La fiesta del viernes [1]

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Sherlock se quedó sentado en una de las sillas del comedor, tenía las piernas sobre la mesa y veía fijamente la esquina más cercana de la mesa, estaba despostillada y se le veían pequeñas astillas saliendo

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Sherlock se quedó sentado en una de las sillas del comedor, tenía las piernas sobre la mesa y veía fijamente la esquina más cercana de la mesa, estaba despostillada y se le veían pequeñas astillas saliendo.

— Baja tus pies de ahí —le dijo su madre apenas llegó a la cocina mientras empujaba sus pies de la mesa.

Sherlock los bajó antes de que le dieran más regaños— estaba pensando. Quería saber si el viernes-

La señora Holmes interrumpió a su hijo antes de que pudiera decir otra palabra— lo siento, cariño. El viernes tu padre y yo iremos a visitar a tu tía.

"¿Cuál tía?" Se preguntó internamente Sherlock. Aunque no le molestaba que sus padres no fueran a estar el vienes, más bien le caía como una bendición.

— Ah, bueno —comenzó a hablar simulando falta de interés en la conversación—. De todas maneras no era algo importante —concluyó; sabiendo para sus adentros lo inconveniente que sería que sus padres estuvieran en casa para ese día.

Su madre le sonrió antes de salir de la cocina. Sherlock ni siquiera se movió. Su hermano no tardo mucho en entrar en la cocina y tomar asiento al lado del menor.

— Trata de que no haya mucho ruido —pidió Mycroft mientras tomaba una manzana del frutero y le daba una mordida. Sherlock alzó una ceja—. En la fiesta. No soy estúpido, Sherlock; sé perfectamente lo que tramas.

Las comisuras de los labios de Sherlock se alzaron (casi) imperceptiblemente— No te debería importar el ruido —le dijo a su hermano mayor—, tú también estás invitado.

Mycroft parecía ponerse rojo. Sus cejas se fruncieron y antes de contestarle a Sherlock, dio otra mordida a su manzana tratando de tranquilizarse— ¡tú no me puedes invitar a un fiesta en mi propia casa, más bien, yo tengo el poder para evitar esa fiesta!—gruñó— Como sea, Lestrade vendrá ese día a estudiar, estaremos en la biblioteca. Si escucho un ruido ahí dentro, saco a todos de aquí —dijo antes de levantarse de la silla.

— Ah, Gary también está invitado —dijo Sherlock haciendo caso omiso de lo que su hermano le acababa de decir.

— ¡Se llama Greg! —dijo enfadado Mycroft para después salir de la cocina y olvidarse de su hermano.

— ¿Desde cuándo se hace llamar Greg? —se preguntó a él mismo mientras tomaba su celular y se disponía a ver sus mensajes.

— ¿Desde cuándo se hace llamar Greg? —se preguntó a él mismo mientras tomaba su celular y se disponía a ver sus mensajes

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El timbre de la puerta de Sherlock sonó por primera vez a las 9 de la noche. El de cabello alborotado pensó en primera instancia que su mejor amiga era quien tocaba la puerta. Descartó esa idea cuando el timbre sonó de nuevo a los cinco segundos. Mary siempre tocaba tres veces el tiemble en un lapso de dos segundos.

Sherlock no tardo mucho en abrir la puerta. Se sorprendió cuando vio a John Watson parado frente a él con una sonrisa adornando su cara.

Sherlock salió de su trance rápidamente.— ¿Qué haces aquí? —le preguntó al rubio sin un ápice de delicadeza.

— Dijiste que la fiesta era a las 9 —contestó simplemente el de menor estatura mientras alzaba los hombros restando importancia a su respuesta.

Sherlock no pudo disimular su mueca de fastidio— exacto, lo que quiere decir que en realidad comienza a las 10, ¿nunca has ido a una fiesta?

Claro que sí. John siempre iba a las fiestas de todos, era un titular del equipo de americano y su apariencia no estaba para nada mal. Era bastante agraciado.

— No salgo mucho —contestó sin embargo. No quería que Sherlock tuviera una perspectiva de él que no quería. Lo que no sabía era que Sherlock ya tenía un estereotipo sobre todos los chicos que le gustaban a Mary.

— Pasa. Y trata de no sorprenderte mucho —dijo egocéntricamente Sherlock mientras él se hacía a un lado dejando entrar a John a su casa.

 Y trata de no sorprenderte mucho —dijo egocéntricamente Sherlock mientras él se hacía a un lado dejando entrar a John a su casa

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Shame / johnlockDonde viven las historias. Descúbrelo ahora