capítulo 2

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Lucas

Toda la clase he estado pensando en lo de Vesta y estoy aterrorizado. No sé lo que me va ha hacer. Porque una cosa es hacer como si el pego y otra muy diferente, es darla una patada de verdad, me podría hacer cualquier cosa.

Y yo la he visto enfadada y la persona que le provocó el enojo nunca, sale victoriosa. Me podría torturar o decírselo a su padre.

(Si así es, su padre es el que de verdad dirige la empresa. Pero ella la heredará en su próximo cumple. Como él nunca esta, Vesta es quien pone las normas desde hace ya varios años.)

O peor podría dejarme sin comer y no, no me refiero a una comida, si no ha días sin comer como castigo. Lo hace bastante a menudo cuando hacemos una infracción leve.

A mí me dejo una ver 2 días sin comer ni un bocado y os aseguro que es horrible. No puedes comer nada a escondidas, porque si te píllenlo más probare es que acabes a unos cuantos metros bajo tierra. Solo de pensarlo me pongo a temblar y por lo visto mis amigos se dan cuenta porque me dicen:

-que pasa hermano, estas temblando- dice Carlos con expresión preocupa

-no nada, es que tengo algo de frio- pero como estamos casi en verano y la escusa no iba a colar mucho, añadí -creo me estoy poniendo malo-Pablo solo asintió un poco extrañado pero volvió a comer.

Ya estamos en el almuerzo, yo solo devoraba y cogía más. Porque sabía que lo más probable, es que me quedara unos días sin comer.

Después de la comida siento que voy a reventar. Estamos un rato charlando y luego, nos metemos a la clase para empezar con las aburridísimas matemáticas. La clase paso normal hasta que el profesor dijo:

-señor pablo quédese un rato después de clase-dijo y nadie le pareció raro porque él era el chico malo de la escuela.

Pero luego el profe dijo:

-Usted también señorita Vesta- con eso si que nos quedamos todos un sorprendido, porque Vesta aquí nunca se mete en ningún lio

Yo solo me voy rápido a casa de Vesta, donde yo vivo y me pongo a comer algo antes de que llegue mi castigo

Vesta

Me mandan quedarme y yo al principio me preocupo, porque me da miedo de que me haya descubierto. Así que solo me quedo en el pupitre hasta que en la sala solo quedamos los tres.

-Los he reunido aquí porque el señor Pablo va horrible mente mal en la materia y he pensado. Que tal vez la señorita Vesta, pueda echarle una mano con la materia, para que no tenga que suspender el curso-

Dice el profesor todo de seguido. Nosotros solo nos quedamos en shock, cada uno en una punta de la clase, hasta que los dos saltamos y vamos corriendo a donde e profesor a quejarnos

-No me puede emparejar con esta nerd. Ba arruinar mi reputación, solo es una niña consentida- dice el exasperado

Un segundo, ME ACABA DE LLAMAR NIÑA CONSENTIDA, a no, este de aquí no sale vivo.

-pues yo, no quiero enseñarla nada a un orangután con el cerebro de una nuez. Al cual solo importa follarse a todas la putas del equipo de animadora, las cuales cuando mueran, van a tener que echarlas al contenedor amarillo de lo plásticas que son- digo gritando y los dos se me quedan con o ojos bien abiertos .Porque yo aquí nunca chillo

-no hay más que hablar, tendrán que hacer lo que les he dicho o les suspendo la materia- grita y los dos salimos de allí echando un humo

Cuando salimos, él está a punto de decir algo, pero yo le corto y e digo:

-en tu casa a las siete. Me da igual que no puedas, porque a aquí soy yo quien enseña y tú el zoquete que no sabe ni sumar 1+1- y salgo de allí sin esperar respuesta.

el ángel de la mafiaDonde viven las historias. Descúbrelo ahora