Naruto: "Mascara"

Capitulo 11

Naruto iba caminando a paso apresurado hacia su apartamento, Ayate y Yugao lo habían seguido pero ambos decidieron dejarlo solo ya que Naruto estaba realmente cabreado esta vez, de hecho, es la primera vez que lo ven tan enojado. Le habían hablado al principio, pero Naruto les contestó que necesitaba estar solo por un momento, estaba tan cabreado que si hubieran seguido insistiendo en hablarle, probablemente Naruto los mandaría al diablo a ambos y luego se arrepentiría. 

Tampoco ayudaba el hecho de que apenas pisó la calle, toda la atención de los aldeanos se concentró en el, creía que su familia eran una bola de estúpidos pero esto era ridiculo, ¿Creían que no se enteraría de que ellos eran su familia despues de decirselo a toda la aldea?, practicamente llegaron con un cartel gigante diciendo que el era el hijo abandonado de ellos. Naruto odiaba la atención y le enojaba el hecho de que todos los que lo odiaron en el pasado ahora lo miren como si fuera una especie de noble o principe.

Hipocritas - Dijo Naruto sin importarle si lo escuchaban, pero debido a los murmullos no lo hicieron.

Naruto llegó a su apartamento y en la entrada se encontró con Anko quien llegaba del trabajo, notó la mirada de lastima que le dió así que imagino que ya se enteró de la noticia. Apesar de que eran casi hermanos, nunca le contó sobre la identidad de sus padres ya que su abuelo se lo prohibió, además nada le aseguraba de que Anko difundiera la noticia aunque sea improbable, confiaba en ella pero ese riesgo seguía ahí.

Naruto no le dirigió la palabra a Anko, no quería descargar su enojo con ella así que entró en silencio, al entrar se encontró con Kurenai quien estaba bebiendo té mientras leía un libro, no dijo nada ya que su apartamento era como una segunda casa para la peli negra y según sus palabras, su sofá era demasiado comodo. Sin siquiera mirar a Kurenai, Naruto se dirigió a su cuarto pero un repentino grito de Anko lo detuvo.

¡Eres hijo del Yondaime! - Gritó Anko impactada.

Tch... - La ira despertó en Naruto, Anko era demasiado estúpida aveces y debería aprender a leer el ambiente.

Anko se acercó a Naruto ignorando a Kurenai quien negaba furiosamente, intentando que se detenga, ella había notado desde el primer momento el estado de animo del rubio. Anko con una gran sonrisa le dió un golpe a palma abierta en la espalda del rubio, sintió como su cuerpo se tensó y creyó que era debido al golpe.

¿Como no me di cuenta antes? - Preguntó Anko sonriente mientras que Naruto rogaba internamente que se detenga ya que no quería descargar su ira en ella - Como sea... - Anko descartó el tema rapidamente aliviando a Naruto - Tengo noticias... - Dijo con una gran sonrisa, Naruto la miró de reojo.

Naruto suspiró internamente, Anko no lo había molestado tanto con respecto a su familia y esperaba que su gran noticia pueda cambiar su humor, que de paso a un ambiente mas ambiguo pero como siempre, su suerte no podría ser tan buena, nunca lo sería y las siguientes palabras de Anko realmente lo destrozarían.

¡Estoy saliendo con el bombón de tu hermano!- Exclamó Anko felizmente haciendo que los ojos de Naruto y Kurenai se ensanchen.

La gran noticia de Anko dió paso a un tenso silencio, era el silencio mas tenso que Anko sintió alguna vez, notó como el unico ojo visible de Naruto se afiló y luego de mirar a Kurenai esta estaba con una mano en la frente, como si estuviera lamentando algo. Mientras que Naruto estaba realmente herido, ¿enserio? ¿con Ryu?, miles de preguntas similares le llegaron a la mente. Si, sabía que Anko era capaz de algo así pero ella sabía que el no se llevaba bien con su familia en lo absoluto, ¡además con su hermano!. Practicamente eran casi copias exactas, ¿Que tenía Ryu que el no pudiera tener?, ¿Que le vió Anko a Ryu que fuera mejor que el?, si el tipo era mas fuerte que el pero no creía que Anko haya peleado con el como para saber cuan fuerte era.