Abby:
Estábamos en un hermoso parque, lleno de juegos y pequeños almacenes donde podías comprar lo que quisieras. Había muchos niños jugando por todos lados, mientras los padres estaban sentados en un hermoso y bien cuidado césped. Alex y yo estábamos bajo un árbol que tenia toda sus hojas verdes, mientras nuestro pequeño hijo corría por todo el parque, tirándose juego por juego.
-Es igual de hermoso que tú – dijo Alex besándome la nuca
-Se parece demasiado a ti, sobre todo en el genio – le bese la comisura del labio
-No me tientes amor – dijo riendo
-¿Qué no te tiente? Pero si no he hecho nada – me encogí de hombros
-¿A si? – rió - ¿Qué sucede si te beso salvajemente frente a todas estas personas? – me tomo de la cintura
-Pues, primero que todo, el pequeño travieso se pondría a llorar para que sueltes a su mami – reí
-¿Segundo? – rió
-Segundo… - pensé – saldría corriendo antes de que me pillaras para hacerlo
-No te creo – sonrió ampliamente
-Créelo – me levante de su lado y me puse frente a él
-¿Quieres apostar?
-Por supuesto
-¿Qué quieres apostar?
-Tu haces todo lo que hago en casa si gano
-¿Y si no ganas? – Sonrió – eso será obvio
-Si no gano, salgo hacer ejercicio contigo – se le iluminaron los ojos al escuchar eso
-¿En serio?
-En serio – asentí
-No te creo
-Pues créeme, porque estoy dispuesta hacerlo si me ganas
Alex me había jodido estos tres putos años para que saliera con él hacia el gimnasio, o a cualquier lado a trotar, así que estaba dispuesta a correr ese riesgo
-Trato mi amor – estiro su mano, La tome
-Trato – Salí corriendo a penas pronuncie la palabra. Pare para mirar hacia donde estaba nuestro hijo, y ahí estaba jugando con unos niños a la pelota. Mire ha Alex que venia a toda prisa hacia mi, así que empecé a correr nuevamente sin rumbo
-Abby – grito riendo – te alcanzare, de nada te sirve correr – tome una pelota que se encontraba en el suelo y se la lance – no se vale si lanzas cosas
-No es mi culpa que seas una tortuga – respondí con la respiración irregular
Parecíamos niños corriendo por todo el parque, incluso, estábamos peor que los niños que estaban en el parque. Ellos estaban solo jugando tranquilamente en cualquier parte, y nosotros corríamos como locos que escapan del hospital siquiatrico
-Abby – grito nuevamente – ya basta de correr, me canse – puso ambas manos en sus rodillas y comenzó a respirar agitadamente
-Alex, ¿Estas bien? – pregunte poniéndole una mano en la espalda
-Ahora si – me miro. Fruncí el ceño
-¿Ahora si? ¿Y por que?
-Porque estas a mi lado – me tomo de la cintura y me beso – gane – dijo en mis labios
ESTÁS LEYENDO
Reglas de amigos
RomanceAbby es la chica que sale a todos lados con su mejor amigo, Alex. Lo que ellos no sabian, era que toda su amistad de ocho años ibá a acabar por qué uno de los dos se iba a enamorar. ¿Cual de los dos se enamoraria? ¿Le correspondería? TODOS LOS DE...