Una travesura, un viaje al pasado

Dominique Weasley

Una vez que todos estaban en su lugar, entro otro encapuchado con un paso veloz, se paró delante de todos y se quitó la capucha, revelando a una muchacha ligeramente más baja que Victoire, pelirroja como todos los Weasley y unos ojos azules, su cara estaba enmarcada con una expresión de enojo.

— Hogwarts, mi nombre es Dominique Weasley...

— Bueno sobrina ¿por qué estás tan enojada? — preguntaron los gemelos Weasley.

— Sin contar el hecho de que estamos en el bendito pasado, acabo de tener una discusión con unos torpes de allá — termino con una mueca.

— ¡Oye! — se escuchó una voz mujer al fondo.

— No me refiero a ti cariño.

— Esta bien Domi, continúa.

— Bueno la pelea no importa, continuare con mi presentación, mis padres son Bill y Fleur — dijo provocando que los gemelos chiflaran — tengo 19 años, fui Gryffindor, jugué quidditch, no fui prefecta ni premio anual, eso de tener buenas calificaciones no era lo mío y tampoco eso de seguir las reglas...

— Muy bien sobrina, ya era hora de que saliera alguien así — dijo Fred.

— Pero solo han pasado tres — dijo Hermione.

— Y los que faltan — murmuró Dominique — Bueno, actualmente soy jugadora de quidditch profesional y aunque Teddy y Victoire olvidaron decir sus empleos los diré yo, Teddy es profesor de DCAO en Hogwarts desde hace dos años y Victoire trabaja en el ministerio en departamento de servicio de apoyo a hombres lobo y bueno eso es todo — dijo dirigiéndose a la quinta mesa junto a los demás.

— Vaya, todos ustedes tienen trabajos muy interesantes — dijo Remus.

— Y en los cuales probablemente nos meteremos en problemas si no regresamos en el mismo momento en el que nos fuimos — dijo Teddy.

— Me preocupa más como se pondrán nuestros padres cuando regresen y vean que no estamos — murmuro Victoire.

— Bueno jóvenes, es hora de recoger las cosas del desayuno, tienen cinco minutos libres — dijo el profesor Dumbledore.

— Ahorita vengo chicas — les dijo Teddy.

— Ya me quiero ir.

— Todos linda, todos.

— Hola chicos — dijo Teddy saliendo del comedor, viendo como todos estaba tirados en el piso.

— ¿Qué tal Teddy Bear?

— Todo es tan abrumador allá adentro, la forma en que todos te miran, las preguntas que te hacen y las que sabes que te quieren hacer pero por alguna razón no lo hacen — dijo Teddy abrazando a la chica que le había preguntado y todos supieron que se refería a hablar de la muerte de sus padres delante de todos.

— Entre más pronto terminemos con las presentaciones mejor.

— Bueno, vamos adentro Tedd.