Capítulo 4

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-¿Y porqué lo haría? Yo no ayudo a delincuentes, y menos a unos como tú. -le lanze una mirada de odio sobre mi hombro.


-Oh... Mi corazón... Se... Rompió -dramatizó, vaya que idiota -Si me ayudas, también tendría cosas beneficiosas para tí.

Me quedé pensando, ¿A qué se refería? ¿Beneficioso para mí? Eso era imposible.

-¿Beneficioso? ¿Cómo qué? -dije sin quitarle mi mirada de odio de encima, estaba por demás decir que no le iba a creer ninguna palabra que saliera de su boca, sin embargo, igualmente tenía curiosidad.

-Yo podría...

Fue interrumpido, no pudo seguir hablado, ya que la puerta principal se había sido abierta.

-Hyung, ¡ya volví! -la voz de Seungkwan se hizo presenté en la casa.

Oh no, Seungkwan ¡SoonYoung, no entres en pánico! Me decía a mi mismo, no debía ser cobarde, de echó... Estaría bien que Seungkwan nos encontrara para que me ayudara o algo por el estilo, pero, recordando, él no es muy bueno para defenderse ni cualquier cosa que tenga que ver con actividad física, por eso nunca va a una misión que requiere esos tipos de habilidad.
Por otra parte, también me avergonzaría al echo de que nos encontrara así... En esa peculiar posición, porque podría mal pensar, ¡Y no quiero que eso suceda!

-Quitate de encima -susurré bajo, pero con cierto grado de enojo en mi voz.

-Y sí no quiero... ¿Qué harás? Eh, policía -dijo con una sonrisa burlona en su rostro.

-Bajaté -ordené estando verdaderamente molesto, eso era muy difícil de ver en mí.

-Emm... Deja pensarlo... -miro el techo siendo irónico, tipo cuando estas en una evaluación y piensas que la respuesta caerá del cielo, algo similar -Sigue siendo un no -se volvió a reí.

Cada vez lo odiaba más, era tan arrogante, tan idiota, era tan... Tan él.
De echó, creo que si busco en el diccionario la palabra "idiota" aparece su nombre como sinónimo.

-Hyung, ¿Está arriba? -la voz de Seungkwan se volvió a hacer presenté, ese chico siempre me trataba de usted y con mucho respeto, era un chico muy educado.
No respondí, pero oía las escaleras sonar... Mierda... Las estaba subiendo; cada escalón que subía, me colocaba más nervioso, de echo, ya tenía algunas gotas de sudor en mí frente; luego de algunos segundos, Seungkwan ya las había subido por completo, por mi parte intentaba empujar al criminal, más éste, como ya mencioné anteriormente, era mucho más fuerte.
Vi de reojo como la manilla se estaba moviendo hacia la derecha para ser abierta.

En un abrir y cerrar de ojos siento una presión un poco brusca en mis labios, me estaba besando, aquel criminal me estaba besando, ¡Idiota! !Nunca me cansaré decirlo! Sé que está mal sentir odio, pero en esta ocasión, ¡La regla no aplica!

Me quede totalmente impresionado, con los ojos bien abiertos como platos.
Ahora que lo pienso... Su plan fue inteligente, debido a que su cara no se veía por su cabello negro, además de un polar del mismo color; también mi cara también ayudaba a ocultarlo... Un plan demasiado inteligente a mí parecer.

-Hyung, esta aq.... ¡Oh por Dios! ¡Lo siento! -dijo para rápidamente cerrar la puerta tras sí -Em... Iré a la estación, le diré a Seungcheol que llegaras... algo tarde -bajó las escaleras, se escucho que la puerta de abajo se abría y se cerraba, lo más probable era ya se había ido.

Dirigí mi vista hacia el criminal... Aún me estaba besando, que asco... Bueno... No besaba tan mal... Pero tampoco me agrado que lo haya hecho.

Rápidamente separo mis labios bruscamente de los suyos, haciendo que un fuerte dolor en mi cuello se hiciera presente por tal brusquedad, pero en esos instantes era lo de menos. Luego de separarlos por completo, levante mi rodilla para luego pegarle una patada... En... Bueno... En el lugar en donde a cualquier hombre le duele.

-Aght! -se separo, tirándose al lado de la cama, con sus manos en su miembro, estaba quejándose de dolor- Pegas muy bien, lindura -seguía retorciéndose de dolor.

-Idiota -susurré, tenía ganas de reírme de su dolor, pero hasta a mí me llegó su sufrimiento.

-Como te decía... -se estaba tranquilizando de su gran dolor- Te tengo una propuesta, si me ayu...

-Mira -dije firme- yo soy un policía, es obvio que no te ayudaré, así que no lo inten...

-¡Me entregaré! -grito desesperado -si me ayudas... Me entregaré -reiteró más lento.

-Hablas encerio... No estoy para juegos...

-Mira... Es que me metí en un pequeño... Mediano... Un gran problema. -decidió afirmar por fin -Lo que pasa es que... Estafé a un soldado de NorCorea; me quiere matar.

-Pues... Que bueno -hize una sonrisa forzada e irónica.

-El punto es... -prosiguió -me esa buscando, y casi, pero casi me encuentra, pero logré llegar acá, porque... ¿Quién pensaría que un criminal estaría en la casa de un policía? -iba a responder, pero habló antes que yo -Exacto, nadie; por otra parte, si me entrego ahora, él pagará mi fianza y... No creo que solo me quiera hacer cariño... Podría hacerme cariño... ¡Pero con una motosierra! -dramatizó -Así que el trato será el siguiente... Tú, atraparás a ese estúpido y luego yo me entregaré -se alzo de hombros, como si se tratara de resolver una simple suma o resta.

-Y ¿Quién me asegura que después no te escaparás? Porque que yo sepa, ya has engañado a cientos de personas con él mismo cuento. -alze una ceja cruzándome de brazos.

-¿Tanto desconfias de mí?, me dueles SoonYoung... -lo fulmine con la mirada -Mira... Te lo prometo... Haría cualquier cosa... Cualquiera...

Mi Hermoso Delincuente (SoonHoon/Hozi)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora