharse de allí cuando se topan con la puerta abierta de un enorme galpón que seguramente era usado para reparar los vagones y las locomotoras, dentro pueden ver a varias personas trabajando. Usando un equipo de radioaficionados, una mujer de corto cabello rubio repite una y otra vez el mensaje que alguna vez lograron captar desde la radio de un viejo coche. Hacia el final hay al menos diez personas más fabricando y reparando anuncios como los que vieron tantas veces sobre las vías del tren. Entran con las armas en alto, pero nadie repara en ustedes hasta que uno de los hombres levanta la mirada y los observa estudiándolos con curiosidad. Es joven, de unos 30 años, delgado de cabello oscuro y delicadas facciones, deja lo que está haciendo y  se acerca lentamente con una amplia sonrisa en su rostro.

-         Se ven muy cansados, se nota que han tenido que caminar mucho para llegar hasta aquí.- les dice amigablemente y con las manos en alto.- Bienvenidos a Terminus, mi nombre es Gareth. Cuáles son sus nombres?- todavía desconfiado y mirándolos a ustedes de reojo, es Rick el primero en hablar.

-         Mi nombre es Rick y esta es mi gente.- a continuación todos se presentan diciendo su nombre.

-         Están a salvo aquí, les aseguro que sus armas ya no son necesarias. Déjenlas en el suelo por favor.- dudan unos segundos, pero finalmente hacen lo que les piden. Los superan en número y si fueran hostiles ya los habrían atacado.- Si nos permiten tendremos que revisarlos, es solo por rutia.- y junto a otro hombre de rasgos latinos a quien llama “Carlos”, se acercan para registrarlos comenzando por Rick y Carl que está a tu derecha. Gareth termina antes y se acerca a ti dispuesto a continuar, pero inconcientemente retrocedes unos pasos antes que pueda tocarte, si bien nunca te pasó desde que llegaste a la prisión, aun te resulta difícil el contacto físico con extraños. Con mala cara Gareth avanza nuevamente, pero Daryl extiende su brazo delante de ti evitando que te toque.