Cap 3

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Sangraba demasiado así que comenzé a lavarla para ver si paraba un poco, pero no funcionó. Empezaba a entrar en pánico pero no podía llamar a mis padres, no, eso no. Y mucho menos a mi hermana...

Pasó menos de un minuto cuando comenzé a marearme y luego todo se tornó negro. Sentí un gran golpe en la cabeza.

~•~

Deperté y vi un techo completamente blanco. Supe que estaba en el hospital.

—Al fin despertaste.— oí la voz de mi madre.

La verdad no tenía ganas de hablarle ni de verla, pero al menos le sonreí.

—________(Tn), ¿por que lo hiciste?

No le respondí.

—¿Por que lo hicite?— repitió.

Apreté los labios. No iba a responderle. No tenia por qué hacerlo.

Mi madre me miró decepcionada.

Luego entró mi padre a la habitación con mí pequeña hermana.

—Hola _______(tn), ¿estas bien?— preguntó mi pequeña hermanita, apenas tenía 5 años. Recordé mi brazo y lo miré rápidamente pero estaba vendado. UF, qué suerte. Ella era la única que no sabía de esto y tampoco quería que lo sepa.

—Claro que si.— sonreí.— Creo que hoy volveré a casa.

—¿Y compraremos helado?—reí por su pregunta.

—Supongo que si. A ver, preguntale a mami y hazle esa carita que solo tú sabes hacer— dije guiñándole el ojo con una sonrisa traviesa.

—Mamiiiiii — dijo saltando a sus brazos— ¿Podemos comprar helado cuando regrese _________(tn) a casa? — dijo haciendo pucheros.

—Claro que si cariño.

—¡¡¡Siiiiii!!!— gritó emocionada y luego saltó a la camilla donde me encontraba.

—¡Cuidado! — le gritó mi madre a Lili cuando saltó.

—No me molesta.— dije para que Lili no empezara a llorar. A ella no le gustan los gritos...

Luego de que el doctor les dijera a mis padres que me había tocado una vena, que deberían darme antidepresivos y que debían llevarme a un psicólogo, me dieron el alta. Compramos el helado y volvimos a casa, donde pude darme al fin ese deseado baño.

Subí a mi habitación no sin antes obtener un discurso de parte de mis padres. No me importó.

Al otro día no fui al colegio. Ni al siguiente. Ni el siguiente...ya sabia lo que todos deberían estar pensando: "por fin se suicidó esa estúpida gorda". Pero ¿qué creen odiados compañeros? No lo hice. Aún..

Falté 2 semanas al colegio. No pedí las tareas.

Cuando volví todos se burlaban y esas cosas pero no me importó, ya nada me importaba.

Algunos también hicieron comentarios acerca de mi ropa interior. Sí, habían subido a internet ese maldito vídeo. Pero una vez más, no me importó.

Hice lo de siempre y ellos igual.

Volví a mi casa...pero ahí no pude hacer lo de siempre.

—Esta tarde irás con un psicólogo— dijo mi madre al verme entrar.

—No quiero ir.

—Irás. Y no voy a aceptar un maldito "no" por respuesta.

—Pe...

—Irás y eso es todo. Ahora sientate en la mesa que es la hora de almorzar.— interrumpió.

—Bien.— fue lo único que pude decir.

Me senté. Comí menos de la mitad y me fui a mi cuarto.

Mi madre me informó que a las 4 p.m seria mi turno con el psicólogo.

A las 16 hs estuve lista. Ella me llevo al psicólogo, me dejó allí y se fue.

Para mi sorpresa era una mujer, pero de todas formas no iba a sacarme nada. No me abriría con una persona que no conozco.

—Puedes sentarte— dijo amablemente.

—Nunca dije que quería sentarme.— respondí.

—Yo tampoco dije que lo dijiste, solo te lo ofrecí.

Psicóloga 1- ________ 0.

—Bien.

Al final me senté.

—Y bien, _______(tn) ¿por qué no me cuentas algo de ti?

—¿Para qué?

—¿Para qué crees?

—¿Para darme consejos estúpidos que seguramente no cumpliré?

Psicóloga 1- _______ 1.

—Bien... ¿Por qué no los cumplirías?

—Porque me los diste tú — dije sonriente.

—Interesante.

—Ajá.

—Entonces, ¿no vas a decirme por qué lo hiciste?

—¿Le importa?

—Oye, yo solo intento ayudar.

—Bien, si intenta ayudar, no le diga a mi madre que me fui.

—¿Que te....?

Psicóloga 1- ________ 2.

Me levanté y salí de ahí. No creo que vaya a contárselo a mi madre, y si lo hace, pues...ya veremos.

Fui de nuevo a ese parque donde me había quedado a leer "Bajo la Misma Estrella". Aunque esta vez ya no tenia mi libro, pero si mi música.

Luego de unas horas volví a mi casa caminando. Mi madre no estaba así que estuve tranquila. Subí a mi cuarto y me recosté a mirar la tele.

Al rato llaman a mi puerta. Era mi madre. Me dijo que había pasado por mí pero no estaba, así que le dije que luego de la sesión había decidido caminar un poco para pensar lo que me dijo la psicóloga, y se quedó mas tranquila.

Bajé a cenar. Sentí que debía hacerlo luego de haberle mentido a mi madre, así que comí todo lo que me sirvió. Aunque luego tuve ganas de vomitar.

Me dormí unas horas después de haber cenado.

    ~~~~~~ 3 años después~~~~~~

Logré librarme de la psicóloga...

Ultimas esperanzas (screamau y tu)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora