Capítulo 5

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2007

Hace tres días que Evan no ha venido a la escuela, el paso esas materias y yo no, pero hoy tiene que venir a cuidar al grupo de química, ósea a mí,  espero poder hablar con él después.

 -chicos, comenzare a repartir los exámenes- anuncia la profesora Lima

La verdad es que me siento preparada, eh estudiado todos los problemas muchas veces, yo se que puedo, la profesora Lima me entrega mi examen, los primeros dos problemas están muy fáciles, los siguientes dos no recuerdo como hacerlos así que mejor los dejo al final. Levanto la vista un poco encontrándome con la mirada de Evan, no lleva el uniforme del colegio y está sentado en la silla de la profesora, después que tenemos diferencias él y yo no sé cómo hablarle, siento que está molesto conmigo aunque yo debería ser la enojada ¿no?

-señorita Fray ¿ya terminó?- la voz de la profesora Lima me saca de mis vagos pensamientos y regreso la mirada a mi examen

-no, aun no- respondo y continuo con los problemas que me faltan

-Evan, gracias por apoyarme con el grupo- escucho a la profesora hablando

-no hay de que- casi puedo sentir que Evan le ha sonreído

-bueno, que no se distraiga nadie- lo dice como en susurro solo para Evan aunque yo si la escuche -¿entendido señorita Fray?- levanto la mirada y asiento mirando a la profesora

-rayos- susurro para mis adentros

Continúo con mi examen, quedan solo treinta minutos y me faltan dos problemas que no recuerdo como resolver, piensa Ross, piensa. Anat me explicó este problema pero ¿cómo era? Mi voluntad por continuar el examen desaparece así que como siempre empiezo a dibujar caritas y corazoncitos en la hoja para borrarlos. ¿qué le puedo decir a Evan? No sé ni cómo puedo acercarme, es increíble como un par de acciones pueden cambiar el curso de una relación. ¿y si llego como siempre? No, porque creerá que ya lo eh perdonado y aunque ya lo perdone no se lo puedo decir, debe de pedirme disculpas o al menos mostrar un sincero arrepentimiento, ¡Ash! ¿por qué es tan difícil? Me resulta casi imposible enojarme con él, por eso dicen que me paso de tonta, quizá si tengan razón, pero ¿cómo tendrán razón, si yo conozco bien a Evan?

-si ya acabaste entrégalo o me regañaran- susurra Evan pasando a mi lado, tremendo susto que me ha dado, sigue caminando entre las filas

Creo que debería entregarlo no es como que una luz aparecerá sobre mí y me dará la respuesta, solo me faltan esos dos problemas, si tengo todo o la mayoría bien me parece que podre alcanzar un ocho y ya no me preocupare más por esta materia en un rato. Me levanto de mi lugar hasta el escritorio donde esta Evan, ni siquiera lo miro, me da pena aunque no sé por qué es mi amigo se supone no me debería de dar pena, dejo mi exámen y me regreso a mi lugar tratando de no voltear y mirarlo; quedan quince minutos y ya estoy sumamente aburrida, espero Anat acabe pronto su examen

-los que ya hayan finalizado su examen pueden retirarse a su siguiente actividad- anuncia la profesora Lima entrando nuevamente en el salón

Varios de nosotros nos levantamos al mismo tiempo, ninguna de mis amigas ha terminado, me tendré que ir a la biblioteca y continuar con Shakespeare; en el camino a la biblioteca no me cruzo con nadie conocido, cuando entro está llena de estudiantes frenéticos supongo repasando para algún examen, me siento en uno de los pasillos del área de política donde nadie pasa.

Lady Macbeth me parece realmente fascinante, anotare una de sus líneas en mi libreta de citas, espero pronto entrar a la carrera de literatura, sueño con ser una escritora reconocida.

-Macbeth, muy bueno- el chico que mantuvo la puerta abierta para Denisse en el café está parado frente a mí y no usa el uniforme  del colegio

-sí, ¿te gusta Shakespeare?- pregunto, mirándolo ¿Qué hace aquí?

-sí, me gusta; pero prefiero algo más como Edgar Allan Poe- el chico me sonríe

-eh escuchado que es bueno pero no eh leído ninguna de sus obras- nota mental, leer a Allan Poe

-te gustara, ¿cuál es tu nombre?- me tienda la mano para ayudarme a ponerme de pie

-Ross, ¿el tuyo?- siento que me sonrojo

-Alonso- sonríe de lado, parece un  chico agradable, eso me hace recordar que debo ir con Evan, debo de saber que le ocurre

-bueno, te veo después, necesito encontrar a…- me interrumpe

-tu novio- dice sonriendo

-no, no es mi novio, es un amigo- me encojo de hombros

-bueno, Ross, hasta pronto-

-adiós- me despido y salgo del pasillo a toda prisa para poder alcanzar a Evan

Cuando doblo la esquina para subir al segundo piso, miro a Evan “platicando” con Denisse, pero la está tomando por la cintura  y ella tiene una mano en su hombro, un nudo aparece en mi garganta, ¿Qué demonios ocurre?, me quedo un segundo más mirando la escena hasta que…

-Ross ¿cómo te fue en el examen?- Denisse pregunta alegremente mirándome, mientras que Evan se sorprende al verme ahí parada presenciando semejante escena, baja su mano de la cintura de Denisse pero ella no le quita la mano de enciima

-bien, creo, emmm me tengo que ir, ammm…- no sé qué más decir, me doy media vuelta y salgo lo más rápido que puedo, no llores, no llores, me repito una y otra vez, entro a él único salón vacío, saco mi libreta de frases y en una hoja nueva escribo

“segunda de decepción de Evan, en menos de una semana. Sigue creyendo firmemente, tu no romperás tu promesa Ross, siempre estarás para él”

Respiro profundamente antes de salir nuevamente, arranco la hoja que acabo de escribir y me encamino a la puerta mientras la voy doblando para no mirar a nadie por el pasillo, mala idea porque choco con el torso de alguien

-Ross- la voz de preocupación de Evan me llama, ¡rayos! Justo con el torso que no quería chocar

-No- respondo, camino rápido saliendo de su paso pero ahora mis manos están vacías, lo que me faltaba, mi nota se cayó.

Trece Cartas (completa)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora