Jon Hye había liberado a Jimin, pero en cambio había atado las muñecas de Yoongi a una silla, y también a el en caso de que intentase escapar, como lo había hecho con Jimin.
–¡YOONGI! -Corrió desesperado Jimin hacia el, quería abrazarlo pero se detuvo al ver como este se quejaba de dolor y tosía sangre fuertemente–Lo siento yo... –Quito la camisa que llevaba dejando ver la herida que había hecho la anciana, más quitó sus manos al percatarse de que la herida era más profunda de lo que pensaba– Respira, todo estará bien... yo te sanaré y–
–No... no dejare que lo hagas.
–Y yo... no te dejaré morir.
–Pero si lo haces tú... morirás –Yoongi luchaba por hablar.
–Estaré bien... tranquilo...
Estaba por empezar a cantar la conocida canción cuando...
–Jimin... espera... –Tomó su hermoso cabello rubio con sus manos, e hizo algo que ni Jimin ni Jon Hye esperaban.
Tomó un pedazo de vidrio del espejo que había sido roto anteriormente, y cortó poca cantidad del cabello de Jimin, pero que sirvió para que el cabello se volviese completamente castaño, perdiendo automáticamente todo su poder.
–¡NO! ¡¿PERO QUE CARAJO HAS HECHO?! –Gritaba la desesperada anciana al ver su piel arrugarse y lucir completamente desgastada, tal como la tendría una anciana de 90 años, y al ver su pelo teñirse de un color grisáceo –¡NO!
Quiso verse en el roto espejo, pero no soportaba eso. No soportaba verse, ya simplemente le daba asco. Se puso su capucha cubriendo sus ojos y su cabello, y comenzó a dar vueltas con la intención de caer en el suelo desmayada y olvidar todo, pero tropezó con la cuerda que usaba para subir a la torre, así cayéndose desde lo alto de esta...
Litros de sangre comenzaban a acumularse en el anteriormente verde césped, sangre que debió ser derramada hace mucho tiempo.
Abajo de la oscura torre, ahora se encontraba la anciana completamente muerta en el rojo césped.
A Jimin poco le importó la muerte de su falsa madre, y mucho menos le importó el que ahora su cabello era castaño, más le importaba aquel pelinegro que se hallaba moribundo en el suelo, a punto de decir sus últimas palabras.
–¡No! Mírame, quédate conmigo Yoongi... quédate conmigo... –Yoongi trataba de hablar, pero evidentemente las palabras no le salían. Jimin puso la mano de Yoongi en su cabello, con la intención de que algo pasara...– Flor que da fulgor... con tu brillo fiel... mueve el tiempo atrás...–La quitó, ya con lágrimas en sus ojos al percatarse que, evidentemente, no ocurría nada. Quería llorar descontroladamente, pero no lo haría. No cedería.
–J-Jimin... –Logró hablar Yoongi.
–¿Si?
–Eras mi nuevo sueño...
–Y tu el mío...
Jimin presenció como lentamente Yoongi perdía la respiración. Presenció ese maldito momento en el que sus ojos se cerraban para no volver a abrirse más.
Se posicionó de manera que la cabeza de Yoongi quedase entre sus piernas, y comenzó a acercarse lentamente a sus labios...
–Quita enfermedad... y el destino cruel... trae lo que perdí... –Chocó su frente con la de Yoongi, quedando a pocos centímetros de su cara– Volviendo a lo que fue... a lo que fue.
Y ahí estaba, el maldito llanto que tanto había retenido. La primera lágrima había comenzado a caer encima de la mejilla de Yoongi.
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Tangled | Yoonmin
FanfictionAdaptación de la película original "Enredados" De Disney. • • • • • Tras haber enfermado, la reina de Corea Del Sur, Park Chaerin, manda a los esclavos del reino a buscar la única flor especial que estaba encantada, capaz de hacer milagros, como sa...