Por un idiota como tú [TsukiHina]

El día después

El día después a la confesión era el más encantador pero a la vez el más difícil. Hablar con honestidad y declararle al chico que te gusta que en realidad era amor lo que sentías por él, solo es el primer paso a lo que se conoce como iniciar una relación. De ahí en adelante, la complejidad aumentaba sobre todo si eras primerizo y algo restrictivo contigo mismo.
Kei conocía a Hinata y las formas tan abiertas que poseía de demostrar cariño hacia sus personas queridas, las que contrastaban diametralmente con las suyas. De que tenía miedo de llegar a la escuela, lo tenía. Habían dejado claro que su relación sería un secreto y por ende, nada entre ellos debía cambiar a la vista del resto, pero con Hinata-mas bien con su entusiasmo y ansiedad- esa regla podría quebrantarse a primera hora de la mañana cuando se encontraran en el pasillo para ir a sus salones de clases.

-Si Hinata lo prometió, entonces lo cumplirá.- Tadashi sonreía como un bobo a su lado, incluso tarareaba una canción pop cursi que estaba de moda. Parecía ser que él quien había iniciando un noviazgo porque irradiaba felicidad llena de tenues colores pasteles, flores abriendo botones en hermosos pétalos , estrellas y corazones naciendo en cada -escaso- rayo de sol.

Esa actitud empalagosa en realidad, era culpa suya.

Al llegar a casa la tarde anterior, Kei llamó a su mejor amigo para contarle lo sucedido; inesperadamente él mismo no pudo contener las ansias de abrir la boca y gritarle al mundo que el chico del que estaba enamorado era suyo, solo suyo de aquí a la eternidad. Desbordaba de él un sentimiento nuevo, precioso e inquietante, de aceptación y seguridad. ¿A quién más le podía relatar lo sucedido, si Tadashi con su poca tolerancia a los secretos, le había dado el pase para plantearse la idea de que su amor no correspondido si sería correspondido?Fue una forma de agradecer enorme la ayuda pero no estaba preparado para que el pecoso bloqueador gritara como quinceañera hormonal y preguntara detalles. Detalles exactos de como se observaron, como se tocaron y besaron. Kei cortó la llamada de inmediato y unos 15 minutos después contesto el móvil con las disculpas avergonzadas de Yamaguchi para -por fin-comportarse como un hombre. La conversación derivó en felicitaciones extensas y buenos deseos porque Tadashi era un buen chico que desea que su amigo más querido fuera plenamente feliz. Y eso, siempre se lo iba agradecer. En silencio.

-Eso espero.-respondió con seriedad. De hecho ya se habían mensajeado al despertar. Hinata comenzaba su rutina desde muy temprano, exactamente a las 6 de la mañana. Cada amanecer debía preparar el desayuno para él y su hermana, hacer la colada si tocaba, verificar el estado de su bici, revisar el calendario de actividades de la escuela de Natsu-chan y partir a la clases.

Reina de la luna-06:05 am
Buenos días Tsukishima ¿dormiste bien? :)

Ese simple mensaje le provocó un sonrojó inmenso, estratosférico. Que Hinata pensara en él al despertar era maravilloso. Irreal, quimérico, extraordinario.

El primer amor era tan estúpido.

Tsukishima K❤️-06:07 am
Dormí bien, gracias ¿y tú?

Está bien, si debía cambiar esos tontos hábitos de responder tan crudamente, después de todo estaba hablando con su novio-que bien sonada eso- no con un amigo cualquiera o su hermano mayor.

Reina de la luna-06:08
¡Muy bien! Deseo verte pronto ¿te parece si almorzamos juntos? yo llevo los bentos.

Tsukishima K❤️-06:09 am
Si, almorzaremos juntos. Nos vemos en la escuela.

Reina de la luna-06:11 am
Cuídate❤️.

Cubriendo su rostro con una almohada sentía el cuerpo fundirse en las sábanas de su cama. La vergüenza pura y dura que jamás había experimentado por alguien le atacaba de formas horrendas.
Aterrador.
El amor es aterrador.