Trece Cartas (completa)

Capítulo 1

Año 2007

-¡Oye, espera!- grito al mismo tiempo que trato de alcanzarlo –maldita sea- murmuro para mí misma y corro aun mas rápido, hasta tocar su hombro -¿estás sordo?- digo jadeando

-¿Qué pasa?- pregunta tranquilamente, claro como él no corrió como loco por todo el pasillo

-un minuto, deja respiro- respiro profundamente

-sigamos caminando- ¡Le dije un minuto! Ah, me desespera

-gracias por la espera- digo

-¿qué me querías decir?- pregunta y camina aun mas rápido, claro si no fueran sus “amigas” hasta las cargaría

-ya que somos en el mismo equipo de lengua extranjera, ¿te parece si hacemos el trabajo hoy en la tarde en mi casa?-

-sí, está bien, como quieras- más cortante no puede estar, seguramente algo le pasa

-¿Qué te ocurre?- lo sujeto del antebrazo  y lo detengo como puedo

-Hanna Rose, no pasa nada- responde mirándome, sabe que no le creo

-Ross, sabes que odio mi nombre completo. Nada, como siempre- suspiro -¿al rato me cuentas?-

-si- se suelta y se va dejándome parada en medio del pasillo y con cinco minutos de retraso para algebra, de nuevo corro para llegar antes que la estirada de mi profesora si tan solo pudiera comprender un poco de algebra

-¡Señorita Hanna Rose Fray! Apúrese o de nuevo tendrá falta- la profesora me grita desde la puerta y corro aun mas rápido hasta llegar a mi asiento junto a mi amiga

-¿estabas de nuevo con Evan?- me pregunta Anatu, siempre intuye que estuve haciendo

-si- respondo agachando la cabeza

-no aprendes, te eh dicho que ese chico solo te hara sufrir- rueda los ojos y ambas ponemos atención a la clase, o bueno ella es la que pone atención.

Anatu es mi amiga hace un largo tiempo, aunque tiene gustos diferentes me comprende y yo a ella, solo no estamos de acuerdo en mi relación amistosa con Evan; pero ni ella, ni nadie sabe cómo es en realidad Evan, todos ven al chico por fuera, el chico social, fiestero, saca notas arriba de lo que un adolescente normal podría obtener, no es del cuadro de excelencia pero le va bien, más de media escuela se muere por él. Aunque yo pienso que se mueren por el chico que ven, por la caratula que él muestra, no por el verdadero Evan.

-ahora resuelvan ustedes los siguientes ejercicios- dice la profesora cuando yo regreso de mis vagos pensamientos

-Anat, Anat- susurro, pero no me mira –Anat- susurro un poco más fuerte, esta vez si voltea

-¿Qué?- me mira sombríamente, ya sabe que le pediré que me pase los ejercicios

-me…- Anat no me deja terminar

-sí, si te los paso. Pero ¿qué harás el día del examen?- me mira enojada, se que se preocupa por mí, pero algebra no se me da y bueno me puse a divagar un poco

-le pediré a Evan que me explique, el va en matemáticas cinco- sonrio

-sí, y si no cursas esta y matemáticas seis, no te podrás graduar-

-lo se, será la última vez, lo juro- Anat levanta su libreta y me deja copiar todos los problemas, yo se que hago mal pero al menos así obtendré la mitad de la calificación, me esforzare en los otros dos exámenes y después en el final; si, si saco la materia, espero, tendré que pedirle ayuda a Adelay quien es otra de mis buenas amigas.

-Hanna Rose Fray, parece que la solicitan- la profesora se encuentra en la puerta sonrientemente, seguro es otra llamada de atención por mis bajas notas, pero cuando llego a la puerta veo a Evan parado sonriéndole a mi profesora, utiliza su “encanto natural” hasta con los profesores.

Debo recordar no caer en sus encantos, Ross no caerás en sus encantos, Ross no caerás en sus encantos, recuérdalo. Debería anotarlo en un post-it o algo así

-vamos- dice Evan

-¿A dónde?- pregunto tomándome despistada

-eh pedido tiempo de mi clase y de la tuya para hacer el trabajo de lengua extranjera- auch, golpe bajo si no quería verme después de clases habría sido suficiente

 -ah, está bien- respondo algo decepcionada, pero claro el no lo nota.