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CAPÍTULO 2

Fue lo peor.

— Espera que tengo una duda... —soltó YoonGi antes de entrar a la mansión, dirigió su mirada hacia HoSeok, bajó las bolsas con las mercancías en el suelo, justo frente a la puerta de la mansión y le preguntó—: No es por ofender, pero... ¿quién eres exactamente y qué haces aquí? —indiferente hacia ese tal HoSeok, le miró con algo de desagrado y sospecha.

— Oh eso. —chasqueó la lengua— Bueno, soy el hermanastro-hermano del sobrino-nieto del difunto señor Shin. —especificó.

¿Ah? Se había confundido, eran demasiadas palabras para YoonGi, YoonGi hizo un gesto raro sin entender—. Soy el hermano de JungKook, tu nuevo jefe. —oh, ahora sí que entendía.

Y eso significaba 3 cosas según YoonGi.

1-. El dueño de la mansión tiene un hermanastro-hermano.

2-. Su jefe se llama JungKook.

3-. El dueño de la casa ya está aquí.

Pero ahora venían las dudas.

¿En serio el dueño tenía un hermanastro?

Si Jin dijo que el nuevo jefe había pedido lo condones... ¿será que los condones son para alguno de esos dos hermanastros?

¿Será que el sobrino del señor Shin es joven mocoso? O sino, el sobrino del señor Shin es... ¿un viejo ruco ya mayor de edad independizado?

¿Sería guapo igual que el hermanastro?

《No YoonGi, dah. Es su hermanastro no son de la misma sangre, pendejo. Bueno ya, stop questions.》

—Entonces... El nuevo señor de la casa ya está aquí? —miró a HoSeok para que le respondiese y éste solo asintió enérgicamente. Comprobado.

Ahora sí, YoonGi sacó las llaves de su bolsillo trasero y abrió la gran puerta, YoonGi recogió las bolsas que llevaba en mano del suelo, primero entró HoSeok y de ahí él quien safaba la llave de la cerradura de la puerta, para después cerrar detrás de sí mismo.

— ¡Ya llegué! —avisó gritando. Algo típico en YoonGi cuando llegaba a la mansión. Y, en su gran grito, HoSeok dio un salto del susto con un pequeño ah que salió de los labios del pelirojo, mientras maldecía a lo bajo dado a que el estúpido de Min lo había asustado feo.

— ¡No vuelvas a hacer eso! —advirtió tomándose por el pecho, entrecerró sus ojos y los volvió a abrir soltando un suspiro seco, el corazón del pelirojo estaba acelerado por el susto.

— ¿EH? —volteó a ver con rareza a HoSeok— ¿Por qué? —arqueó una ceja.

— Me asustaste. —dijo irónico.

— ¿Vas a vivir aquí? —le preguntó aún con la ceja arqueada.

—Tal vez sí, no lo sé, quiero ayudar a mi hermano en lo que sea posib... —YoonGi le calló interrumpiendo las palabras del pelirojo.

— Acostúmbrate. —mencionó. Se encaminó cargando las mercancías hasta la cocina junto a HoSeok, cuando llegaron en la cocina, no había nadie en lo absoluto—. ¿Y los demás? —preguntó volteando a ver hacia sus lados, al no ver a nadie a su alrededor miro hacia HoSeok.

— En el despacho o más bien, la nueva oficina de mi hermano, según lo que sé, les está asignando sus nuevos horarios a todos los empleados. —explicó.

YoonGi asintió desinteresado.

•••

En los 7 años en los cuales JungKook había estado trabajando en la empresa de su padrastro, aprendió a valerse de si mismo en muchas cosas en las cuales se necesita demasiada responsabilidad; y sin ayuda de nadie en lo absoluto, tuvo problemas, sí, pero los superaba sólo. Y, ahora que se daba cuenta, algunos de sus problemas provenían de JiMin, lo bueno que terminó su relación con él lo antes posible. JiMin no era algo negativo, no, pero simplemente JungKook ya no quería verlo ni en pintura, por el momento preferiría estar solo.