Antes de Morir

Capitulo 4

Capitulo 4

Sam se tumba en el asiento trasero y mira el techo sacudiendo la cabeza con incredulidad.

-¡Cuidado con los zapatos!-dice Hyun.

Ella vuelve a sentarse rapidamente y lo apunta con el dedo.

-¡Mirate pareces un perro a punto de cagar donde no debe!

-Callate-le dice, y es una sorpresa para mi, porque no sabia que fuera capaz de hablar asi. Sam se recuesta en el asiento.

-Tu conduce-masculla.

Ni siquiera me doy cuenta que ha puesto el motor en marcha. Es tan silencioso que no se oye. Cuando salimos a la carretera y las casas y los jardines de nuestra calle quedan atras, estoy contenta. Este viaje me abrira nuevas puertas.

Mi padre dice que los musicos escriben sus mejores canciones cuando estan colocados. Voy a descubrir algo asombroso. Lo se. Y lo traere de vuelta conmigo. Como el santo Grial.

Abro la ventanilla y saco la cabeza, los brazos y la mitad superior del cuerpo. Sam hace lo mismo en la parte de atras. Noto el aire con fuerza. Me siento muy despierta. Veo cosas que nunca eh visto, mis dedos alcanzan otras vidas, la chica guapa mira a su novio y espera muchas cosas de el, el hombre de la parada del autobus que se mesa el cabello, diseminando escamas de piel relucientes, dejando trozos de si mismo esparcidos por la tierra y el niño que llora a su lado, comprendiendo la desesperanza que hay en todo eso.

-Mira, Sam.

Señalo una casa con la puerta abierta, un vestibulo que se vislumbra, una mama que besa a su hija. La chica vacila en el umbral. "Te conozco-pienso-. No tengas miedo."

Sam ha sacado casi todo el cuerpo por la ventanilla, agarrandose al techo. Su rostro aparece junto a mi ventanilla, agarrandose del techo. Parece una sirena en la proa de un barco.

-¡Vuelve a meterte al maldito auto¡-le grita Hyun-. ¡Y quita los pies del maldito asiento!

Ella vuelve a sentarse, desternillandose de risa.

A esta parte de la calle la llaman la Milla del Atracador.

Mi padre siempre lee noticias en el periodico que hablan de este sitio, donde se cometen acctos de violencia motivados por la pobreza y la desesperacion. Pero cuando aceleramos y las vidas de los demas pasan volando por nuestro lado, veo lo hermosa que es la gente. Yo morire primero, lo se, pero todos ellos se reuniran conmigo, uno por uno.

Cortamos por calles lateral. El plan, segun Hyun, es ir al bosque. Hay un parque y una cafeteria donde no nos conocen.

-Allo podran hacer el loco sin que las reconozca nadie. Ademas no esta lejos, asi que regresaremos a tiempo para el te.

-¿Estas loco?-grita Sam-. ¡Parece Enid Blyton! ¡Quiero que todo el mundo sepa que estoy colocada y no quiero ningun puto te!

Vuelve a sacar el cuerpo por la ventanilla y lanza besos a los desconocidos. Me recuerda a rapunzel escapando con el cabello agitado por el viento. Pero entonces Hyun frena de golpe y Sam se da un fuerte golpe en la cabeza contra el techo.

-¡Por la mierda! ¡Lo has echo a preposito!- se deja caer de nuevo en el asiento de tras, frotandose la cabeza y gimiendo.

-Perdona-dice Hyun-. Tengo que poner gasolina.

-Imbecil.

El se apea y rodea el coche por detras para tomar la manguera del surtidor. De repente Sam parece dormida, tirada en el asiento trasero, chupandose el pulgar. Talvez tenga una conmocion.