Empecé a abrir los ojos, tenía un poco de dolor de cabeza y me sentía débil. La resolana que se colaba por la ventana me calaba en los ojos, reconocí la habitación al instante, era la habitación del hospital. Cuatro paredes blancas, una cama individual, suero en mi brazo y un bulto en un sofa a un lado de la cama. Intenté levantarme pero sentí una punzada en mi brazo derecho, inconscientemente gemí de dolor y el bulto que se encontraba a mi lado se movió rápidamente al escucharme.
— ¿Estás bien?— preguntó preocupado con esos ojos cafés tan brillantes—
— Si... ¿Qué paso?
— Te desmayaste, te atrapé antes de que tocaras el piso pero tu brazo alcanzó la navaja y te cortó un poco— hizo una mueca—
Giré mi cabeza y miré hacia mi brazo, y efectivamente, mi brazo tenía una benda.
— Bueno, supongo que te debo de dar las gracias.
— No tienes que...
— Tienes razón, no debo.
— ________...
— ¡Cariño!— entró mi tía a la habitación interrumpiendo a Danial— ¿Qué fue lo que paso?
— Bueno--
— No me digas— interrumpió— seguramente fue culpa de Danial, sabía que era una mala influencia, no debí dejar que salieran porque--
— ¡Basta!— regañé—
— ¿Qué?— agarró su cabeza con ambas manos— es que como--
— Solo basta, ¿si? no estoy de humor— esquivé su mirada—
— Estoy preocupada— tomó mis manos— eres lo único que tengo, si algo te pasara no me lo perdonaría jamás, ni tu madre ni a mi misma— sus ojos se llenaron de lágrimas—
— Pero estoy bien. Sana y salva, mirame— le dí una suave sonrisa—Danial me salvó— lo miré y él me miraba a través de sus largas pestañas— siempre está ahi— susurré y la miré de vuelta—
— Tienes razón— limpió cualquier rastro de lágrimas de su rostro—
— El doctor dijo que ya venía pero ya tardo, iré a ver que pasa— me sonrió, besó mi mejilla y se retiró de la habitación—
— Así que— caminó hacia mí— ¿siempre te salvo?— un rastro de sonrisa surgió de su rostro—
— No te hagas ilusiones, Malik, lo hice para salvar tu lindo culo.
— Lenguaje— me regañó y rodeé los ojos— Sabes que yo estoy para ti cada segundo ¿verdad?
Resoplé— No lo sé, a estas alturas ya no lo sé— miré hacia la ventana—
— Quiero que hablemos.
— ¿No lo estamos haciendo ya?— respondí con indiferencia—
— Quiero decir, sobre lo ocurrido, ¿por favor?
— ¿Y si me niego?— lo miré, gran error. Esos ojos avellanas estaban taladrando mi alma—
Traté de apartar la mirada pero no pude, creo que una de las cosas que más amo de él son sus ojos.
— ¿Me dejarás explicarte?— pidió en tono de súplica, suspiré—
— Tienes un minuto..
El sonrió, pero no como lo hacía antes.
— Te explicaré de principio a fin— aclaró su garganta— primero te contaré sobre Rodríguez, los chicos y yo trabajabamos para él porque era una forma fácil de conseguir dinero, comenzamos hace 5 años. Al principio todo era fácil pero él cada vez nos daba más encargos y amenazaba con matarnos— rió sin humor— que te secuestrara fué la gota que derramó el vaso, yo solo pensaba en encontrarte. Su hijo siempre trató de ser como él pero el muy idiota jamás le llegará a los talones por que simplemente es muy estúpido— se encongió de hombros— lo que trato de decir es que jamás te conté de Lee porque no quería meterte en más de mis mierdas, quería mantenerte fuera de todas esas porquerías en las que me metí— suspiró—
ESTÁS LEYENDO
Adrenaline (Danial Malik y tu) Terminada
Teen FictionAlguna vez habéis estado en una montaña rusa? Esa sensación de que vas a morir en cual quier momento y lo pasas fatal pero la adrenalina te puede y vuelves a subir una y otra vez? Digamos que algo así es el amor.El no podía parar de parecer el menos...