Trainee // Nakamoto Yuta

9.

- ¿Estás bien? - Pregunto con una voz adormilada -

- Si, yo... Mis ojos arden - Mentí al chico de cabellos rojos el cual sonrió sentándose a mi lado en el avión -

- Soy Taeyong - El chico sonrió ampliamente -

- Soy Alexandra pero puedes llamarme Alex - está vez evita saludar a mi manera -

- Bonito nombre -

- Gracias, - me removí en el asiento tratado de buscar a Yuta con la mirada - ¿Sabes cuánto falta para llegar?

- No desesperes solo falta una hora - Sonreí y agradecí de nuevo - ¿Eres de aqui no? O sea de alguna parte de México -

- Si, creo que no vivo lejos de aquí unas horas quizás -

- Genial! ¡Podrás ver a tu familia! Que suerte - El sonrió y se levantó - Ya vuelvo Alex - Taeyong se fue a no se donde, estuve sola la hora que faltaba del viaje, al entrar al aeropuerto y tomar las maletas divise a Minseok y a Chen corrí hacia ellos y me puse de puntitas para poder cubrir los ojos de Minseok.

- ¿Quien soy? - Hablo Chen por mi lo cual le agradecí -

- Chen - Minseok río - Tienes las manos de una mujercita -

- Oye! Las tienes igual - Reclamo Chen mirando sus manos quise reír pero me contuve -

- Alex descubre mis ojos por favor - Hice un puchero y descubrí sus ojos

- ¿Cómo supiste que era yo? - El tomo mi mano y toco mi brazalete, a Minseok le encantaba mi brazalete, siempre que estábamos juntos pasa minutos mirándolo, una vez había tratado de quitarlo y yo grite asustandolo.
Era un brazalete en cadena delgada de oro con detalles de oro blanco y negro y un dije de un colibrí en oro blanco y relleno con flores pintadas de color rosa.
Me lo habían dado mis padres en mi cumpleaños número diez. Cuando me querian.

Flashback:

- ¡Alexandra, Feliz cumpleaños! - Exclamó mamá abrazándome fuertemente -

- ¡Mami gracias! - devolviendo el abrazo -

- Papi y yo te tenemos un regalo cariño - Canturreo ella y saco una pequeña caja de terciopelo color tinta - Es especial y es único, debes cuidarlo mucho no hay dos iguales Alex. - Me avalance de nuevo a abrazarla agradeciendo por el regalo -

- Es hermoso Mamá! Ponlo Ponlo - Estire mi brazo para que ella me colocará el brazalete - ¿Es un colibrí? ¿Por qué un colibrí? - Pregunto mirando el bonito dije en el brazalete -

- Por que tú eres como un colibrí - Ella sonrió acomodo la camisa de mi uniforme y baje a la sala junto a ella -
Desde ese día el colibrí se volvió mi ave favorita

Fin del flashback

- Oh cierto amas a mi brazalete - rei levemente -

De ahí partimos al hotel eran las once de la noche, los chicos estaban cansados al igual que yo.
Repartieron las habitaciones y yo quedé con Yuta.
Al instante entramos a la habitación era bonita y grande tenía dos camas individuales, un tocador, un baño, un armario y una televisión.
Las camas estaban perfectamente echas con unas sabanas color crema.
Me deje caer en la primera cama, era bastante comoda, Yuta se recostó en la que quedó vacía hacía calor pero era soportable.
En un instante quedé dormida.

***

Sentí besos recorrer desde mi mejilla dejando un rastro hasta mi cuello, abrí mis ojos mirando a Yuta, quien estaba recostado en el borde de la cama