Como niños buscábamos el amor,
luego lo perdíamos como el agua en el río
porque no sabíamos cómo cuidarlo
y en distintos mares naufragábamos.
Marineros inexpertos,
gritábamos en espacios cerrados;
creábamos eternos ecos;
abandonábamos el placer de buenos besos.
Cual infantes sin conocimiento
nos introducíamos a barcos sin velero.
No concebíamos el norte.
Binarios hijos del sur.
Aun vestidos de cobre,
después de la primera noche
olvidaste fácil mi nombre.
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Margarita
PoesíaAmores en el Jardín III. «Margarita; con esta poesía planeo cortejarte hasta hacerte mía, y no es que tenga planes para los siguientes días, ya que planeo amarte toda la vida». Abigail Greene, 2017. Obra original. Reservados todos los derechos. #790...
