Trece Cartas (completa)

Capítulo 3

Año 2007

Suerte que la primera clase de hoy es con mis amigas, no quiero ver a Evan estoy decepcionada, tengo tantas cosas que decirle pero debo encontrar el momento adecuado quizá entre algunas clases o le puedo pedir que se salte una clase, puede que lo haga…

-tierra llamando a Rose- Krystal mueve su mano frente a mi repetidas veces

-perdón, ¿Qué decían?- les sonrió

-decíamos que vamos a dejar la escuela y ponernos a trabajar ¿te nos unes?- dice Adelay

-sí, está bien- consigo decir sin asimilar lo que me han dicho

-¿Qué te ocurre?- pregunta Anat

-nada- respondo, necesito hablar con Evan

-¿tiene que ver con Evan?- pregunta Anat

-seguramente- dicen al unisonó Adelay y Krystal

-el profesor no ah venido, clase libre- dice alguno de mis compañeros no estoy segura quien, parece que es ahora o nunca, tengo que buscar a Evan

-¿les parece si repasamos Algebra?- pregunta Adelay

-lo siento, repasen ustedes tengo que ir a arreglar un asunto- sin decir más para que no me pregunten salgo del salón de clases, camino hasta la clase que se supone tendrá Evan, por fortuna es con la única profesora que me llevo bien, respiro tres veces para relajarme antes de tocar a la puerta del salón

-¡Hola Ross!- me saluda la profesora Lima -¿Qué pasa?- me pregunta de seguro traigo una cara de nervios que no puedo con ella

-hola miss, me preguntaba si puedo hablar con Evan unos minutos- sonrió como puedo

-lo siento Ross, pero Evan no viene hoy a mi clase- sonríe como si me compadeciera

-ohh, ok, lamento haberla interrumpido- agacho la cabeza y me voy caminando por el pasillo

-¡ROSS!- alguien grita mi nombre, cuando me giro veo a Denisse la típica chica por la que todo el colegio se muere, pero ella está interesada en Evan, aunque nos hicimos amigas hace unos cinco años por compartir la mayoría de las clases, no es de mi agrado pero tampoco me desagrada del todo

-hola, ¿Qué pasa?- espero no note mi sonrisa fingida

-Ross, te quiero pedir opinión de algo- me sonríe

-claro, dime- seguramente quiere que la acompañe de nuevo de compras o la ayude a escoger un vestido para alguna cita

-vamos, te invito un café- ambas salimos de la escuela, hasta el estacionamiento platicando como si fuéramos las mejores amigas,  al parecer no nota que le respondo con monosílabos.

Denisse se estaciona en el Starbucks y ambas salimos de su auto, un chico que estaba entrando mantiene la puerta abierta para nosotras, para no variar Denisse le sonríe coquetamente y yo paso de largo, ¡puaj! Odio sentirme el mal tercio

-¿viste ese chico?- nos sentamos en la barra

-¿Cuál?- ¿te refieres al chico con el que acabas de coquetear? ¡Claro que vi eso! Gracias por la desagradable vista -el que me abrió la puerta, hay Ross siempre tan despistada- hay más le vale que vaya al grano antes de que me desespere

-hola chicas, ¿qué les sirvo?-

-un té verde, sin azúcar, por favor- dice Denisse sonriéndole de más al mesero

-yo quiero un frappe de cajeta, por favor- el mesero se va -¿qué me querías decir?- preguntó

-bueno, ya que tu y Evan son muy amigos quiero saber tu opinión de esto- Denisse alarga una cajita casi embutiéndolo en mi rostro, la miro no comprendiendo lo que me quiere decir

-revisa mis recaditos con Evan- me sonríe, abro su caja encontrándome con múltiples notas dobladas en varios pedazos, tomo una y leo

“Hola  guapa, ¿Cómo estás?   Atte: Evan”

¿Qué?  Tomo otra

“me fascina haber conocido una chica tan hermosa como tú.  Atte: Evan”

No lo puedo creer, pero tomo otra

“espero que tengas un hermoso día, una chica tan guapa como tú se lo merece. Atte: Evan”

Y yo que le ponía notas de buen día diariamente en sus libros de su primera clase, me siento tan estúpida y enojada, aun así tomo otra.

“guapa ¿Cuándo salimos? Atte: Evan”

No puedo más, me siento engañada

-Ross ¿qué piensas?- Denisse toma un sorbo de su taza de té, ni siquiera me di cuenta en qué momento trajeron la orden, reprimo el nudo que tengo en mi garganta y lucho por no llorar

-Denisse, no me lo tomes a mal, pero Evan es así con muchas chicas- es la verdad, pero aun así siento un hueco

-oh, ya veo- sonríe, ambas terminamos nuestra bebida y platicamos de tonterías pero mi mente no puede dejar de pensar en Evan y en estas estúpidas notas, tengo que hablar con él. Denisse paga la cuenta argumentando que me hizo perder clases y maneja de regreso a la escuela, cuando nos bajamos me abraza dándome las gracias, aunque no sé si yo debo dárselas no solo por pagar mi café si no por enseñarme esas notas que cortaron gravemente en mi. Denisse se adelanta a entrar al colegio y yo camino lentamente mirando al suelo, pensando cada vez más en Evan.

Tengo que decirle, debo de decirle todo lo que está pasando por mi mente, Evan no es así, no puede ser así ¿Acaso me ah estado engañando? Y yo que me consideraba su amiga y que consideraba saber todo de él ¿Quién es realmente Evan?

-Ross- me toma por el hombro y me gira, inmediatamente se quién es

-hola- digo aun mirando al piso –Evan, quiero hablar contigo- digo luchando contra el nudo en mi garganta

-ok- dice con su tono de que no era la respuesta que esperaba de mí, caminamos hasta un lugar vacio cerca del único salón que da al jardín

-Evan… ¿Qué te ocurre?- me mira y no responde –estoy decepcionada de ti, me has estado mintiendo, me dijiste que Denisse no te importaba para nada que la tomabas como una chica fácil y me entero que le mandas notitas bonitas, dices que soy una de tus mejores amigas y no me quieres contar que pasa, no me quisiste ayudar a estudiar para mis exámenes desde el semestre pasado por eso no te lo eh vuelto a pedir… Evan me estás diciendo una cosa y estás haciendo otra, no sé qué te ocurre- relájate o acabaras llorando –sabes me dijeron que te defendía mucho y que no lo mereces por cómo me tratas, claro está que te defendí, no permito que se metan con las personas que quiero- Evan seguía callado –¡di algo, defiéndete!, dime que no es cierto- Evan no dice nada, todo esto es verdad  – ¿recuerdas a mi ex novio? Bueno troné con él porque me dijo que escogiera entre él o tú, no es que te lo esté diciendo porque me arrepienta, pero le dije que te escogía a ti porque sabía que tú si estarías conmigo siempre que te necesitara. ¿Me equivoque?- Evan se pone frente a mí y me mira, pero yo agacho la mirada, probablemente esté a punto de llorar y no quiero que me vea, alzo la mirada para ver su expresión pero no la puedo entender –no me mires, eres un estúpido- digo

-lo sé- me responde, vaya hasta que dice algo

-pero soy más estúpida yo, por creer en ti, dime ¿debo seguir creyendo en ti?- nuevamente silencio por parte de Evan, comienza a caminar a la salida del colegio y yo como toda una estúpida que no aprende la lección lo sigue

-nos vemos,  luego- Evan se va dándome la espalda y es cuando no puedo más, las lagrimas ya no se contienen mas y comienzo a llorar desconsoladamente, camino a prisa hasta el baño para tomar un poco de papel, afortunadamente no hay nadie, me estoy secando las lagrimas cuando escucho que alguien entra, alzo la mirada son Anat, Adelay y Krystal

-¿Qué pasó?- me pregunta Anat, mirándome atentamente

-le dije todo a Evan- dije mientras más lágrimas brotaban de mis ojos

-¿todo?- pregunto Adelay sorprendida

-sí, ya no podía más, le dije todo lo que pasaba por mi mente, de cómo me ah decepcionado y…- no puedo terminar cuando lloro nuevamente

Entre mis tres amigas me abrazan, me siento tan triste que las abrazo fuertemente como si así pudiera llenar ese hueco que siento.