I Need U || JiKook

Excéntrico

Las enfermeras iban de un lado a otro, con pasos apresurados y desesperados, el chico que se apoyaba en sus propias rodillas lloraba con solo escuchar sus palabras y los comentarios que le hacían creer como los sentimientos y razones que tuvo el menor carecieran de valor e importancia.

Dos enfermeras llegaron corriendo mirando a las demás asustadas, el color carmesí era lo único que importaba en ese momento, el terror reflejarse en los rostros de los presentes no era algo que se dejaba pasar a simple vista. Las ruedas de la camilla resonaban por cada pasillo y las palabras que iban dirigidas a las enfermeras por parte del chico que corría junto a la camilla con el cuerpo, pidiendo que lo salven.

-Jimin... -apenas y logro escuchar el chico que corría desesperado, las débiles palabras salían de los labios del castaño con desesperación.- Necesito... J-Jimin...

-Vamos Jungkook, no me dejen solo- fue lo último que dijo el chico antes de ver desaparecer la camilla rodeada de enfermeras por la puerta del área de emergencia.- No puede terminar así, Jimin no me prestaste la tarea ese día que te la pedi por mensaje y Jungkook no me mostraste tu unicornio...

Se dejó caer en las sillas de la sala de espera con una melancólica sonrisa en su rostro mientras recordaba esos días.

Jungkook...

Jungkook despierta, estoy aquí.

No me iré de tu lado, quiero escuchar tu melódica voz, vamos despierta...

-¡¡Jimin!!

La fuerte luz lastimaba sus pupilas, cerró nuevamente los ojos, el dolor en cada parte de su cuerpo se le hacía familiar a un entumecimiento y algunos cables inyectados a sus brazos le hicieron fruncir el ceño al igual que no ver las cicatrices de los cortes. Con desespero busco en la habitación al dueño de aquella voz, esa que le había despertado de su profundo sueño. Por desgracia no había rastros de alguien en la habitacion, y como de un flash recordó lo que había ocurrido, de sus ojos salieron lagrimas una detrás de otra, quería escuchar a Jimin decir esas palabras no vagos recuerdos almacenados en su cerebro.

Necesitaba verlo y sentir su delicada piel, ver esa eyesmile que solo el sabia hacer y besar dulcemente sus labios, sentir sus cálidos abrazos y sus dedos acariciar sus cabellos, admirar cada centímetro de su rostro y pintar miles de retratos. Escuchar su risa y ser el motivo por el cual sonríe cada mañana, estar junto a él y ver el amanecer juntos, deseaba caminar a su lado aunque sea por un minuto, mostrarle aquel dibujo que jamas llego a mostrarle por la inseguridad que sentía de sus propias pinturas. Recordarle cada día que no estaba solo, y estaría junto a él para cuidarlo y hacerle feliz cada dia, lo necesitaba... necesitaba a Jimin... Su corazón lo necesitaba y sabía que el único que manda es el corazón, lo necesitaba como una abeja al polen, el corazón a la sangre y una razón para vivir, porque Jimin es su razón de vivir.

-Jimin, Jimin te necesito... Jimin, ¡Jimin!- el desespero que le consumía en ese momento no se podía comparar con la vez que lo buscaba en el parque. Sentía que debía verlo sin importar que tuviera que hacer para ello.- ¡¡Jimin!!, ¡¡Jimin te necesito!!

Empezó a gritar con desespero y se desconecto los cables por donde aún fluía la sangre, en sus manos se veían tan cristalinas sus venas que parecía el vidrio de una tienda mostrando sus objetos y productos. Cada vez sus pensamientos se volvían más difíciles de controlar y el subconsciente parecía haber viajado a otro lado, con dificultad bajo de la camilla e intentó moverse más allá de esta pero sus piernas eran inútiles, estaban entumecidas y solo se quedo ahí parado, tratando de moverse sin resultado.

De un instante a otro las enfermeras entraron en la habitación por los gritos que provenían de esta. Las piernas le temblaron y estuvo a punto de caerse pero se apoyó en la pared, ignorando las palabras de las enfermeras siguió preguntando, mas hacia si mismo que a ellas, por Jimin, debía buscarlo y mirarle por una vez y se sentiria en calma, solo necesitaba lleg...

-¡¡Joven Jeon!!

La voz había sido fuerte y de sorpresa, se volteo para encontrarse al mismo doctor mirarle con una mezcla de preocupación y lastima, todos a su alrededor parecían sorprendidos y exaltados por lo que ocurría. Pero por alguna razón él se sentía en otro mundo, algo extraño, como si los demás supieran algo que él no sabe, y por más que lo intentara no lograba entender la situacion.

-Jimin... ¿Donde esta Jimin?- preguntó con un tono desesperado y ansioso, pero el hombre solo le miraba confundido y parecía no encontrar las palabras.- ¿Dónde está?, ¡déjeme verlo!

-Calmese- pidió con tranquilidad y haciendo gestos para que se sentara.- Primero relájese y luego hablamos con calm..

-¡No!- todo su alrededor parecía estar en su contra, se sentía como aquellas personas con trastornos que eran incomprendidos por la sociedad, un excéntrico.- ¡Usted no entiende! ¡Necesito ver a Jimin!

-Hablaremos al respecto cuando esté calmado-el doctor se disponía a salir del cuarto pero se detuvo y miró a las dos enfermeras.- Coloquenle los conductos con lo recetado y después pueden irse, volveré dentro de un rato a verificarle.

Las agujas del reloj parecían haberse detenido junto con el sonido que este producía, estaba perdido en sus pensamientos e intentaba concentrarse y buscar una forma de salir a buscar a Jimin, pero estaba ansioso, no sabía exactamente el porqué, pero esperar al doctor no era buena idea para calmarse. Menos si le negaron salir de la habitación y terminó por darle un vistazo al lugar, todo era gris y blanco, y la iluminación era fuerte, pero acabó mirando los cables que habían vuelto a dejarle en los brazos hace unos instantes cuando se hubo calmado. Hizo un repaso a su recuerdo reciente, si ve más allá de lo ocurrido nunca llegó a ver a Jimin, solo a Taehyung, quien por alguna extraña razón no estaba ahí, pero aún no le quedaba claro algo.

¿Por qué gritaba su nombre?

Cuando llegue ese día,
detrás de esas lágrimas que se esconden entre la lluvia,
estare esperandote.