Ultimas esperanzas (screamau y tu)

Cap 30

Estaba perdida en mis pensamientos y, obviamente, me valía verga lo que estaba diciendo el profesor, pero creí haber escuchado la voz de Mau así que me giré y me sorprendí por lo que estaba viendo...

No era Mau, como tanto había querido, pero si un chico nuevo.

Me desinteresó al ver que no era quien yo esperaba, así que volví a mis pensamientos, mirando por la ventana, hasta que sentí la presencia de alguien a mi lado . Me giré y era el novato, que se había sentado al lado mio. Mala elección chico.

Lo observé unos segundos: él era todo lo contrario a Mau. Vestía jeans y borsegos (o como se escriba) negros, una remera de "AC/DC" y una campera de cuero negro. Su cabello, también negro, estaba arreglado hacia arriba en un jopo; y sus ojos eran raros: como una mezcla de gris y turquesa; Y su piel era muy pálida...Al parecer se ejercitaba muy bien, puesto que su contextura física era espectacular.

Sin duda atractivo, pero no tenía tiempo, ganas ni espacio para pensar en otro chico que no fuese Mau.

Me puse la capucha de mi campera sobre la cabeza, para ocultar los auricales. No pensaba escuchar las estúpidas palabras del profesor y la verdad no tenía ganas de hablar con el nuevo. Estaba de mal humor, de muy mal humor, quería decirle al profesor que a nadie le importaba su estúpida clase, quería decirle a todos mis compañeros cuánto los odiaba, quería tener a Mau conmigo, quería que mi madre no hubiera muerto, quería que mi padre no tuviese que esconderse, quería tantas cosas que no podía tener...

Sentí como golpeaban levemente mi rodilla y miré al nuevo. Me señaló al profesor con la cabeza. Estaba parado, con las manos apoyadas en mi mesa, espectante, esperando una respuesta supongo. Con un disimulado movimiento de cabeza, dejé caer el auricular.

—¿Puede repetir la pregunta?– le dije y me miró con rabia.

—No he hecho ninguna pregunta.– dijo y el salón estalló en risas.

—Entonces, ¿puede repetir lo que sea que haya dicho?– dijo algo irónica. El profesor dio un golpe a mi pupitre, pero no hizo que se me mueva ni un pelo. Estaba demasiado ocupada pensando en lo idiota que era como para poder asustarme.

—Mejor le diré que...Está castigada.–sonrió– Que disfrute sus horas extra, señorita Fernandez.– se sacudió las manos en señal "mi trabajo está hecho" y volvió al frente a seguir con la clase. Me coloqué de nuevo los auriculares ignorando la mirada del profesor y seguí con lo mio.

Sentí la mirada del chico nuevo, pero no le di importancia. Supongo que estaba esperando una...bienvenida, pero yo no soy de las personas que te reciben con los brazos abiertos...o que te reciben.

Supe que terminó la hora cuando todos empezaron a levantarse luego de juntar rápidamente sus cosas. Me quité los auriculares y me preparé para lo que fuera a decirme el profesor.

Estaba lista para salir de mi lugar pero el chico nuevo no se había movido del suyo, cosa que impedía que yo saliera.

—Eh, Novato, ¿me harías el favor de moverte? Necesito salir.– dije haciendo señas con mis manos como si espantara algo.

—¿Novato?– dijo irónico alzando una ceja.

—Pues eres el nuevo, ¿no?– dije de mala gana.

—Pues si, pero tengo un nombre...

—Perfecto, te felicito, pero no me interesa. Ahora, por favor saca tu culo de mi camino.– dije algo molesta. No tenía tiempo para sus estupideces.

—¿Por qué coño me tratas así?– dijo frunciendo el ceño enojado.– Que yo sepa, no te hecho nada.

—Ay vamos, solo te estoy pidiendo que te muevas. Quiero salir para ir a recoger el papel de castigo e ir a mi siguiente clase.