ElDarya's One-shot!

Hongos mágicos

La verdad es que siempre me quejaba por las contestaciones frías y secas de Ezarel. Por no demostrarme sus sentimientos y por sus comentarios sarcásticos pero, ahora nada de eso me molestaba. Tal vez no me he explicado con claridad pero, esta mañana todo era normal, nos encontramos en la puerta de la biblioteca y nos saludamos como todos los días. Después de eso entré en la biblioteca encontrándome a Ykhar ordenando unos archivos, cuando se dio cuenta de mi presencia me saludo alegremente y me comentó que los chicos iban a hacer una misión algo peculiar y que necesitaba empezar el informe ahora, para luego solo hacer un resume de lo sucedido durante la misión.

Mientras ella escribía, Karen apareció por la puerta preguntando por mí. Al parecer, Alajea y ella querían hacer un picnic en la playa y habían decidido invitar a más gente. La sirena había ido a buscar a Kero y a Chrome y Karen era la encargada de buscar a las chicas que estaban en aquella sala.

- Karen, no sé si voy a poder ir, y supongo que Kero tampoco. Estamos bastante saturados.

La vampira se cruzó de hombros y me arrastró hasta el mercado donde estaban Alajea y Chrome con todo lo necesario para almorzar.

– ¡Vamos! - exclamó Chrome poniéndose a caminar rumbo a la playa.

La mañana para mí fue de lo más tranquila, después del almuerzo jugamos un poco por la playa y después recojimos todo para volver al C.G.

Fue entonces cuando los chicos llegaron, Valkyon y Nevra se estaban riendo mientras delante de ellos iba mi elfo favorito. Le saludé con la mano, sabía que no le gustaba mucho que saltara a sus brazos, pero, en ves de devolverme el saludo, fue él quien saltó a mis brazos y me besó.

– Te echaba muchísimo de menos, cariño.

Le miré sorprendida y me alejé de él en el acto, mientras todos nos observaban

– ¿E-Ezarel?

– Dime, cielo

Ezarel estaba muy raro. Negué con la cabeza y decidí seguir hablando.

– ¿Estás bien? Nunca me habías llamado nada así

– ¿Te molesta? ¿No te gusta? Lo siento muchísimo- contestó agarrando mi mano- Pero eres lo mejor que me ha pasado en toda mi vida, de verdad me alegro que dejaras tu mundo para venir aquí a ElDarya...

– ¿De acuerdo...?

– ¿Qué te parece si hoy salimos tu y yo a algún sitio?

– Vale, Nevra, Valkyon, dejad de reíros y decidme qué le ha pasado a Ezarel- les ordené cuando el nombrado no quiso separarse de mi

– No tenemos ni idea, nuestra misión había acabado, encontramos unos hongos sospechosos, Ezarel los arrancó y... ahora está así – explicó Nevra

Valkyon propuso ir a ver a Miiko, cosa que todos vimos adecuada, intenté caminar lo más rápido posible pero, tenr sobre ti a ese chico de pelo azul no ayuda demasiado. Miiko estaba con Leiftan, y éste último nos contó que esos hongos cambia la personalidad de la persona que los toca de una manera drástica y, que dependiendo de cada individuo, ese cambio podía durar horas, dias o incluso semanas... solo pude mirar al gran cristal implorando al Oráculo para que se le pasara lo más pronto posible.

Así que por la tarde, Ezarel me hizo desfilar tienda por tienda comprándome cosas aunque yo le dijera que no. Habíamos parado en la tienda de ropa donde no me dejaba salir del probador por que cada vez me traía más y más ropa

– ¿Quieres algo más, cariño? - preguntó desde la puerta

– No, ahora salgo.

Es que... joder, nunca pensé que lo diría pero, hecho de menos ese Ezarel sarcástico que se preocupaba de mí a su manera, el que no me hacía regalos costosos y me hacía valorar sus pequeñas muestras de afecto. Por muy perfecto que sea este nuevo Ezarel, lo único que quiero es que mi Ezarel vuelva pronto.

– Erika, ¿Qué estoy haciendo aquí dentro? - me pregunta cuando abre la puerta -¿y por qué hay tanta ropa a tu alrededor?

No lo pude soportar y me lancé a sus brazos abrazándole con fuerza

– Por fin vuelves a ser normal...- susurró aliviada mientras sus brazos me rodean

– ¿Qué ha pasado?

– Te lo contaré todo, pero ahora, salgamos de aquí- contesté mientras agarraba su mano.