Verdades

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-¿Kookie?

Su voz se escuchó en toda la habitación, excepto en el baño, donde aún se encontraba el menor. Después del enojo de hace unos instantes ya se había logrado calmar y sentirse mejor con el recuerdo que apareció de nada más entrar. Esa primera vez que lo vio cuando salió de la ducha con el aspecto de un chico flor, tan tierno y afeminado que los miles de pensamientos impuros llegaron en un lapsus de tiempo muy corto.

-¡J-Jimin, me asustaste!- no se percató del momento en que había salido del baño y se sintió un tonto al no responder.- ¿Estas bien?

-Oh, no es nada- aseguró tratando de mantener la mirada en su rostro y no bajarla a la toalla que le rodeaba la cintura.- Solo quería... -muy tarde, ya lo hizo y solo pudo ver como el rostro del menor se tornaba rojo y entraba al baño como flash.- ¡Espera Jungkook!

Se levantó y se acercó a la puerta, intentó abrirla pero tenía seguro. Se sintió la peor persona y no sabe exactamente la razón.

¿Cómo demonios se volvió tan inseguro?
-Jungkook lo siento... yo.. no pretendía..

Las palabras eran inseguras y dudaba de lo que estaba diciendo, ¿Si pretendía..? esperen no, no, no, Jungkook estaba en un estado 'delicado' por decirlo así y debía detener esos pensamientos impuros, pero ahora tiene un problemita y tendría que darse una ducha fría para deshacerse de eso.

Espero que no lo haya notado...

°•°•°•°

 
Se levantó con pereza, el frío en la habitación no le dejaba dormir y al parecer no lo haría si se quedaba allí, asomó la cabeza para mirar cautelosamente el pasillo, todo estaba en silencio y oscuro, la puerta de Jimin estaba entre abierta cosa que le hizo sonreír hasta llegar a esta. Eran cerca de las doce de la noche pero sabía que Jimin tenía el sueño ligero y sería difícil lograr su objetivo.

Jimin es cálido

Dedujo con un expresión de satisfacción al lograr entrar en la cama sin despertarlo y sentirse alejado del infernal frío que hace poco le helaba hasta los huesos. Se volteó quedando frente a su rostro y lo miro por unos instantes, su rostro lucía pacífico, delineó cada centímetro con su dedo índice y apreció cada detalle en él. Un sonrojo le adorno cuando la mano de Jimin le detuvo y entrelazo sus dedos al instante sin abrir los ojos.

-Dulces sueños kookie...

Y con esas tres palabras cayó en los brazos de morfeo, aunque para él, eran los de Jimin, pues ahí se encontraba realmente.

Para la mañana siguiente ambos habían despertado temprano, tomaron el desayuno en calma y con pequeños gestos de cariño, todos podrían pensar a simple vista que eran una pareja hermosa con una vida perfecta. Pero en realidad habían pasado por mucho y las heridas aunque trataran de ocultarlas seguían ahí.

-¿Y Taehyung?

La pregunta del menor le había tomado desprevenido, dejo de mirar el televisor para fija su vista en esos hermosos ojos y su rostro con ese tierno puchero, involuntario, de confusión.

-¿Que ocurre con él?

-¿Cómo es que apareció en la sala de emergencia y le escuche?

-Taehyung no estuvo en la sala de emergencia- lo miró confundido.- Fui yo.

-Pero el venia conmigo desde antes que todo ocurriera, luego yo.. -pensó sin poder recordar el momento con claridad.- Creo que... ¿empecé a correr?

-Tranquilo... se que es difícil pero tomalo con calma- expresó y se acomodo hasta quedar frente a él en el mueble.- ¿Que recuerdas?

-Una voz, aunque no logro reconocerla- frunció el ceño.- gritaba mi nombre y de ahi no recuerdo más nada.

I Need U || JiKookDonde viven las historias. Descúbrelo ahora