Dulce tentación (Myungjong)

10.-La verdad siempre sale a la luz.

Myungsoo me miraba fijamente, haciéndome sentir totalmente incómodo por ello pues era consiente de los mocos y los hinchados ojos que ahora adornaban asquerosamente mi horrible cara. Me callé un momento, girando lentamente hasta mirar a un muy entristecido Myungsoo.

-¿Podrías... dejar de mirarme?, es incómodo.

Murmuré mientras sorbía mi nariz, me encontraba sentado en la cama del ajeno, en la misma habitación a la que varias veces había acudido a cuidarle cuando estaba enfermo.

-Ohh perdona.

Desvió su mirada rápidamente hacia el suelo.
Negué repetidas veces mientras sostenía aquella taza de té entre mis manos, sentía mi cuero cabelludo doler y ciertamente, me costaba trabajo caminar pues Sungyeol no había sido para nada cuidadoso conmigo hacía un par de horas, maldito imbecil. Suspiré una vez más, negando conforme bajaba la mirada para finalmente terminar llorando nuevamente, ¿en que momento había caído tan bajo?, dejar que mi empleado, Kim Myungsoo me viese así, derrotado y débil.

-Iré a preparar la ducha ¿si?, quédate aquí, no te vayas.

Myungsoo palpó con levedad mi espalda, levantándose enseguida hacia el baño mientras yo le seguía con la mirada. Este había insistido en traerme a su casa a pasar la noche pues realmente no quería que estuviese solo y aunque me negué las primeras quince veces, con este muchacho no había forma de llegar a un acuerdo, terminé aceptando aún cuando no me sentía del todo conforme con ello.
Me levanté con la taza en las manos, echando un vistazo al cuarto mientras iba a parar a un extremo de esta en la que yacía un pequeño estero, tomé un CD de los que había en el lugar.

-Down the way, Angus & Julia Stone.... Interesante.

Lo coloqué, dejándome llevar por aquellas voces y el sonido de los instrumentos de cuerdas, paseé mis dedos por la repisa de madera polvorienta, observando que en el sitio había fotografías de Myungsoo con su amigo Woohyun, sonriendo enormemente por eso. ¿Sería Woohyun para Myungsoo lo que Jiae para mí?, bueno, ambos eran idiotas.

-¿Debería confiarle mi secreto?

-Amm... el agua, está caliente Sungjong, Amm.. deje ropa limpia en el baño para ti, quizá te quede un poco grande.

Habló nerviosamente mientras restregaba sus manos contra su camiseta, haciéndome sonreír por ello mientras asentía.

-Muchas gracias, volveré en un rato.

-Ohh no, tomate tu tiempo.

La amabilidad de Myungsoo iba a volverme loco.
Dejé la taza en la mesa del pequeño comedor, yendo directo al baño mientras cerraba tras de mí aquella puerta, suspiré pesadamente mientras poco a poco iba sacándome las ropas, observando uno que otro moretón en mis brazos mientras caminaba descalzo por las frías baldosas hasta llegar a la ducha, la cual me recibió con agua caliente y un muy relajante sonido, la calidez me envolvió rápidamente, cerré los ojos tratando de liberar la tensión, dejando que mi cuero cabelludo se relajara, pero bastaron un par de segundos para recordar en fugaces imágenes que me bombardearon sin piedad alguna, lo que había sucedido en la oficina antes.

-¡Por favor!, ¡por favor!... debe haber otra forma.

-¿Tienes idea de lo mucho que te extraña mi cuerpo Jong?, ¿la tienes?

Sungyeol recargaba su peso contra mi delgado y débil cuerpo, haciéndome fruncir el ceño aún entre lágrimas por ello mientras sentía mi carne de los muslos molerse contra la madera del escritorio, Sungyeol empujándome hasta quedar casi recostado en este mientras tiraba de mis cabellos, no pude hacer más que morder mi labio inferior con fuerza para evitar llamar la atención.