¿Secuestrado?

¿Quien entró a mi cuarto?

Buscaba los ingredientes de una receta en internet cuando recibí una llamada; era Kang Lee Seok. Mi pálido amigo rubio de ojos miel que no me ha llamado ni una vez desde que llegué a Seúl.

Conteste la llamada.

– ¿Yang? –respondió al otro lado de la línea la voz varonil y tierna de Kang.

– ¿Si? –dije un poco cortante, ya que no había recibido ni una sola llamada de su parte desde que llegué a Seúl.

–Que bien que me contestas, ¿Cómo va todo haya? ¿Tu salud está mejor? –quiso saber él.

–Sí, todo bien. –mi tono era el mismo mientras el de él seguía siendo tierno y preocupado.

– ¿Segura? –hizo una pausa. – ¿Estas molesta? –pregunto confundido.

–Claro que no, como crees que estaría molesta porque no he recibido ni una sola llamada tuya desde que llegue. Para nada. –dije ofendida.

–Claro que te llame. –respondió con una pequeña risa. No lo puedo ver pero estoy segura que sonríe de lado. – ¿No recuerdas? Lo hice la noche en que Sun Hee llegó del concierto, llame tarde por la cirugía de último minuto que no tenía contemplada, te lo explique.

Las palabras de Kang me deja desconcertada, me dice que llamó la noche en que Min Yoon Gi llego a mi casa.

Comencé a preocuparme un poco.

– ¿Dices que fue por la noche? –pregunte para confirmar.

–Si. –afirmó. – ¿Todo bien? Pareces distraída. –dijo preocupado.

No quiero que se preocupe, así que actuare siguiéndole la corriente para preguntarle qué le dije sin que se dé cuenta.

–Ah, claro, que tonta, ya lo recordé. Es solo que como era tarde lo olvide por el sueño, ya sabes, cambio de horario. –me excuse mintiendo.

–Me habías preocupado, pensé que algo estaba mal. –expreso.

–No, para nada, pero ¿de qué hablamos? Recuérdame un poco. –le pedí.

–Pues me preocupaste demasiado parecía que discutías con Sun Hee y se escuchaban voces varoniles, pero dijiste que era la televisión. –informó.

Por favor dime que no es cierto. –pensé exaltada por la información.

¿Discutir con Sun Hee? Nunca nos peleamos o algo parecido, pero ¿Porque? ¿Será por Min Yoon Gi?

– ¿Discutir? –pregunte. – ¿De qué? –pedí saber.

–Algo sobre un chico, pero después explicaste que era de la película. –dijo riendo de su preocupación en vano.

¡Por dios Kang! , soy una actriz, no me digas que lo creíste.

–Claro, solo quería asegurar que me hubieses puesto atención. –me excuse mintiendo muy realistamente.

–Como no ponerte atención Yang. –dijo riendo un poco. –si eres muy importante pequeña. –me alago. 

–Eso mismo pensé. –sonreí.

– Y ¿Cuándo vuelves? –indago.

­– ¿Por qué? Ya me extrañas. –reí.

–Por supuesto. –también reía.

–Doctor. –escuche que lo llamaban.

–Permíteme un minuto. –me pidió.

–Sí, está bien. –espere.

–Tiene una llamada de su hermano en espera, dice que es importante. –respondió la voz de su secretaria.

–En un momento voy. –respondió y luego volvió a mí. –Yang. –comenzó, pero lo interrumpí.

–Lo sé, está bien, ve, luego hablamos. –dije sonriendo.

–Gracias, yo te marco. –respondió gentilmente e imagine una de sus amables sonrisas.

–Adiós. –me despedí y colgué.

Maldición, porque demonios Sun perdido su teléfono, tengo que saber qué es lo que pasó esa noche, pero no quiero hacerme a la idea de que fue un secuestro. –pensé triste mientras caminaba a la cocina.

Comencé a preparar la cena y cuando estaba partiendo los vegetales debatía en mi mente.

Si dice que estábamos discutiendo debió ser por algo grave, ya que no es común en nosotras. Tengo que recordar que pasó esa noche, pero no puedo, siento un vacío enorme en donde deberían ir esos recuerdos.

A ver, era de noche y Sun Hee no estaba, después de bañarme escuche un ruido en la estancia y las luces se apagaron, yo camine a mi habitación, pero esta se cerró detrás de mí.

¡Entonces alguien entró a mi habitación! –pensé exaltada.

¿Quién? Intente recordar más, pero no podía, todo estaba en negro.

–Kim Yang Mi, tenemos que hablar. –la voz de Min Yoon Gi habló a mis espaldas lo que hizo que me asustara y me cortara en el dedo índice.

Kim Yang Mi. –mi nombre se repetía en mi cabeza una y otra vez, comencé a marearme un poco y luego el rostro de mi mejor amiga llamándome en mi habitación después de que la puerta se cerrara vinó a mi mente. 

Dime que no es verdad.

Mi tiempo se detuvo con Min Yoon Gi a mi lado hablando algo que no le escuchaba. Comencé a recordar:

–Sun, ¿Qué haces? Me diste el susto de mi vida. –exprese intentando calmarme.

–Necesito tu ayuda, es algo muy importante. –se acercó a mi seria.

– ¿Qué pasó? ¿Estás bien? –comencé a preocuparme.

–Hice algo muy malo y necesito tu ayuda. –mi amiga parecía muy seria y estaba pálida.

Se terminó el recuerdo porque un dolor de cabeza insoportable me invadió por completo.

Miedo, preocupación, nervios, dolor, eso es lo que siento al recordar aquello.

– ¿Estas bien? –preguntaba Min Yoon Gi a mi lado.

Me di cuenta de que mi dedo sangraba, pero no me dolía, con el dolor de cabeza no podía pensar con claridad. Ahora tenia demasiada ansiedad acomulada en mi pecho.

Con la otra mano apreté mi sien para frenar el dolor de cabeza, pero después vinieron los mareos.

¡Basta! –imploraba.

Min Yoon Gi me sostuvo antes de perder la fuerza en las piernas. Supuso que no me sentía bien así que me cargó hasta el sillón y me recostó.

Yo cerré los ojos un momento y después perdí el conocimiento.

Que mala actriz. –me reprendí.

Puede haber actuado sentirme bien, pero no lo hice, ese fue un sentimiento que quiero olvidar.

"Sun Hee. Dime que no es cierto".