confesión

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[tw: descripciones gráficas de gore, asesinato y muerte]

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Saludos. Mi nombre es Aksel Rohde. No hay necesidad de decirme el tuyo debido a que a mí, francamente, no me podría importar menos. Estás simplemente aquí para actuar como mi confidente, un diario íntimo que puede respirar y tener forma humana.

Supongo que me veo obligado a hacer una pequeña explicación sobre mi presencia dentro de este putrefacto lugar que es la prisión; arranqué los asquerosos ojos de Aage Abels. Con un par de tijeras, hechas en el año 1957 por una pequeña fábrica en London, para ser precisos. La dueña de la fábrica, Alicia Wells, desafortunadamente murió después de que su cónyuge la violó, golpeó, y laceró sus pulmones con un cuchillo de cocina. Me pregunto si "violación" es una mala palabra aquí: de alguna manera ella tuvo que haber sentido placer en sus acciones, ¿para qué se casaría con alguien cuyo comportamiento no tolera? De seguro supo de sus tendencias.

La gente insana no son sólo insana en el momento de sus crímenes, han sido así desde el momento que nacieron.

Ah, pero perdóname. Me he ido por las ramas.

Remover los globos oculares de una persona con un par de tijeras, a pesar de lo que muchos piensan, es en realidad una tarea justamente difícil. Puedes fácilmente sólo apuñalarlo, pero para completamente remover el ojo necesitas eliminar los párpados de la persona también, y eso era otra tarea cansadora debido a que Aage Abels era un hombre muy desobediente. E incluso después de remover sus párpados no puedo sacar el ojo de una pieza, todavía habían otros nervios ópticos conectados, y tuve que girar el filo en los bordes de los orbes para cortarlo. Eventualmente, me rendí y corté los ojos en severas piezas y dejé que caigan por su cuenta, pegajosos con sangre y lágrimas.

Veo que te encuentras un poco incómodo a la mención de sangre. Pensaré de que nunca la viste correr en la piel de una persona. Es hermoso; el líquido viaja elegantemente en la superficie que solía mantenerlo dentro, y su brillante color rojo manda divinas ondas de excitación por todo tu cuerpo. Es inolvidable, jamás estuve tan hipnotizado por ello, así que hice algunos cortes más en su rostro: unas fisuras en su oreja izquierda al igual que la derecha, pero ninguna de ellas hacía el efecto que deseaba, así que las removí.

Y en ese momento ya me había cansado del aullido de Aage Abels, así que corté su lengua también.

Mucho mejor. Como previamente pensé y anticipé, era remarcablemente más atractivo sin esos horribles ojos y lengua.

Por supuesto que él ha estado confinado desde el principio, pero nunca inmovilicé a alguien a través de desconectar sus tendones y lacerar los músculos de sus piernas antes y esperaba la oportunidad para hacerlo. La gente habla seguido de ello, de sobre qué terrorífico y cruel pero lo efectivo que es, de que quiero perpetuar esta tortura en otra persona.

Como sea, uno esperaría que un hombre como él tendría la piel fina, pero al contrario. Su tez era gruesa y difícil de cortar. De todas maneras, tuve éxito en cortar a través del material. Luego de eso estudié sus órganos, pero ya he visto suficientes pulmones, hígados, riñones y cualquier órgano interno que se te ocurra en mis años de adolescencia, así que me negué.

Para acabar, usé mis manos para envolver el cuello de Aage Abels y simplemente apreté, aunque era una embarazosa y difícil tarea para terminar debido a lo pequeñas que eran.

¿Por qué tenía que morir, preguntas? porque ¿por qué no? Ya tuve todo el placer posible con él, ¿qué haría, si siguiese vivo, además de molestarme?

Luego de que Aage Abels diera su último respiro, esperé pacientemente a la policía, que no llegó hasta cincuenta y cuatro minutos después. Estoy decepcionado. Pensé que su novio, Argon, podría notar su desaparición antes. De todas formas, un oficial de policía entró a la casa al ver mi existencia y ordenó arrojar el arma aunque lo haya hecho antes de que llegase.

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